Ahora sí. El giro hacia la derecha que los electores impulsaron con sus votos en las elecciones municipales del 28-M se materializaba este sábado, 17 de junio, con la constitución de los ayuntamientos de toda España. Un vuelco que se ha traducido finalmente en un mapa de poder local teñido de azul. Pero no solo de azul PP. También con verde Vox. Porque la formación de Alberto Núñez Feijóo se ha lanzado a firmar pactos con el partido de Santiago Abascal en decenas de consistorios en todo el país. Es más, gobernarán juntos en cinco capitales de provincia —Valladolid, Burgos, Toledo, Ciudad Real y Guadalajara—, y hasta han firmado un pacto programático en otra más, Huelva, y dirigirán en coalición importantes urbes medias —Móstoles, Leganés, Alcalá de Henares, Elche, Níjar, Calvià o el cinturón industrial de Zaragoza—.

Los pactos de PP y Vox, pues, ya no son una rareza, sino una realidad ya tangible que marcarán la vida de millones de ciudadanos en España, especialmente en áreas tan sensibles como igualdad o seguridad ciudadana. Uno de los titulares claros de una jornada que se desplegó con normalidad y que siguió el guion, salvo con una sorpresa: la resolución a última hora de la investidura del nuevo alcalde de Barcelona, la segunda ciudad española. El socialista Jaume Collboni logró el bastón de mando gracias al apoyo de los comunes y del PP. Una mayoría absoluta de concejales que pulverizó el Gobierno de coalición que ya tenían preparado Junts y ERC y que iba a hacer alcalde al posconvergente Xavier Trias.

Los pactos con Vox no son ya una rareza, sino una realidad ya tangible. Según la ultraderecha, son 140 municipios en los que está en el Gobierno

En números, el ganador absoluto del 28-M y también de este 17-J fue el PP, frente a una izquierda que tuvo que asumir una dramática pérdida del poder local, con la única salvedad, in extremis, de Barcelona. Los populares se hicieron este sábado con la alcaldía de 30 capitales de provincia —del total de 50: o sea, el 60%— y con la presidencia de la ciudad autónoma de Ceuta. Melilla también será suya, y por mayoría absoluta, pero más adelante, cuando se resuelva la impugnación que este domingo podría presentar Coalición por Melilla. Así, el PP triplica su fuerza, porque el mandato 2019-2023 concluyó con solo 12 capitales en sus manos. El PSOE, mientras, pasa a dirigir solo diez capitales (lideraba 22), a las que probablemente se unirá León, cuya sesión constitutiva se pospone hasta el 7 de julio por el recurso de Vox.

Pero el premio inesperado de la jornada para los socialistas se produjo en Barcelona, ya por la tarde. Las bases de ERC y Junts habían avalado el pacto que hacía alcalde a Trias y bendecido un Ejecutivo de coalición. Pero ambas formaciones no sumaban mayoría absoluta. De ahí que todo cambiara pasadas las 16 horas, cuando los comunes de Ada Colau anunciaron que apoyarían a Collboni y pasarían a la oposición.

Para Ferraz, la decisión del PP, "a regañadientes", evita a Feijóo "un nuevo ridículo" en sus pactos. Génova pone el acento en que actúa "por responsabilidad"

La presión entonces pasaba a los cuatro concejales del PP, que tenían que decidir si se votaban a sí mismos, lo que de facto concedía la vara de mando a Trias, como lista más apoyada por los ciudadanos en los comicios, o bien apoyaban a Collboni, removido el que para ellos era el mayor obstáculo: la hipotética presencia de los comunes en el Ejecutivo. El socialista conquistó finalmente la alcaldía con sus votos (10), los de Colau (9) y el PP (4), en un pleno en el que se mascaba la tensión de principio a fin y en el que dominaban los rostros desencajados. De todos.

