El que fuera el jefe de seguridad del BBVA, Julio Corrochano, era el nexo de unión entre Francisco González y el comisario Villarejo. Así lo revela una grabación publicada por el portal Moncloa.com, se trata de una charla de unos 30 minutos de duración en la que Corrochano y el comisario hablan en una cafetería de El Corte Inglés.

En esta conversación, Corrochano evidenciaa su papel en el espionaje ejercido por el BBVA y asegura que trabaja directamente para el presidente, Francisco González. Además, afirma que su director en Ángel Cano y que es con ellos con los que comparte los informes de espionaje de Villarejo.

Durante esta época, se llevaron a cabo más de 4000 pinchazos y se controlaron unas 15.000 llamadas a todos aquellos que podían tener interés en la operación: desde la vicepresidenta del gobierno, María Teresa Fernández de la Vega a Del Rivero, pasando, naturalmente, por Miguel Sebastián, cuya vida privada fue minuciosamente radiografiada.

Tal y como desveló ayer El Independiente, Francisco González recibía informes de estas escuchas puntualmente.