Una delegación conformada por cinco diputados del Congreso acudirá mañana a la cárcel de Zaballa en Vitoria para visitar a los condenados por la agresión a dos guardias civiles y sus parejas en Alsasua la madrugada del 15 de octubre de 2016. En la visita participarán el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, el representante del PNV, Joseba Agirretxea, la diputada de EH Bildu, Marian Beitialarrangoitia y las parlamentarias Marta Sibina (En Comú Podem) y Alexandra Fernández (En Marea).

El encuentro con los jóvenes de Alsasua, que se encuentran en prisión provisional a al espera de que su sentencia sea firma, y que fueron condenados por la Audiencia Nacional a penas de entre 9 y 13 años de prisión está previsto que comience a las 9.00 horas y no será hasta cuatro horas después cuando los cinco diputados de la Cámara baja comparezcan ante los medios de comunicación a la salida del centro penitenciario.

Todas las formaciones que acudirán a Zaballa se han mostrado en contra del encarcelamiento de los siete jóvenes -la octava condenada, Ainara Urkijo, no ingresó en prisión al ser su pena de sólo dos años de prisión- y se han posicionado en contra de todo el proceso por delitos de carácter terrorista que se abrió contra ellos por considerarlo desproporcionado y abusivo.

Actualmente el caso está pendiente de que la Audiencia Nacional resuelva los recursos que tanto la Fiscalía, que se reitera en su petición de que sean condenados por un delito de carácter terrorista, como las defensas, que reclaman su libre absolución, se pronuncie. Está previsto que el tribunal dé a conocer su decisión en los próximos días.

Todos ellos fueron ingresados en prisión inicialmente en cárceles de Madrid, Estremera y Soto del Real, si bien en agosto pasado comenzaron los traslados a los centros penitenciarios de Zaballa, donde están ingresados cuatro de los siete condenados. Los otros tres se encuentran en la prisión de Pamplona. Tanto sus defensas como las familias, en muchos casos con el apoyo de algunos de los partidos que mañana acudirán a Vitoria, han denunciado que varios de los jóvenes acumulen ya más de dos años de prisión provisional.

A la espera de las apelaciones

En los próximos días el tribunal resolverá sobre la apelaciones presentadas y que ya fueron evaluadas. El miniserio Fiscal mantiene la acusacion que yaformuló durante la vista oral y que no fue atendida en la sentencia emitida el pasado 1 de junio y que no consideraba delito de carácter terrorista la paliza que propinaron a los dos agentes los condenados. En su escrito de acusación el fiscal José Perals había solicitado que los ocho varones y una mujer que se sentaron en el banquillo fueran condenados por delitos de lesiones y amenazas terroristas. Sin embargo, la Sección Primera de la Sala de lo Penal tan sólo dio por probado que lo sucedido se correspondía con un atentado a agentes de la autoridad, lesiones, desórdenes públicos y amenazas pero en ningún caso con carácter terrorista.

En la sentencia se afirmaba que no se pudo probar que la agresión respondiera a una finalidad terrorista premeditada ni que los acusados estuvieran vinculados a ETA: “Por lo tanto, no resulta probado que tuvieran intención subvertir el orden constitucional o alterar gravemente la paz pública o provocar el terror en la gente en la localidad de Alsasua”, explicaba la Sala en su sentencia.

Lo que sí dio por acreditado el tribunal es que no se trató de una mera “pelea de bar”, como han venido defendiendo desde el entorno de los acusados, y que la agresión contra los agentes y sus parejas estuvo favorecida por la manifiesta “animadversión” de los acusados hacia la Guardia Civil. El fiscal recuerda en su recurso que la propia sentencia aprecia en los ocho condenados una actuación “impregnada por una motivación ideológica derivada de la dinámica de la izquierda abertzale impulsada por el movimiento ‘Ospa’, que era uno de los movimientos a su vez impulsados por el frente de masas de ETA” que defiende la expulsión de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado del País Vasco y Navarra.