Para Ferraz, la decisión final de los populares, "obligada y a regañadientes", será buena para Barcelona y "evitará a Feijóo un nuevo ridículo en su política de pactos poselectorales". En todo caso, su lectura es que la elección de Collboni "confirma al PSC y al PSOE como la única alternativa al independentismo en Cataluña". La cúpula popular explicó su giro por "responsabilidad", para "retirar de la gobernabilidad" de la ciudad condal tanto al partido de Carles Puigdemont como a la izquierda "rupturista y soberanista que tanto daño ha hecho" a la capital catalana en los últimos ocho años.

14 mayorías absolutas... más Melilla

El 17-J mira directamente a las elecciones generales del 23 de julio. Por el nuevo tablero del poder local y las políticas de alianzas, que pueden influir en el resultado de los próximos comicios. Y eso explica los discursos de los dos grandes partidos.

El PP gobierna con mayoría absoluta en 13 capitales (más Melilla), en 12 en minoría, en cinco con Vox y en una más, Jaén, con los localistas de Jaén Merece Más. El PSOE solo tiene una absoluta, Soria

El PP lidera ya con mayoría absoluta 13 capitales de provincia (más Melilla, en breve): Madrid, Murcia, Málaga, Granada, Córdoba, Cádiz, Almería, Oviedo, Salamanca, Santander, Teruel, Logroño y Badajoz. En 12 gobernará en minoría y en cinco, en coalición con Vox: en Valladolid, Burgos, Toledo, Ciudad Real y Guadalajara. En una última, Jaén, la entente es con la plataforma localista Jaén Merece Más. Los socialistas solo disfrutan de una mayoría absoluta (Soria), y en el resto gobernarán o en minoría (A Coruña, Barcelona, Lleida y Tarragona) o en coalición con diversas fuerzas: en Lugo, con el BNG; en Vitoria, con el PNV; en Las Palmas, con Nueva Canarias y Podemos, y en Cuenca y Palencia, con plataformas locales, Cuenca Nos Une y Vamos Palencia.

Los populares permiten la entrada de Vox en el Ejecutivo de cinco capitales de provincia, pero solo en cuatro era realmente necesario (Toledo, Valladolid, Burgos y Guadalajara), porque en estas el pacto era clave para desalojar a la fuerza más votada, el PSOE, pero en la quinta, Ciudad Real, el PP era la lista con más apoyo ciudadano y no había alternativa por la izquierda. En Huelva, la nueva alcaldesa, la popular Pilar Miranda, no regirá el consistorio con la ultraderecha, pero los de Abascal sí la apoyaron porque había acuerdo programático por delante. Pero si se amplía el foco, los pactos PP-Vox se multiplican por toda España.

Son numerosos, así, los acuerdos con la ultraderecha: Elche —el primero que se firmó—, Móstoles (segunda ciudad madrileña), Alcalá de Henares, Valdemoro, Aranjuez, Villaviciosa de Odón, Colmenar Viejo, Galapagar —todos en Madrid—, Talavera de la Reina (Toledo), Torrent (Valencia), Orihuela, San Vicent del Raspeig —Alicante—, Tomelloso (Ciudad Real), Molina de Segura, Cieza —Murcia—, Calvià, Marratxí, Alcúdia —Baleares—, Lucena (Córdoba), Maracena (Granada), Níjar (Almería)... La dupla de populares y derecha radical también funciona en municipios del área industrial de Zaragoza (Utebo, María de Huerva, Cuarte de Huerva y Cadrete), además de en Daroca. En Gijón se ha formado incluso un tripartito entre Foro (que pone la alcaldesa, Carmen Moriyón), PP y Vox, que también desaloja a los socialistas del poder de la ciudad asturiana.

