Francisco González, presidente de BBVA, está analizando la compra de Popular y ha descubierto sus cartas. Hace apenas 10 días, el ejecutivo llamó a Ángel Ron, presidente en funciones del quinto banco español desde el pasado jueves, para reunirse con él, según ha podido saber El Independiente de fuentes conocedoras del encuentro.

González trasladó a Ron su interés en absorber Popular, propuesta que no fue bien recibida por éste. Ron mantuvo su postura tradicional: "Mantener la independencia del banco y seguir desarrollando su plan estratégico".

Sin embargo, la destitución de Ron en los días posteriores cambia el escenario de cara a una posible transacción. Su salida de la presidencia, prevista para finales de febrero del próximo año, y la llegada de Emilio Saracho, como nuevo primer espada del grupo, abre la puerta a una operación con BBVA u otras entidades.

El primer ejecutivo de BBVA trasmitió hace 10 días a su homólogo su interés en comprar el quinto banco español

Este movimiento contaría con el respaldo de los consejeros de Popular, que impulsaron el relevo de Ron la semana pasada. Entre ellos, Antonio del Valle, el accionista mexicano que, junto a otras grandes fortunas aztecas, controla el 4,7% del banco, ha adoptado una postura activista en este sentido. Su maniobra más relevante fue llamar a la puerta de Sabadell para tratar de impulsar una operación, que finalmente no cuajó.

El fuerte desplome que ha sufrido la acción de Popular en los últimos meses -cae un 66% en el año, del que un 34% responde al efecto de la ampliación de capital- ha reducido su valor en Bolsa hasta apenas 3.600 millones de euros, haciendo cada vez más atractiva para los competidores una posible compra de la entidad.

De hecho, Saracho ha recibido el mandato del Consejo de Administración de Popular de explorar, como una de las vías para reestructurar el banco, la venta del mismo, según informa Bloomberg.

Ron se reafirmó en mantener la independencia, pero la llegada de Saracho cambia el escenario

Un reciente informe del banco americano Merrill Lynch, señala que BBVA debería ampliar capital por importe de entre 11.000 y 12.600 millones de euros para hacer frente a la compra de Popular en Bolsa y sanear sus activos.

Popular aflorará en el último trimestre del año unas pérdidas de alrededor de 2.500 millones de euros, equivalentes a la ampliación de capital que realizó en junio. El negocio típico bancario, sin embargo, genera un beneficio de mil millones de euros.