La asociación profesional Justicia para la Guardia Civil (Jucil) ha denunciado la falta de plantilla en Ceuta, donde -según sus datos- cuatro agentes vigilarán el paso de más de 20.000 personas y 3.000 vehículos al día. Es por ello por lo que piden al Gobierno que despliegue al Ejército "de manera puntual" para reforzar y garantizar la seguridad de los puestos fronterizos.

La dirección de Jucil se ha desplazado a Ceuta este lunes, en víspera del primer aniversario de la avalancha que entró en la ciudad autónoma ante la pasividad de la policía marroquí por la decisión de España de acoger al líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, para ser atendido de covid-19 y de que este martes se reabra la fronteras con Marruecos tras permanecer cerradas desde marzo de 2020 por la pandemia.

"Estamos hoy en Ceuta para recordar que, pese a las promesas de los políticos, nada ha cambiado en esta frontera", ha denunciado el secretario general de esta asociación, Ernesto Vilariño. "En Ceuta estimamos que hace falta un aumento de la plantilla en torno a los 200 agentes y la creación de una Unidad de Seguridad Ciudadana [USECIC]", ha defendido.

Al pie de la valla, Vilariño ha llamado la atención sobre la "clara desproporción" existente entre la misión de controlar los puestos fronterizos que tienen asignados los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y los medios para conseguirlo, de ahí que hayan insistido en la necesidad de que se incrementen las plantillas y exista una Unidad de Seguridad Ciudadana con base en Ceuta para evitar que tengan que desplazarse desde otras bases.

"En las actuales condiciones no hay personal para atender la vigilancia de la valla, el control de los pasos fronterizos por tierra y la llegada de viajeros al puerto a través de los ferris que cruzan el Estrecho de Gibraltar", expone Vilariño, por lo que insta al Ejecutivo a estudiar la movilización del Ejército.

Riesgo de "nuevos altercados"

Asimismo, Jucil teme que la inminente reapertura de los pasos fronterizos entre Ceuta y Marruecos genere "nuevos altercados" ante el anuncio del país vecino de que intentará controlar el denominado 'comercio atípico': decir; el paso de mercancías hacia las ciudades marroquíes transportado a pie por miles de porteadores que posteriormente se vende en los supermercados evitando la fiscalidad de la frontera.

El secretario general de Jucil ha mantenido un encuentro con el presidente de Ceuta, Juan José Vivas, a quien ha presentado un informe con propuestas de mejora concretas para el refuerzo y la modernización del paso fronterizo de El Tarajal. "Este refuerzo y modernización del paso de El Tarajal es más que necesario dada la afluencia de gente que se espera. En la etapa anterior a la pandemia provocada por el coronavirus cruzaban del orden de 20.000 personas diarias y unos 3.000 vehículos. Para el control del paso fronterizo ante este número abrumador de personas hay del orden de 2 a 4 guardias civiles y en torno de 15 a 20 integrantes del Cuerpo Nacional de Policía", sostiene.

De igual forma, Jucil reclama que se refuercen los sistemas de control y la plantilla que lleva a cabo su servicio en el puerto de la ciudad, ya que "en la estación marítima a la que arriban y salen los ferris con destino a la península cuenta en la actualidad con 1 ó 2 guardias civiles por turno y de 2 a 3 policías nacionales, además de 1 o 2 guardias civiles especialistas mecánicos encargados de buscar escondrijos e infraestructuras ocultas en los vehículos, junto con 1 o 2 guías caninos".