El proceso comenzó tras su legalización. La izquierda abertzale iniciaba una nueva senda en la que, además de afrontar una ‘mutación’ con la que dejar atrás el pasado de apoyo al terrorismo -que aún hoy le persigue y tiene pendiente-, buscó abarcar un amplio espacio de la izquierda en Euskadi. Es ahí donde surge la fórmula de la coalición: nace EH Bildu. Bajo sus siglas, además de la heredera de la histórica HB, que tras la sucesiva lista de marcas terminó denominándose Sortu, supo atraer bajo su manto a otras sensibilidades de la izquierda vasca como Eusko Alkartasuna, fundada como socialdemócrata, y otras fuerzas menores como una parte de Aralar, sectores de Ezker Batua y marcas como Alterbatiba.

El último giro de absorción en este espectro ha llegado al entorno de Elkarrekin Podemos. Lo ha hecho nada menos que granjeándose la simpatía de quien fuera su secretaria general en Euskadi, Nagua Alba, quien ya ha manifestado su apoyo al candidato de EH Bildu a la alcaldía de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre. Alba lideró la formación morada entre marzo de 2016 y diciembre de 2017. Fue una de las diputadas más jóvenes en el Congreso de los Diputados entre 2016 y 2019.

Ahora, desligada de la política, no ha dudado en hacer público su respaldo al cabeza de lista de Bildu, en lugar de al candidato de Podemos, Víctor Lasa. En una carta publicada la semana pasada Alba arremete contra el modelo de ciudad en la que ha convertido San Sebastián la gestión del PNV, “dos legislaturas de agresión y degradación” y ante la que defiende al candidato de la izquierda abertzale e insta a los votantes de la capital guipuzcoana a apoyarlo “para cuidar de ella”.

Se trata de un movimiento más en la estrategia por un “frente amplio” que Otegi siempre ha defendido para consolidar una mayoría de izquierda cada vez más sólida en Euskadi. La transformación del discurso, en el que se ha relegado y ha perdido peso las reivindicación soberanista e independentista en favor de objetivos sociales, ha permitido ensanchar el espacio hacia sectores progresistas vascos alejados del nacionalismo.   

Sortu 'fagocita' a Podemos

En esta campaña la coalición abertzale vuelve a contar con otro apoyo relevante procedente en este caso del Partido Socialista de Euskadi. Quien fuera consejera del Gobierno de Patxi López, Gemma Zabaleta, participó ayer –con intervención incluida- en un acto electoral con la candidata a la diputación de Gipuzkoa, Maddalen Iriarte. No es la primera ocasión en la que Zabaleta se deja ver junto a dirigentes de EH Bildu. Lo ha hecho desde hace años. Más aún desde que en 2017 se dio de baja del partido en el que había militado desde siempre el PSE, por su apoyo a la aplicación de artículo 155 en Cataluña.

Ni siquiera la polémica por la inclusión de expresos de ETA en algunas de las listas municipales de la coalición que lidera Arnaldo Otegi ha evitado que desde otras siglas manifiesten públicamente su apoyo a EH Bildu. En los últimos años formaciones como Elkarrekin Podemos han respaldado las reivindicaciones que en materia penitenciaria han venido reclamando desde la izquierda abertzale para los presos de la banda terrorista. Tanto Zabaleta como Elkarrekin Podemos han secundado las marchas anuales que se han venido celebrando.

Una confluencia entre Podemos y EH Bildu que puede terminar por fagocitar a la marca en favor de Sortu. Las encuestas de cara al 28-M auguran una pérdida de apoyos importante en los principales feudos de Elkarrekin Podemos. El último sondeo del Gobierno vasco preveía que la marca morada perderá un escaño en cada uno de los ayuntamientos de las tres capitales vascas, asiento que en cambio lograba absorben EH Bildu, principal beneficiada de la caída de Po0demos en el País Vasco.

"Generar complicidades" en la izquierda

Hace ahora cuatro años fue la propia Podemos la que lideró la llamada a construir una confluencia de izquierda que incluyera al PSE para poder así hacer frente a la mayoría institucional que posee el PNV y que le permite mantener una alta cuota de poder en Euskadi desde hace décadas. La posibilidad de trabajar una alianza entre Podemos, EH Bildu y el PSE no ha llegado a fraguar en estos años, no tanto por la formación morada como por los socialistas, más partidarios de seguir entendiéndose con el PNV.

En la lista de apoyos de otras familias políticas a Gema Zabaleta le ha acompañado en muchas ocasiones Javier Madrazo, quien también fuera consejero de Políticas Sociales del Gobierno vasco en tiempos de Juan José Ibarretxe. Madrazo, que durante tres lustros lideró Ezker Batua-Izquierda Unida en Euskadi, ha secundado numerosos actos promovidos por Otegi e EH Bildu. Tanto Madrazo como Gema Zabaleta fueron dos de las firmas del manifiesto que en junio de 2022 suscribieron una distintas personalidades e intelectuales vascos en favor de “generar complicidades” para una alianza de izquierda de amplio espectro.