El presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, ha dicho este jueves en Espejo Público que el Gobierno le "pidió que no cerráramos" los colegios, porque "el escenario era no generar alarma y no dramatizar".

El barón del PSOE ha aclarado que es un "escenario posible y entendible", que luego "se cambió sobre la marcha en 24 horas".

Asimismo, el presidente manchego ha defendido comunidades autónomas gestionan correctamente la crisis del coronavirus y ha añadido que no quiere "pensar si todas las competencias estuvieran centralizadas". Ha dicho que las regiones son "aceleradores" y que por ello "se ha incrementado tanto la inversión en materia sanitaria".

García-Page ha informado de que en Castilla-La Mancha se dan de alta con tarjeta sanitaria de desplazados a 300 ciudadanos de la Comunidad de Madrid al día, ya que se han trasladado a vivir a sus segundas residencias o a casas de sus padres, en la región.

El presidente manchego ha explicado que ante la petición de ayuda de su homóloga en la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, Castilla-La Mancha hizo la oferta "desde el primer día" y ha considerado que en el ámbito sanitario, todas las comunidades autónomas están dispuestas, dentro de sus posibilidades, a asumir pacientes de otras regiones, según recoge Efe.