Durante el estado de alarma, cada semana más de 5.000 familias han solicitado recibir el bono social de electricidad, un descuento en el recibo de luz de entre el 25% al 100% del importe de la factura para consumidores vulnerables.

En total, durante las tres semanas transcurridas desde  que arrancó el estado de alarma el 14 de marzo y hasta el 5 de abril son 16.690 los que se han sumado al contingente de beneficiarios del bono social eléctrico, que ya superan los 1,3 millones de familias vulnerables que lo perciben.

La previsión del Gobierno es que la cifra crezca sustancialmente próximamente. El Consejo de Ministros aprobó el 31 de marzo una ampliación  excepcional y sólo temporal, mientras dure la emergencia sanitaria, de los colectivos que pueden recibir el bono social. Y estos nuevos colectivos aún no se contabilizan en ese incremento registrado en las últimas semanas y la cifra se conocerá próximamente, según fuentes del Ejecutivo.

El Ministerio para la Transición Ecológica permite desde principios de mes que puedan recibir el bono social a personas que cumplan determinados umbrales de baja renta familiar y que acrediten que son autónomos que han cesado su actividad o que hayan visto reducida su facturación en un 75% frente al promedio del semestre anterior. Un colectivo que no se contemplaba hasta ahora entre los beneficiarios potenciales.

En paralelo, con la declaración del estado de alarma por el coronavirus, el Gobierno decidió prorrogar la vigencia del bono social eléctrico a los beneficiarios que debían renovar su solicitud, pudiendo así realizar el trámite hasta el próximo 15 de septiembre. La prórroga automática del bono social durante seis meses-que ha de renovarse  cada dos años- está beneficiando a más de 70.000 hogares al mes, según las estimaciones del Gobierno.