Un joven de 21 años ha sido condenado a siete años de prisión por intentar matar a su expareja de 15 años. El detenido estampó, en repetidas ocasiones, la cabeza de la chica contra el cristal de un escaparate de una tienda de San Juan de Aznalfarache (Sevilla). El ataque se produjo dos días después de que la víctima pusiera fin a la relación.

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La Fiscalía iba a juzgar al detenido por un delito de asesinato en grado de tentativa y por otro maltrato habitual a su novia; sin embargo las partes han alcanzado un acuerdo basado en rebajar la calificación del delito principal y dejarlo en intento de homicidio. Esto se produce al no apreciar el Ministerio Público que el encausado actuase con alevosía. Además, sirve como atenuante la reparación del daño, ya que G.C.F. había consignado 10.700 euros a favor de la víctima.

La Audiencia Provincial de Sevilla ha dictado una sentencia total de siete años de prisión: cinco años y tres meses por la tentativa de homicidio y un año y nueve meses por el maltrato. En el primer delito se incluye la agravante de género, lo que imposibilita acceder al tercer grado penitenciario hasta cumplir al menos la mitad de la pena.

La pena prohíbe la proximidad a menos de 300 metros con la víctima y la comunicación con la misma durante 13 años. Además, el agresor deberá pagar 40.000 euros de indemnización a su expareja.

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