Pablo Iglesias e Irene Montero han iniciado una estrategia para empujar a Íñigo Errejón fuera de Podemos. Consiste en ofrecerle que su candidatura a la Comunidad de Madrid como cabeza de cartel de Más Madrid -la plataforma ciudadana de Manuela Carmena- se integre dentro de la lista de Podemos en la región como cualquier otra fuerza progresista más con las que negocian la confluencia, desde IU hasta Equo. El resultado sería una sopa de siglas como la que ha rechazado Errejón al cambiar de plataforma, por lo que el candidato se inclina por mantener su hoja de ruta con Carmena.

En el caso de competir con su propio partido desde otra candidatura, Errejón podría verse expedientado y suspendido de militancia como le ha ocurrido a la portavoz municipal, Rita Maestre, y a otros cinco concejales de Podemos que forman parte del gobierno municipal de Carmena por no concurrir a las primarias internas del partido. El secretario general del partido en Madrid, el ex Jemad Julio Rodríguez, fue el encargado de iniciar ese expediente disciplinario como secretario del Consejo Ciudadano de Madrid. Tras la dimisión de Espinar, Rodríguez se ha hecho cargo de la gestora que dirigirá Podemos en la Comunidad de Madrid.

De esta manera, Errejón corre el riesgo de ser expulsado del partido que fundó. Con ese objetivo de apartarle de Podemos, la portavoz parlamentaria, Irene Montero, no dejó de asegurar este lunes que Errejón "se ha ido de Podemos", que "ha fundado otro partido" -una afirmación falsa- y que ni siquiera debe aparecer por la reunión del Consejo Ciudadano del miércoles del que forma parte. "Íñigo debe ser consecuente, él se ha ido de Podemos, ha fundado otro partido y creo por tanto que nos debe dejar debatir", aseguró ayer en los pasillos del Congreso.

“Creo rotundamente que Íñigo no debe ir al Consejo Ciudadano. Debe ser consecuente, se ha ido de Podemos, ha formado otro partido y creo por tanto que nos debe dejar debatir. Creo además, que Íñigo debe ser responsable y contribuir a que dejemos de hablar de nosotros mismos y a que podamos debatir sobre política, respetar a Podemos, dejar de hacer daño a Podemos y permitir que tengamos un debate que es condición de posibilidad para que podamos entendernos “, afirmó.

“Hemos defendido siempre lo mismo y lo seguimos defendiendo. Unidos Podemos va a presentar candidatura para ganar al PP. Para ganar al PP necesitamos un proceso lo más participativo, lo más democrático y abierto posible y a eso está abierto todo el mundo. Pero incluso a los que no quieren sumarse a ese proceso para constuir una candidatura fuerte de Unidas Podemos nosotras vamos a tener la máxima responsabilidad y vamos a buscar siempre la unidad de todos los actores que quieran que los trillizos reaccionarios, también Ciudadanos, estén fuera del Gobierno de la Comunidad de Madrid. Hasta el último momento buscaremos la unidad con todas las fuerzas progresistas y por supuesto eso incluye hablar con el partido de Íñigo Errejón y ver si podemos encontrar puntos de acuerdo”, insistió.

Por su parte, el equipo del candidato no valora una oferta que considera inconsistente de momento. "Seguimos adelante con Más Madrid y cuando se inicien los contactos formales y exploraremos las opciones", explican desde el entorno del candidato, que aún no ha decidido si el miércoles acudirá a la reunión del Consejo Ciudadano o no.

Mientras tanto, Más Madrid continúa con su hoja de ruta y este martes se reunirá con representantes de IU en la comunidad, con los que abordarán su integración en la candidatura de Errejón. En este sentido, la formación de Alberto Garzón también se encuentra dividida. Sus dirigentes en Madrid abogan por la confluencia con la plataforma de Carmena mientras que el aparato estatal se sitúa del lado de Pablo Iglesias y opta por competir con Errejón.