Alianzas PP-Vox hay por toda España: Móstoles, Alcalá, Villaviciosa, Talavera, Torrent, Tomelloso, Cieza, Maracena, Níjar, Utebo... En Gijón funciona un tripartito con Foro

La propia formación de Abascal hacía un cómputo de su presencia en gobiernos municipales: 140 en total, tras alcanzar acuerdos que "redundarán en beneficio de los ciudadanos". Los pactos suscritos contienen elementos en común: desaparición de las "concejalías ideológicas como las de Igualdad, que han dilapidado millones de euros de los ciudadanos" y asunción de áreas de seguridad, "trabajando para erradicar la violencia, la okupación, las agresiones sexuales y todo tipo de delitos de las calles". Ferraz ha contabilizado, a falta de una revisión tras la sesión constitutiva de este sábado, 187 municipios en los que al PP le hace falta el concurso de Vox, y en 52 de ellos el pacto era para desplazar al PSOE como fuerza más votada.

Y es que esa es otra conclusión de la jornada: los populares acaban, por la vía de los hechos, con el respeto a la lista más apoyada que tanto defendió Feijóo. Génova justifica que, una vez que el PSOE no se ha avenido a un acuerdo global para no subvertir el deseo de los ciudadanos, entonces ya no hay prevención que valga. Esa fue la justificación que puso por delante en Castilla-La Mancha, después de que el presidente Emiliano García-Page propusiera que funcionara en los seis grandes municipios de la región ese principio de la candidatura más votada. El PP lo rechazó de inmediato, y eso le ha permitido quedarse con cuatro capitales y ciudades medias como Talavera.

La CUP en Lleida, Jácome en Ourense, UPN en Pamplona...

El PP se hace con las principales ciudades del país, descontada Barcelona. Puede lucir mayoría absoluta en Madrid (José Luis Martínez-Almeida), ya desembarazado de Cs y sin el lastre de Vox. Arrebata a Joan Ribó (Compromís) Valencia y sitúa allí a María José Catalá, como también desaloja al socialista Antonio Muñoz de Sevilla para aupar a José Luis Sanz. En Zaragoza, gobierna en solitario Natalia Chueca, el relevo de Jorge Azcón, próximo presidente de Aragón, y en Málaga Paco de la Torre comenzó este sábado su séptimo mandato consecutivo, ahora con mayoría absoluta.

En Vitoria, llega a la alcaldía por primera vez una mujer, la socialista Maider Etxebarria, apoyada por PNV y PP. En Pamplona, es elegida Cristina Ibarrola (UPN), como lista más votada. El PSN no vota a Bildu

Los populares logran amasar un poder en Andalucía enorme, mayor incluso del que disfrutó el PSOE en sus mejores tiempos. Las ocho capitales son suyas: dos en minoría —Sevilla y Huelva, aunque en este caso con acuerdo de investidura con Vox—, cinco con mayoría absoluta —Bruno García en Cádiz, Paco de la Torre en Málaga, José María Bellido en Córdoba, Mar Vázquez en Almería y Marifrán Carazo en Granada— y una, Jaén, en coalición con Jaén Merece Más. Los socialistas apenas controlarán dos diputaciones provinciales, las de Sevilla y Jaén, y el municipio más poblado en sus manos es Dos Hermanas (137.000 habitantes). En la Comunidad Valenciana, pierden no solo la Generalitat, sino también Valencia —Ribó cogobernaba la ciudad con el PSPV— y Castellón, que ahora liderará en minoría Begoña Carrasco. En Alicante, continúa el popular Luis Barcala, a un concejal de la absoluta.

Un trío de mujeres, las tres del PP, estará al mando de las tres capitales de Aragón: Emma Buj repite en Teruel con mayoría absoluta y, en minoría, Natalia Chueca (Zaragoza) y Lorena Orduna (Huesca), la ciudad que el socialista Luis Felipe perdió por la división de la izquierda el 28-M.

