El Bloque Nacionalista Galego (BNG) exige al ministro de Asuntos Exteriores, el socialista José Manuel Albares, que condene "las políticas colonialistas" de Marruecos en el Sáhara Occidental tras el informe de relatores de la ONU que denuncia “una campaña a gran escala” contra la población saharaui autóctona en los territorios ocupados del Sáhara Occidental, la excolonia española y el último territorio pendiente de descolonización de África.

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En un informe difundido en los últimos días, ocho relatores especiales de la ONU denuncian la campaña de represión, discriminación racial y violencia que Marruecos está llevando a cabo contra defensores de los derechos humanos, periodistas y defensores de la autodeterminación del Sáhara Occidental, con 79 víctimas como casos de referencia, tal y como informó El Independiente la semana pasada.

Carme da Silva, senadora del BNG, ha trasladado al Ejecutivo una batería de preguntas al respecto en la que pide a Albares que se pronuncie "sobre las demoliciones de viviendas saharauis denunciadas por ocho Relatores de la ONU y que retome la posición histórica de defensa del derecho de autodeterminación".

"Recordamos que el derecho de autodeterminación del pueblo saharaui está amparado por distintas resoluciones de la ONU", señala el documento. "Creemos que estos hechos deberían hacer reflexionar al Gobierno y retomar la postura histórica del Estado español sobre el Sáhara Occidental, porque al igual que sucede en Gaza, Marruecos busca exterminar toda presencia saharaui en los territorios ocupados y ocuparlo con colonos marroquíes. Lo que sin ambages se llama limpieza étnica".

Fin de las demoliciones masivas

Las ONG que presentaron la denuncia ante la ONU —entre ellas, CODESA, ASVDH y el Grupo de Trabajo sobre Derechos Humanos en el Sáhara Occidental Ocupado— señalan que el objetivo último es modificar la demografía del territorio ocupado. “Se busca erradicar cualquier huella saharaui y favorecer la instalación de colonos marroquíes”, denuncian. Las presiones se traducen no solo en desalojos, sino en violencia, intimidación y vigilancia permanente.

El BNG pregunta por escrito a Albares "qué opina el Gobierno sobre el Informe de ocho Relatores de la ONU en el que denuncian la constante demolición de viviendas de saharauis en la costa atlántica, en territorios ocupados, y el desalojo forzoso de personas para llevar a cabo proyectos de energía eólica, infraestructuras y otros". El BNG alerta del uso de empresas como Enel, Engie y GE Vernova en proyectos coloniales sin consentimiento del pueblo saharaui.

"¿Se ha interesado el Ministerio de Exteriores por estos hechos que demuestran el agravamiento de las políticas colonialistas y de limpieza étnica de Marruecos para con el pueblo saharaui? ¿Sabe que los Relatores de la ONU reclaman a Marruecos el fin de las demoliciones de viviendas saharauis, medidas de compensación o viviendas alternativas?", se interroga Da Silva.

"¿Va el Gobierno a exigir a Marruecos el fin de las demoliciones de viviendas y desalojos forzosos de personas saharauis en los territorios ocupados y la compensación a las personas afectadas? ¿Está el Ministerio de Exteriores demandando a Marruecos el respeto a los derechos del pueblo saharaui, el fin de las políticas colonialistas y el fin de la represión y persecución? ¿Comparte el Gobierno que se deberían cumplir las resoluciones de la ONU sobre el derecho de autodeterminación del Sáhara Occidental Ante estos hechos, ¿va el Gobierno a recuperar la posición tradicional del Estado Español en relación al Sáhara Occidental, retomando su responsabilidad histórica en defensa de la autodeterminación del pueblo saharaui?", concluyen las preguntas remitidas al Ejecutivo para su respuesta por escrito.