La salida de banqueros privados del grupo suizo Julius Baer, especializado en la gestión de grandes fortunas con, al menos, un millón de euros de patrimonio, no cesa. El último ejecutivo en abandonar la firma es Víctor del Rey, uno de los empleados más prominentes, con una cartera de clientes cuyo patrimonio supera los 400 millones, confirman a El Independiente fuentes del mercado.
Del Rey trabajó desde septiembre de 2000 en Merrill Lynch, adquirido por Bank of America en 2008. Posteriormente, en verano de 2012, la línea de negocio de grandes patrimonios del banco americano fue comprada por Julius Baer. La operación llevó a Del Rey a trabajar desde que se materializó la operación, a principios de 2014, en la firma helvética, de la que ahora sale siguiendo los pasos de muchos de sus colegas.
Y es que la oficina de Madrid de Julius Baer está perdiendo talento, en un momento especialmente agitado en la banca privada. En apenas un año, casi coincidiendo con la incorporación del histórico de Credit Suisse Carlos Recoder, como responsable del grupo para Europa, la mitad del equipo ha dejado la firma. De los históricos empleados de Merrill Lynch, apenas quedan media docena. La entidad, por su parte, está compensando, en parte, las salidas, con nuevos fichajes.
Fuga de talento
Antes que Del Rey, el pasado mes de julio, salieron de la firma Carlos Clua, que acaba de finchar por el banco suizo Mirabaud, Borja Barragán y Alberto Bousquet. Unos meses antes abandonaron su cargo Pedro Arrechea y Lucía Granda, una de las ejecutivas más relevantes de la casa. Ambos se han incorporado recientemente a Varianza Gestión, la firma lanzada en septiembre del año pasado por Alberto Spagnolo, ex consejero delegado y director de inversiones y Julius Baer Gestión hasta 2015, y Carlos Chacón, ex responsable de riesgos y cumplimiento normativo en el banco suizo.
Carlos Clua, que salió del grupo en julio, se incorpora al competidor helvético Mirabaud
Fuentes del mercado aseguran que Granda, una veterana del sector, ha logrado llevarse consigo a Varianza la mayor parte del dinero que gestionaba, más de 300 millones de euros.
Pablo Gracía-Drake y Hortensia Cobo también decidieron formar parte del equipo de Varianza y dejaron la entidad helvética en cuanto nación el proyecto independiente.
El hueco de Spagnolo en Julius Baer fue cubierto por Pelayo Gil Turner, quien decidió el pasado mes de mayo unirse a Varianza.
Emmanuel Frappereau salió de la entidad en diciembre, apenas un año después de haber sido fichado, procedente de Deutsche Bank. Actualmente, Frappereau trabaja en Cora360, firma de asesoramiento independiente lanzada en 2013 por varios ejecutivos de Credit Suisse.
Nuevos fichajes
Las salidas del equipo que lidera en España Carolina Martínez-Caro están siendo compensadas, en parte, con la llegada de nuevos profesionales. Se acaban de incorporar tres ejecutivos, procedentes de Banco Alcalá, tal como adelantó este medio.
Unos días antes, Julius Baer había anunciado el fichaje de Rafael Amil de la Rica y Manuel Ruiz Esquivias, como jefe de equipo y asesor financiero, respectivamente. Ambos procedían de Credit Agricole-Indosuez Wealth Management, en Luxemburgo.
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