En Vitoria, la capital de Euskadi, alcanza el poder por primera vez una mujer. Maider Etxebarria, investida con los apoyos de PNV y PP. Mayoría absoluta que desplazó a EH Bildu. Etxebarria gobernará junto a los nacionalistas vascos, en virtud del acuerdo global entre su partido, el PSE, y la formación jeltzale. Ambos dirigirán también Bilbao, en la que Juan Mari Aburto (PNV) repetirá como alcalde, igual que afronta un tercer mandato su compañero de partido Eneko Goia, que no obstante recibió la abstención del PSE y de Elkarrekin Podemos. Fuentes de la cúpula socialista señalan a este diario, sin embargo, que el objetivo es que haya gobiernos de coalición en las tres capitales vascas. En Durango (Bizkaia), el PNV, con el apoyo de PSE y PP, pudo recuperar el bastón de mando en la persona de Mireia Elkoroiribe, en detrimento de la izquierda abertzale.

El PSdeG y BNG se apoyan en Pontevedra, A Coruña, Lugo y Santiago. Ferrol pasa al PP, Caballero arranca un quinto mandato en Vigo y en Ourense el partido de Jácome y PP cruzan respaldos

En Pamplona, el PSN de la presidenta foral, María Chivite, cumplió su palabra y no ayudó a Joseba Asiron (EH Bildu) para alcanzar la alcaldía. Los ediles socialistas votaron en blanco y así, facilitaron que saliera elegida, como lista más votada, Cristina Ibarrola, que mantendrá para UPN el liderazgo de la capital navarra.

En Galicia, la izquierda retiene su predominio en las ciudades. Con algunos cambios en la correlación de fuerzas. Inés Rey y Lara Méndez continúan como alcaldesas en A Coruña y Lugo, la primera con apoyo externo del BNG y la segunda con los nacionalistas gallegos en su Gobierno. En Pontevedra, repite Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), en coalición con el PSdeG. El BNG también conquista la alcaldía de la capital autonómica, Santiago de Compostela, con Goretti San Martín al frente. Fue apoyada por los socialistas, pero estos quedan fuera del Ejecutivo local. Abel Caballero (PSdeG) fue investido regidor de Vigo por quinta vez tras volver a arrasar en las urnas. En Ferrol, nuevo cambio de color del Ayuntamiento, que del PSdeG ahora pasa al PP, con mayoría absoluta. Y Ourense seguirá en manos del polémico Gonzalo Pérez Jácome. Aquí se repitió el apoyo cruzado con el PP: los conservadores permitieron a Democracia Ourensana (DO) aguantar la alcaldía y a cambio esta les respaldará para conservar la Diputación provincial, al frente de la cual ya no estará Manuel Baltar. En Ourense no prosperó, pues, un pacto a la contra de PP, PSdeG y BNG para desbancar a Jácome.

En Cataluña, la CUP se hace por primera vez con una capital provincial: Girona. La formación antisistema, a través de la plataforma Guanyem, sitúa al frente del consistorio a uno de los suyos, Lluc Salellas, gracias a una coalición independentista con Junts y ERC, mayoría absoluta que derriba a los más votados, el PSC. Los socialistas, no obstante, coronan su incuestionable poder municipal con el regreso al control de Barcelona, la capital que ellos gobernaron ininterrumpidamente desde 1979 hasta 2011, y la reconquista de Lleida (con Fèlix Larrosa) y Tarragona (Rubén Viñuales). Las tres, por ahora, sostenidas en minoría. En Badalona, estos cuatro años los dirigirá el popular Xavier García Albiol, con una abultadísima mayoría absoluta.

Paco Guarido (IU) repite en Zamora

Los socialistas, en Castilla y León, solo encabezan Soria, con mayoría absoluta, y Palencia, en la que Miriam Andrés, con un acuerdo con Vamos Palencia, pone fin al mandato de Mario Simón (Cs). El PP gobierna con absoluta en Salamanca (Carlos García Carbayo), en minoría en Segovia (José Mazarías), y en alianza con Vox en Valladolid (Jesús Julio Carnero, que desplaza al socialista Óscar Puente) y Burgos (Cristina Ayala). En Ávila, revalida su puesto Jesús Manuel Sánchez Cabrera, candidato de Por Ávila, la formación localista escisión del PP, en minoría. Y en Zamora, repite para un tercer mandato consecutivo el único alcalde de capital de provincia de IU, Paco Guarido, con el apoyo del PSOE, con el que se espera que firme un acuerdo de gobierno.

