Los últimos detalles de la muerte de tres rehenes en manos de Hamás por el ejército israelí, que portaban banderas blancas cuando fueron asesinados por militares israelíes, ha colmado la paciencia de las familias del más de centenar de personas que siguen secuestradas en la Franja de Gaza. En un concentración este sábado en Tel Aviv, han exigido al gobierno de Benjamin Netanyahu que vuelva a retomar las negociaciones en Qatar para traer de vuelta "sanos y salvos" a los rehenes. Amenazan con nuevas concentraciones y acampadas para elevar la presión.

120 personas permanecen en manos de Hamás, según Israel

Los tres rehenes israelíes abatidos el viernes "por error" por las fuerzas israelíes en Gaza portaban una bandera blanca improvisada, ha reconocido este sábado el ejército, tras asegurar que los soldados habían violado las normas militares de enfrentamiento. Las Fuerzas de Defensa israelíes anunciaron este viernes la muerte de los tres jóvenes, horas después de recuperar los cadáveres de otros tres rehenes israelíes en Gaza.

"¡129 ataúdes no representan ninguna victoria! La trágica muerte de los rehenes en Gaza exige una acción inmediata: hacer todo lo posible para liberar con vida a los rehenes que quedan", claman los familiares de los rehenes que aún permanecen en la Franja, sometido a los indiscriminados ataques aéreos del ejército israelíes y a la operación militar terrestre. Según estimaciones de Israel, 120 personas permanecen en cautividad tras haber sido secuestradas durante el ataque de Hamás el 7 de octubre. Según el movimiento islamista palestino, al menos 9 de ellos habrían muerto ya como consecuencia de los bombardeos o las escaramuzas militares israelíes.

Exigen volver a las negociaciones

Los familiares se han concentrado a última hora de este viernes en Tel Aviv para exigir al Gobierno de Benjamin Netanyahu que atiendan sus súplicas y regrese a las negociaciones con Hamás auspiciadas por Qatar y Egipto con ayuda de Estados Unidos. Benny Gantz y Gadi Eizenkot, miembros del Gabinete de Guerra israelí, han aceptado reunirse este sábado con los parientes de los rehenes.

En el acto han participado algunas de las liberadas a finales de noviembre en virtud del acuerdo de tregua humanitaria que permitió el regreso a casa de unos 104 rehenes, entre ellos 80 israelíes. "No es fácil para mí estar aquí esta noche. Decidí venir porque esto es una emergencia. Regresé del cautiverio de Hamas y tengo tres hijas encantadoras que hicieron todo lo posible para traerme de regreso a casa. Todavía tengo un esposo adorable que está cautivo de Hamás. No puedo vivir sin él", ha declarado Raz Ben-Ami, liberada después de 54 días de cautiverio de Hamas.

“Hace 10 días asistí a una reunión con miembros del Gabinete, les supliqué y les advertí que los combates podrían perjudicar a los rehenes. Lamentablemente tenía razón. Sobreviví. Pero si el plan para la liberación de los rehenes se hubiera pospuesto una semana, tal vez yo no estaría aquí. Los rehenes viven un infierno y corren un verdadero peligro de muerte. Cada día, cada hora, cada minuto es fundamental", ha esbozado en una rueda de prensa.

"La acción militar por sí sola no salvará las vidas de los rehenes. Devolver a los rehenes a cambio de prisioneros es urgente y fundamental. La pasividad del Gabinete de Guerra no permitirá que los rehenes regresen con vida. La iniciativa es poder, no debilidad. Presenten un plan para devolver a los rehenes ahora. Prometieron traer vivos a los rehenes. ¿A qué estas esperando?", ha agregado.

Imagen de los tres rehenes asesinados por el ejército israelí

Un sentimiento compartido por otras familias en mitad de una presión creciente para que el Ejecutivo regrese a las negociaciones. Fuentes qataríes reconocen que se están produciendo los primeros contactos para recuperar las negociaciones, tras una semana y medio de parón.

Este viernes el ejército israelí reconoció haber "identificado por error a tres rehenes israelíes como una amenaza". "Como resultado, las tropas dispararon hacia ellos y murieron", indicó en un comunicado. "Durante los registros y comprobaciones en la zona en la que se produjo el incidente, surgió la sospecha sobre las identidades de los fallecidos. Sus cuerpos fueron trasladados a territorio israelí para ser examinados, tras lo cual se confirmó que se trataba de tres rehenes israelíes", agregó.

Al menos 9 rehenes han muerto en acciones israelíes, según Hamás

Los militares identificaron a los tres como Yotam Haim y Alon Shamriz, que fueron secuestrados en el kibutz Kfar Aza durante el asalto dirigido por Hamás contra Israel el 7 de octubre; y Samer Talalka, que fue secuestrado en el kibutz Nir Am. Daniel Hagari, portavoz jefe del ejército israelí, expresó su "profunda tristeza" y dijo que el ejército estaba investigando. El incidente se produjo "en una zona de combate en la que las tropas se habían enfrentado" a militantes de Hamás en los últimos días, incluido el viernes, señalaron las autoridades israelíes.

Los familiares han publicado detalles de la biografía de los tres asesinados. Talalka, miembro de la minoría beduina, trabajaba en un criadero de pollos cerca del kibutz Nir Am cuando fue secuestrado. Había hablado con su hermana por teléfono, diciéndole que había sido herido por los disparos. Era "un ávido motociclista al que le encantaba pasear por el campo", esboza la biografía proporcionada.

Haim, en cambio, era un batería que tenía previsto actuar en un "festival de música metálica" en Tel Aviv el 7 de octubre. Shamriz era un "amante de la vida" y un jugador y aficionado al baloncesto que había sido aceptado en la universidad y estaba a punto de iniciar estudios de ingeniería informática. La oficina de Netanyahu calificó su muerte de "una tragedia insoportable" y dijo "estar dedicado a la sagrada misión de devolver a nuestros rehenes, incluso a costa de sus vidas." "Incluso en esta difícil noche", agregó, "vendaremos nuestras heridas, aprenderemos las lecciones y continuaremos con un esfuerzo supremo para devolver a casa sanos y salvos a todos nuestros rehenes".