El cambio de tribunal eleva la esperanza de Rosalía Iglesias de evitar la prisión

La maniobra del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) de acordar este lunes in extremis impedir al magistrado progresista José Ricardo de Prada formar parte del tribunal que decide sobre las prisiones preventivas de los condenados en la Primera Época de la trama Gürtel ha hecho que se disparen las esperanzas de gran parte de los condenados para esquivar la prisión preventiva.

A esto se suma el hecho de que la Sala compuesta por los magistrados Ángel Hurtado, Julio de Diego y María José Rodríguez Duplá decidió ayer que los ex dirigentes del Partido Popular, Luis Bárcenas, Guillermo Ortega y Alberto López Viejo, debían ingresar de forma inmediata en la cárcel, mientras que el resto de los condenados -para los que la Fiscalía Anticorrupción reclamó esta misma medida cautelar- fueron citados sin prisas para el próximo miércoles; fecha en la que deberán recoger sus respectivos autos regulando sus situaciones procesales.

Estos dos factores se han visto como un auténtico balón de oxígeno para ocho de los condenados en esta pieza separada de Gürtel. En concreto, para la mujer de extesorero del PP, Rosalía Iglesias (condenada a una pena 15 años de cárcel); el exalcalde de Pozuelo y exmarido de Ana Mato, Jesús Sepúlveda (14 años y 4 meses); el exedil de Estepona Ricardo Galeote (7 años y 10 meses); el contable de la trama, José Luis Izquierdo (17 años y 7 meses); la exmujer de Francisco Correa, Carmen Rodríguez Quijano (14 años y 8 meses); el testaferro de Gürtel Antonio Villaverde (8 años y 2 meses); el exedil de Majadahonda Juan José Moreno (15 años y 2 meses); y, por último, el exviceconsejero madrileño Carlos Clemente Aguado (5 años y 9 meses).

El miembro más duro del tribunal

Varias fuentes de las defensas consultadas por El Independiente, daban por hecho que si el juez De Prada -el miembro más duro de la Sala que ha sentenciado la Época I de la trama Gürtel- formaba parte del tribunal que celebraba las vistillas, todos ellos ingresarían de forma inmediata en prisión ya que se volvería a producir el dos a uno –De Prada y De Diego en mayoría ante Hurtado- que se ha visto a lo largo del año de celebración de juicio y los seis meses posteriores de deliberaciones para la sentencia.

Sin embargo, este lunes el CGPJ acordó en una reunión de urgencia que “no procedía en derecho” autorizar al juez progresista a formar parte del tribunal que iba a celebrar las vistillas previstas en el artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, puesto que este togado no se encuentra en servicio activo en la Carrera Judicial tras haberse marchado de forma voluntaria al Tribunal de la Haya.

El polémico acuerdo fue aprobado gracias el voto de calidad del presidente del Tribunal Supremo y del Consejo, Carlos Lesmes, después de que los vocales Juan Martínez Moya, Juan Manuel Fernández y José María Macías votaran a favor de no habilitar a De Prada para dicha función y los vocales Fernando Grande-Marlaska, Rafael Mozo, Concepción Sáez y Pilar Sepúlveda en contra de no hacerlo.

Cambio de expectativas

La realidad es que esta noticia fue recibida a primera hora de este lunes gratamente por los condenados de Gürtel y sus letrados. “Si no está José Ricardo en el tribunal todavía no está perdido el partido”, sostuvo una de las fuentes consultadas.

En contraposición, desde las acusaciones se piensa lo opuesto: “Con De Prada en el tribunal no habría ingresado este miércoles solo Bárcenas, López Viejo y Ortega en la cárcel. Eso es clarísimo. Hubieran ido sin demora todos los condenados con penas altas a prisión”.

Ahora, la última palabra la tienen los magistrados Hurtado, De Diego y Rodríguez Duplá que deberán valorar si existe o no riesgo de fuga como para que Iglesias, Rodríguez Quijano o Sepúlveda ingresen de forma inmediata en cárcel antes de que esta condena de Gürtel adquiera firmeza. El miércoles se conocerá su decisión.