“Estoy en una nube, ha sido muy especial”, confiesa Luz Gabás (1968), ganadora del Premio Planeta 2022. “Es un reconocimiento que da mucho prestigio a un escritor. Yo así lo tomo. Habrá quien piense otra cosa, pero yo así lo tomo”. Esa nube en la que nos recibió ayer para concedernos una entrevista está mullida con el millón de euros del premio, el más cuantioso del mundo y del que se ha convertido en la primera en llevárselo íntegro a su casa. “Es verdad, pero el dinero se va y el reconocimiento permanece para siempre. Yo, que soy muy de mi casa, mis raíces, mi familia, sé que mis descendientes encontrarán esto muy simpático”. 

Su otra casa, la editorial Planeta, se lo ha dado todo con este premio. “Me lo dio todo en el momento que se publicó Palmeras en la nieve, para mí ese fue el día, el momento de mi vida. Eso no se olvida, esa fue la puerta, fue el billete de un viaje largo. Lo demás es trabajo, trabajo y trabajo. Todo trabajo, hay mucho trabajo”, reitera.

La escritora aragonesa no tiene miedo a la maratón promocional que conlleva ganar el Premio Planeta. La editorial pone un millón en la cuenta del autor pero ambiciona que sean varios cientos de miles los ejemplares que lleguen a las casas de los españoles desde el momento de su publicación. “Llevo muchos años de giras, sobre todo con Palmeras en la nieve, tuve que hacer muchos clubes de lectura, muchos pueblos, muchos encuentros literarios.He hecho muchos kilómetros, mucha zapatilla”, destaca. 

El intenso viaje promocional será con Lejos de Luisiana, con la que regresa a la novela histórica. Un cambio drástico respecto a su anterior trabajo, El latido de la tierra, ambientada en la España vacía. La ganadora del Planeta está ambientada en la región americana que entre 1762 y 1803 fue parte del reino de España. Momento en el que tuvo lugar la Guerra de la Independencia de los EEUU (1776-1783) y en el que dicho territorio español jugó un papel crucial en el suministro de armas a los rebeldes americanos de las colonias inglesas con las que lindaba el gigantesco territorio dominado por España. De ese período destaca las figuras de Fernando de Leyba y Bernardo de Gálvez por su papel decisivo en la independencia americana

Ahora percibo mucha crispación. Tendríamos que frenar entre todos la agresividad

Luz gabás, ganadora del Premio planeta 2022

Un periodo poco conocido de la Historia que ha requerido mucha documentación y más de tres años de trabajo a Gabás. “Ha sido muy complicado. Es una novela con muchísimos personajes. Es que aparecen los nombres de los comandantes de los puestos militares que existieron. Hay muchos europeos, muchas tribus indias, un montón de sucesos, muchas rebeliones y poner en orden toda la información para que tenga sentido ha sido una labor de artesanía”.  Subraya que la lectura de su novela no será una clase de Historia, pese a que afirma que se aprende mucho de la Luisiana española. Su novela es una historia de amor.

“Hay una historia de amor que vertebra la novela, ubicada en un contexto muy concreto. Lo difícil de una novela así es encontrar el equilibrio y que no se convierta en una lección de historia. Para mí es una novela sobre el amor y el esfuerzo”, define.

La ambientación de la novela en la Luisiana colonial no es para Gabás la reivindicación de una parte desconocida de la historia de España. “No hay una intencionalidad de sacar a la luz algo, yo me considero más bien maestra, expongo aquello que sucedió y a lo que no le hemos dado importancia porque hemos puesto el foco en América del Sur, pero es muy curioso el hecho de que casi un tercio del territorio actual de Estados Unidos era español en aquel momento”, destaca.

Historia despolitizada

Detrás de su novela no hay lectura política. “Toda lectura de la Historia es una interpretación y esto debe ser labor de los historiadores, sean del lado que sean y tengan la interpretación que tengan, pero no de los políticos. Debe ser estudiada por historiadores -y por quien quiera, claro- pero la historia no puede ser utilizada políticamente. Hay demasiada intromisión y hay que mantener esferas independientes de la política. La pregunta es si eso es posible. Hasta ahora la cultura se ha mantenido aparte. Ojalá siga así, porque si no estamos perdidos. La cultura, es de los pocos reductos de libertad”, mantiene.

El juego político es muy complicado, hay que valer y no va conmigo

Luz Gabás

Gabás fue alcaldesa del PP del municipio aragonés de Benasque, entre 2011 y 2015. Algo que quedó muy atrás con su éxito literario. Una experiencia de la que no guarda buen recuerdo. “Algunos entramos en la política con el alma demasiado cándida. Te das cuenta de que en el mundo de la política local no estás solo lidiando con la resolución de problemas -algo que tendría que ser así-  sino que también estás en un juego político que no entiendes. Si en un ayuntamiento hay una moción hay que votar con sentido común, no con indicaciones de uno u otro partido. La contaminación de la alta política a la política local a mí no me gustó, el juego político es muy complicado, hay que valer y no va conmigo”, asevera.

Afirma que intenta despolitizar su entorno personal. “Se ha llegado a un punto de mucha crispación. Cuando era joven, un grupo de amigos de diferentes colores se juntaba y hablaba con normalidad, tomándote unas cañas. Ahora percibo mucha crispación si no son todos del mismo color y eso a mí no me gusta. Me gusta la variedad, tendríamos que frenar entre todos la agresividad”.