El 17-J constata el abandono del PP del principio de la lista más votada. Arrebata varias alcaldías al PSOE, tanto capitales como Valladolid o Toledo, como localidades como Don Benito o Talavera

En Extremadura, el PSOE perderá la Junta merced a un previsible pacto de PP y Vox. Pero por lo pronto, ya ha cedido Cáceres a los populares —capitaneará la ciudad Rafael Mateos— y no ha recuperado Badajoz —la mantiene Ignacio Gragera, antes en Cs y ahora en el PP—, pero sí preserva con mayoría absoluta la capital autonómica, Mérida, con Antonio Rodríguez Osuna como primer edil. En Don Benito (Badajoz), llegó a la cúpula consistorial la formación Siempre Don Benito con el apoyo del PP, con el que regirá la localidad y con el que se turnará en la alcaldía. En el aire, la fusión con el municipio vecino, Villanueva de la Serena. Ambos desalojan al PSOE, partido más votado el 28-M.

En Castilla-La Mancha, García-Page sí aguanta el Gobierno autonómico con mayoría absoluta, pero el bajón de poder local es dramático: pasa al PP (y en coalición con Vox), tras 16 años, Toledo, de la que sale Milagros Tolón. El nuevo regidor es Carlos Velázquez. También gobernarán junto a la ultraderecha Ana Guarinos en Guadalajara y Paco Cañizares en Ciudad Real. En Albacete, Manuel Serrano ha preferido quedarse en minoría. Cuenca es la aldea gala de la región: la retiene el socialista Darío Dolz, en compañía con Cuenca Nos Une. En La Guardia, la candidata del PP, Marta Maroto, fue elegida nueva regidora con el apoyo de los ediles que se habían presentado por Podemos y que fueron expulsados por este pacto. Se acaban así 28 de gobiernos socialistas en la localidad toledana.

En Canarias, el PSOE se impuso en las dos capitales, en Las Palmas de Gran Canaria y en Santa Cruz. Pero solo dirigirá la primera. La exministra de Sanidad Carolina Darias sucede a su compañero Augusto Hidalgo y repite el tripartito con Nueva Canarias y Podemos. En Santa Cruz, funcionó la alianza de Coalición Canaria y PP que confirmó en la alcaldía al nacionalista José Manuel Bermúdez. Los dos partidos ya han firmado su acuerdo para cogobernar las islas y desplazar al actual presidente en funciones, el socialista Ángel Víctor Torres.

Rodríguez llama a las mujeres a censurar los "pactos de la vergüenza" del PP con Vox

Desde Canarias, desde Las Palmas, intervino la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez. Ella viajó hasta allí para acompañar a Darias, la principal alcaldesa socialista hasta que por la tarde llegó la sorpresa de Barcelona. La ministra criticó los "acuerdos de la vergüenza" entre el PP y Vox para gobernar las instituciones y acusó al PP de "vender las políticas de la mujer a una fuerza de ultraderecha", "cuestionando así el desarrollo de todas esas políticas públicas a lo largo de estos años".

Rodríguez remarcó, informa EFE, que el Ejecutivo estará "muy alerta, muy atento" para que esos pactos "sin complejos" del PP con Vox no hagan retroceder a los ciudadanos "un solo milímetro". Y ella misma llamó a las mujeres (tradicionalmente más cercanas al PSOE) a censurar esos acuerdos, en un mensaje que miraba al 23-J. Las palabras de Feijóo son de "cartón piedra", no creíbles, añadió su compañera de Gabinete Pilar Alegría, portavoz del PSOE, desde Zaragoza. El líder del PP se fue hasta Teruel, a la constitución del pequeño Ayuntamiento de Celadas, para mostrar su apoyo a la España rural y a las políticas de proximidad. Pero allí no hizo referencia a los acuerdos con la ultraderecha o al negacionismo de la violencia de género por parte de los de Abascal.