La canciller alemana, Angela Merkel, ha protagonizado unas preocupantes imágenes este martes durante un acto oficial con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski. Mientras sonaban los himnos oficiales de ambos países, Merkel ha comenzado a convulsionar notablemente, provocando el estupor de los presentes y disparando los rumores sobre su estado de salud.

La dirigente alemana ha presentado estos síntomas durante casi medio minuto, pero se ha mantenido en pie y respetando la ceremonia en la que participaba. Posteriormente, ha abandonado el lugar a pie junto a Zelenski, recientemente elegido como presidente ucraniano.

Preguntada por la prensa una hora después, Merkel ha querido tranquilizar posteriormente sobre su estado. "Bebí por lo menos tres vasos de agua, algo que manifiestamente me faltaba, y ahora me siento muy bien", ha dicho.

Merkel, que cumple 65 años el próximo 17 de julio, ya ha anunciado que dejará la política cuando acabe su mandato, previsiblemente en el año 2021.