El pasado 13 de marzo apareció en la ría de Arousa un objeto alargado, semisumergible y con pinta de narcosubmarino. Los agentes de la Guardia Civil lo localizaron a una milla de la costa de Vilaxián. El trabajo para sacarlo a flote fue arduo. En una primera inspección los agentes del GEAS no consiguieron acceder a su interior. Pasaron varias jornadas realizando mediciones hasta sacarlo a la superficie. De ahí lo llevaron a tierra, al puerto de O Xufre, en un municipio de Pontevedra.
Se parecía mucho al que se encontró hace casi cuatro años en la ría de Aldán. Todo parecía apuntar a que era una embarcación utilizada por los narcotraficantes desde el otro lado del atlántico para hacer llegar su mercancía a España para luego distribuirla por el resto de Europa.
La sorpresa saltó durante la semana. Cuando por fin se consiguió ‘abrirlo’, la sorpresa es que no llevaba ni carga ni tripulantes. Algo no cuadraba en todo aquello. Tenía 22 metros de eslora y llevaba en uno de sus laterales una inscripción donde se podía leer ‘Poseidón’. Los especialistas calculan que tiene una capacidad para transportar cinco toneladas de cocaína.
Fabricación casera
Este submarino mide 20 metros de largo y es de fabricación casera. El material empleado es fibra de vidrio. Su interior estaba dividido en tres compartimentos o espacios separados. El delantero, que se corresponden con la parte de la proa, es una cámara inundada de agua para estabilizar la embarcación.
La parte central es donde, según los agentes, iría la carga de droga. La última zona, la trasera, se encuentra forrada con plomo. Este material permitiría aislar el motor y evitar ser detectado en los radares, que utilizan los sensores de calor.
La principal hipótesis que manejan los investigadores es que los responsables de este semisumergible habrían logrado descargar la droga que iba en su interior y, tras completar la operación, optaron por hundirlo de manera deliberada. Por ahora la investigación sigue abierta.
A finales de febrero aparecieron varadas en una playa de A Coruña dos embarcaciones grandes, con potentes motores y de 12 metros de largo. Las mismas que utilizan los narcos para cruzar a toda velocidad el Estrecho de Gibraltar y traer droga desde Marruecos, en este caso hachís. Aquel suceso cobra ahora relevancia con la aparición del narcosubmarino ‘fantasma’ de Arousa.
Parece que las piezas podrían encajar. La Policía Nacional, la Guardia Civil y el Servicio de Vigilancia Aduanera "estaban sobre aviso" de un alijo de droga "que podía entrar en Galicia". Los objetivos ahora son dos: averiguar dónde ha ido a parar ese supuesto alijo y analizar la embarcación para lograr identificar la red de narcotráfico del que proveía.
El foco en La Línea
En los últimos años se ha puesto el foco en el mercado de estupefacientes en la zona de Algeciras y La Línea de la Concepción. La cercanía con Marruecos, unido a las circunstancias sociales y económicas de la zona han convertido aquello en lo más parecido a Medellín que hay en Europa. Los narcos han llegado a montar una cooperativa para abaratar costes.
Los agentes del Plan Especial de Seguridad en la zona detuvieron e investigaron a 5.827 personas por narcotráfico e incautaron 272,9 toneladas de droga en 2022.
En total, el año pasado se efectuaron 4.698 operaciones policiales contra el narcotráfico y el contrabando dentro de este plan que se inició en 2018 para luchar contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar. Posteriormente se ha ampliado su área de acción, primero a Huelva y Málaga y después a Almería, Sevilla y Granada.
Según ha informado el Ministerio del Interior, el 91% de las operaciones realizadas en el marco de este plan se dirigieron contra organizaciones dedicadas al narcotráfico y contrabando. El resto, 420, contra redes de blanqueo de capitales y otros delitos conexos.
En el Campo de Gibraltar se desarrollaron 858 operaciones, un 68 % por narcotráfico y contrabando, y el 32 % restante por blanqueo de capitales y otros delitos.
"Ruta africana"
Este avance del narco en el sur de la península ha obligado al Estado a intensificar la lucha contra los señores de la droga en aquella parte del país. Se han desplazado a agentes de la Policía y de la Guardia Civil hasta el municipio gaditano para allá. Eso ha provocado que se queden desprotegidos algunos flancos, como la costa gallega, que tuvo su apogeo hace décadas y donde las bandas vuelven a ver un hueco del que nunca dejaron de irse.
En 2022 se interceptó un barco rumbo a Galicia con 3,3 toneladas de cocaína a bordo. Partía desde Senegal y fueron detenidas 16 personas. La investigación sobre esta organización comenzó a principios de 2022 y permitió confirmar que la conocida como “ruta africana” ha pasado a ser uno de los itinerarios más utilizados por las grandes organizaciones de narcotraficantes.
"Más medios"
El presidente de la Fundación Galega contra o Narcotráfico, Fernando Alonso, en declaraciones a los medios en el puerto de Vilaxoán, ha advertido de que el hallazgo de este narcosubmarino, aunque vacío, es "la punta del iceberg".
Alonso ha señalado que se trata de una "bofetada de realidad" que pone de manifiesto una evidencia: los narcotraficantes están introduciendo la droga también bajo el mar, y las fuerzas de seguridad "no están preparadas" para ese tipo de transportes.
"No sé qué más necesitamos para hacer un Plan Especial en Galicia. Estamos descuidando la seguridad en cuanto al tráfico de cocaína", ha proclamado y ha reclamado "más medios" para luchar contra este tipo de delincuencia.
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