Telefónica consigue aumentar sus beneficios hasta los 2.439 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un incremento del 9,6%. El grupo de telecomunicaciones mantiene así sus resultados al alza a pesar del frenazo en el tercer trimestre del ejercicio, con una caída del 14,7%, hasta 938 millones, por el impacto en sus cuentas del fin del roaming.

La Unión Europea eliminó el pasado junio el roaming, el sobrecoste que los clientes que pagaban a las operadoras por hacer uso de las llamadas o los datos de internet durante sus viajes a otro país europeo. La nueva regulación ha supuesto una merma para las operadoras de telefonía, así como inversiones adicionales para garantizar el funcionamiento de las redes ante el esperado mayor uso del servicio por parte de los turistas.

Entre enero y septiembre, Telefónica alcanzó unos ingresos de 38.846 millones de euros, un 1,4% más en términos reportados (y un 2,9% en términos orgánicos). Sin embargo, en el tercer trimestre la facturación cayó un 4,5% en términos reportados (y fue un 4% inferior en términos orgánicos), con 12.754 millones. Según las estimaciones de grupo, descontando el impacto regulatorio en las cuentas, los ingresos habrían crecido un 4% hasta septiembre y un 5,3% en el trimestre.

En paralelo, el beneficio bruto antes de amortizaciones (oibda) en los nueve primeros meses del año alcanzó los 12.274 millones de euros, un 2,9% más en términos reportados y un 3,8% más en términos orgánicos, mientras que el beneficio operativo (oi) fue de 5.143 millones de euros, un 7,1% más en términos reportados y un 11,2% más en términos orgánicos. Con estos datos, el grupo subraya que su crecimiento orgánico está siendo "consistente y sostenible" en lo que va de año. Pero reconoce un impacto de cerca de 70 millones en su beneficio bruto operativo del tercer trimestre por el fin del roaming.

El consejero delegado de Telefónica, Ángel Vilá, ha confirmado que el fin del sobrecoste por itinerancia (el roaming) ha tenido un "impacto significativo" en los ingresos del grupo este verano, pero confía en que se atenúe en los próximos meses. La compañía ha desvelado que el tráfico de datos en itinerancia ha sido tres o cuatro veces superior al habitual.

Confirma objetivos y reduce deuda

El presidente de Telefónica, José María Álvarez Pallete, ha confirmado los objetivos de resultados marcados para el conjunto del año (hace tres meses el grupo elevó su objetivo de ingresos desde el estancamiento hasta un incremento del 1,5%) y que repartirá el dividendo comprometido para este año (de 0,40 euros por acción en efectivo).

El máximo ejecutivo de la corporación ha subrayado el “avance claro en el desapalancamiento”, un factor clave para la compañía para seguir saneando el balance y defender la nota que le dan a su deuda las agencias de calificación. El grupo ha conseguido reducir su deuda en 1.265 millones en lo que va de año, dejándola al cierre de septiembre en los 47.222 millones de euros.

Un nivel de endeudamiento que aún no tiene en cuenta los 1.275 millones adiciones que recortará gracias a la venta del 40% de su filial de infraestructuras Telxius al fondo KKR, así que virtualmente la deuda de Telefónica se situaría ya por debajo de los 46.000 millones. La compañía subraya, en cualquier caso, que el desapalancamiento conseguido se está produciendo muy fundamentalmente por la generación de caja libre (de unos 1.600 millones en el ejercicio).