El Gobierno ha advertido hoy de que la ley de transitoriedad que quieren impulsar los independentistas catalanes para dar un marco legal a la desconexión "nunca entrará en vigor". "Esa norma puede ser anunciada tantas veces como quieran, pero nunca entrará en vigor", han subrayado a EFE fuentes del Ejecutivo tras conocerse que Junts pel Sí y la CUP aprobarán esta ley antes del eventual referéndum del 1 de octubre.

Las mismas fuentes acusan asimismo a la Generalitat de "rendirse" ante los planteamientos de un partido "minoritario, radical y antisistema" como la CUP. Y recalcan, en cualquier caso, que el Ejecutivo seguirá respondiendo a todos los "intentos" de los independentistas de "vulnerar" la Constitución, incluida la presentación de esta norma.

El Gobierno acusa al Govern de "generar un estado constante de crispación y provocación"

Desde el Gobierno se considera una "paradoja" que mientras en París se celebra la reunión de los jefes de Gobierno de cuatro de las principales democracias de Europa para "trabajar juntos contra el terrorismo y a favor de la libertad" los independentistas aprovechen para presentar "una iniciativa ilegal" con la que "tratan de desconectar a los catalanes de España y de Europa".

Además entiende que el "anuncio improvisado" que han hecho hoy políticos "de segundo y tercer nivel" de JxSí y la CUP pone de manifiesto que "los más radicales llevan las riendas de la política catalana". "La Generalitat se ha rendido ante los planteamientos de un partido minoritario, radical y antisistema. La CUP está marcando todos los posicionamientos políticos de las instituciones catalanas", subrayan desde Moncloa.

Añaden las mismas fuentes que no queda en la Generalitat "ningún mínimo resto de sensatez, moderación o responsabilidad institucional" y acusan al Govern de tener como única estrategia el "generar un estado constante de crispación y provocación".

En cualquier caso, el Gobierno recuerda que tiene "la obligación de cumplir y hacer cumplir las leyes" y la convicción de que entre sus responsabilidades está la de "defender a los ciudadanos de Cataluña -piensen como piensen y sientan lo que sientan- de un grupo de radicales que están intentando someter y silenciar a la mayoría de catalanes". Además, ante la presentación de esta iniciativa, el Ejecutivo advierte de que seguirá dando respuesta a todos los "intentos" de los independentistas de "vulnerar" el orden constitucional, incluido éste.