La mayoría del pleno del Congreso de los Diputados votará hoy a favor, con al menos 208 apoyos, la reforma impulsada por el PSOE, vía proposición de ley orgánica, de la ley de garantía integral de la libertad sexual, tras acordarse varias enmiendas entre socialistas y populares y con la mayoría de los socios de investidura y Unidas Podemos en contra. De hecho, los ataques al pacto han sido una constante durante las intervenciones previas a la de la portavoz popular Cuca Gamarra. Voces como la portavoz de Igualdad de ERC Pilar Vallugera ha mencionado que esta modificación legal "no es una muestra de respeto" a sus socios de Gobierno, en referencia a los morados. "¿Son conscientes de lo que están haciendo?", ha preguntado, haciendo hincapié en los últimos "tres años machacando con que el PP no es feminista" para acordar cambiar una con ellos. Por su parte, la representante de Unidas Podemos, Lucía Muñoz, ha apelado a que "el PP habla de derogación parcial" y el PSOE no debe "camuflar en cuestiones técnicas" el pacto.

Precisamente de "derogación" ha empezado hablando Gamarra ya desde la tribuna de oradores. "Tras más de mil revisiones de sentencia, bajadas de penas a agresores; tras más de un centenar de excarcelaciones y casi 200 días, hoy la sociedad tiene la mirada puesta en un Congreso (...) que deroga la ley". La portavoz del PP ha mencionado que con ello, se "para esta sangría que no debió empezar" a pesar de conocerse "los efectos" en el Consejo de Ministros. "Nadie puede entender que se haya tardado tanto, que el poder legislativo haya fallado porque una mayoría parlamentaria no quiso darse por enterado", ha añadido la diputada y secretaria general del PP nacional.

Gamarra, que ha repetido un discurso muy parecido al de la última rueda de prensa posterior a la reunión de portavoces parlamentarios del martes, ha cargado contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, señalando su ausencia. "Es culpable" y "hoy está ausente", ha alertado la popular, omitiendo, eso sí, que el jefe del Ejecutivo se encuentra de visita institucional en el Parque Nacional de Doñana. Algo que hace días después de desatarse la polémica tras el primer paso dado por el Parlamento de Andalucía para permitir los regadíos superficiales en los cultivos de la fresa de Huelva. "El goteo va a seguir, y las mujeres van a estar victimizadas" ha admitido Gamarra, que ha acusado también a Sánchez de pedir "un falso perdón no motivado por el arrepentimiento" por "el efecto electoral que esta sangría estaba produciendo". Lo ha hecho en referencia por la última entrevista del líder socialista en El Correo.

Gamarra, igualmente, ha cargado contra las políticas del Gobierno. "Estamos ante el peor ejemplo de la política, porque ante la sangría [de revisiones], las prioridades eran otras", ha expresado aludiendo a la derogación de la sedición. "Aquí se reducían las penas por corrupción, se dedicaban a otras cosas". Ello frente a "una de las medidas más crueles e irresponsables" tomadas. Algo que ha calificado de "inédito en democracia" y por lo que, ahora, el Gobierno deberá "censurarse a sí mismo". "Ustedes son ejemplo de los monstruos que genera la soberbia [en alusión a Sánchez] y el populismo [al resto de socios]", ha insistido la popular señalando que "ha habido informes" que advertían de estas consecuencias durante la elaboración de la ley. Y "han estado llamando fachas a los jueces y hablando de 'bulos machistas'".

Tras ello, la portavoz popular ha reivindicado la labor de los suyos, sobre todo de las diputadas Marta González, portavoz de Igualdad, y de Carmen Navarro, vicesecretaria de Políticas Sociales en Génova. Y ha ensalzado que el PP, al contrario de "un partido centrado en el marketing" piensa en "el bien común". "Se ha puesto de manifiesto que hay otro tipo de política: una para adultos. Hemos negociado, pactado y devuelto la confianza social con un texto que recupera el Código Penal de la democracia". "Hemos devuelto delitos que han sacado ustedes [con la mirada fija en la bancada azul]. Lo ven como una derrota política, pero es una victoria de la sociedad española", ha concluido Gamarra, reivindicado a Alberto Núñez Feijóo como alternativa política y exigiendo responsabilidades al Gobierno, no solo disculpas.

Vox insiste en que no quiere ser "cómplice"

Frente a la diferenciación del Gobierno hecha por Gamarra, la diputada de Vox Carla Toscano ha dicho que el PP "ya no es alternativa si van a seguir colaborando con la ideología" del PSOE y "por encima de la igualdad". "Si van a seguir el camino de Sánchez, apárense y dejen a Vox seguir la batalla. El verdadero soldado lucha por lo que tiene detrás, no por lo que odia", ha insistido Toscano.

Vox no participará en la votación de hoy. La representante de ultraconservadora ha arremetido contra los que, como la delegada del Gobierno Victoria Rosell, rechazan el punitivismo. Porque, a su juicio, denota que "querían que los agresores salieran a la calle". "Las feministas odian a los hombres, educan y adoctrinan a nuestros hijos a golpe de ley para difundir miedo. Se pisotea la presunción de inocencia, se roba la vida, los hijos y el honor a los hombres". Y se les viste a los agresores sexuales de "víctima del sistema patriarcal, del capitalismo y hasta de Franco", ha ironizado Toscano.

Para ella, las fuerzas de izquierda "desprecian a la mujer" y la "han vaciado de significado" con leyes como la Trans. "Nunca un gobierno ha hecho tanto daño a la mujer, cuando se unen estos elementos [los anteriormente mencionados], salen cosas como esta ley, en la que no se han tenido en cuenta las enmiendas de Vox, ha afeado. Aun hubiéndo votado a favor de ellas el PP, Vox admite en privado que no habría votado abstención a la reforma.