Criteria, el brazo inversor de La Caixa, se ha lanzado decididamente a asaltar el trono de BlackRock en el Ibex 35. Isidro Fainé ha movido hilos en las últimas semanas que le dejan a las puertas de ser el dueño del selectivo español, con unas inversiones cercanas a los 23.500 millones de euros, si contamos las cotizaciones del cierre de mercado del pasado viernes.

La cifra de los títulos de Fainé en el Ibex es similar a la que tienen otros grandes inversores: los fondos soberanos del golfo Pérsico. Como publicó este periódico, sus participaciones y las de empresas controladas por los gobiernos de estos países ascenderán a los 24.000 millones de euros en el Ibex 35 si Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos (EAU) completan las operaciones que planean en Naturgy y en Telefónica.

El ejecutivo de Criteria Caixa, con 81 años de edad, parece “estar en su segunda juventud” empresarial, tal y como lo califican sus compañeros de profesión y amigos más cercanos. Más aún cuando hace escasos meses fue reelegido como presidente del holding inversor español, demostrando la fortaleza que aún tiene para seguir expandiéndose en las compañías nacionales y, también extranjeras. No podemos olvidar tampoco que este mismo año, Fainé fue reelegido como presidente de CECA.

Tal es el grado de implicación y de fortaleza en la que se encuentra Isidro Fainé que el presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, quiso brindarle un mensaje de gratitud y apoyo en la junta de accionistas de la operadora. Cabe recordar que en la actualidad es el vicepresidente de la compañía y que, como detallaremos a continuación, Fainé quiere tener un papel relevante en la teleco. "Quiero finalizar esta junta de accionistas dando las gracias y hacer mención especial a la gestión de Isidro", dijo en la reunión anual Pallete.

La renovación en el cargo al frente de Criteria marca un antes y un después en su estrategia inversora. En apenas unos meses ha puesto patas arriba el Ibex 35 con diversas operaciones que le dejan cerca de coronarse como el máximo accionista del selectivo español, acechando al fondo de inversión BlackRock en el liderato.

El grupo inversor extranjero tiene participaciones repartidas en una veintena de empresas del Ibex 35. O lo que es lo mismo casi 25.000 millones distribuidos en acciones de las compañías más importantes de España tras la operación anunciada recientemente. Una cifra que parecía inalcanzable hasta hace poco, pero a la que Criteria Caixa ha ido mordiéndole terreno. Según las cotizaciones del pasado viernes, el fondo ya ostenta unos 23.500 millones de euros solo en el club de las 35 empresas más poderosas de España.

Irrupción en ACS

Precisamente, la maniobra que le ha acercado a BlackRock ha sido la irrupción en ACS. Criteria ha tomado este viernes el 9,4% de la constructora por un importe total de 983 millones de euros. La operación de compra que convierte al brazo inversor de Caixa en el segundo accionista por detrás de Florentino Pérez se ha tejido de manera amistosa durante cerca de cinco semanas.

Fainé y el presidente de la empresa de infraestructuras mantienen una relación cercana y aprovechan sus periódicos encuentros para estrechar lazos empresariales. Ahora, CriteriaCaixa propondrá al consejo de administración de ACS el nombramiento de Isidro Fainé como consejero dominical.

CriteriaCaixa es el llamado a hacerse con el control de Talgo frente a la OPA presentada por un consorcio industrial húngaro Ganz-Mavag. El objetivo del grupo es hacerse con el 100% de la compañía española por 619 millones de euros, a 5 euros por acción. El Gobierno de Pedro Sánchez no ve con buenos ojos la entrada del capital húngaro en la empresa española, pese a la necesidad de encontrar un socio industrial que permita dar salida a la cartera de pedidos por más de 4.000 millones.

En los últimos meses, Moncloa ha tratado de impulsar una contraoferta para mantener la españolidad del fabricante vasco de trenes. De hecho, habría estado negociando con el PNV para que presionase a CAF para entrar en la operación. Aunque la entidad que preside Fainé parecía dispuesta, su condición era que la oferta esté encabezada por un socio industrial, dada su falta de experiencia en el sector ferroviario.

En la comunicación de este viernes sobre la toma de acciones de la empresa que dirige Juan Santamaría, Criteria pone en valor que la constructora de Florentino Pérez "ha desarrollado también una nueva estructura y foco en nuevos sectores en crecimiento, como la tecnología y digitalización, la transición energética, la movilidad sostenible y los minerales críticos". "Se trata de una apuesta por sectores que son de interés para CriteriaCaixa y que justifican especialmente esta decisión de inversión", asegura.

Al margen de eso, este viernes emergía como posible socio de Criteria el fabricante checo Skoda, que no tiene nada que ver con el fabricante automovilístico adquirido por el grupo Volkswagen. Según avanzó El Economista, el Gobierno y el grupo checo mantuvieron una reunión a finales de abril para sentar las bases de un posible acuerdo.

En 2002, fruto de la fusión de Acesa y Aurea, La Caixa y ACS fundaron juntos Abertis, la concesionaria de autopistas de la que la constructora mantiene el 50% del capital. Los siguientes accionistas relevantes de ACS tras la irrupción de Criteria son Société Générale, con un 6,26% y los fondos de inversión BlackRock (5,27%%) y Vanguard (3,4%).

Telefónica, su opción estratégica

Pero la maniobra que más repercusión ha tenido ha sido la de Telefónica. Criteria Caixa no quiere ser un espectador más en la lucha por el control de la compañía que mantienen el Estado, a través de la SEPI, y STC. Fainé, que tenía una participación cercana al 3,4% hace un año, ha ido adquiriendo acciones progresivamente. Más aún cuando se conoció que la empresa saudí hizo oficial la intención de escalar al 9,9% y que el Estado iba a contraatacar a los planes de STC para llegar al 10%.

Tras las comunicaciones de Estado y de la compañía árabe, Criteria comunicó a la CNMV que iba a aumentar su participación hasta el 7,5%. Pero las intenciones de Fainé, para velar por los intereses del brazo inversor, se han elevado y esta misma semana se ha conocido que también quiere escalar hasta el 10%.

“La participación en Telefónica tiene carácter estratégico y de largo plazo. En este sentido, su principal objetivo es dotar a la operadora de telecomunicaciones, que es una compañía esencial tanto para el país como para el sector a nivel internacional, de la mayor estabilidad accionarial”, indicó en un comunicado. Su participación, una vez que llegue hasta el 10%, será de unos 2.300 millones de euros.

Colonial

Otro de los movimientos que se han producido recientemente en el seno de Criteria ha sido el de Colonial. El fondo controlado por Isidro Fainé comunicó que había comprado un nuevo paquete accionarial, llegando hasta el 17,5% del capital social de la inmobiliaria.

Esta operación supone una inyección de capital de 622 millones de euros, dinero que lo convierte en el primer inversor El acuerdo también establece que Criteria recibirá acciones adiciones en forma del pago de dividendo que se aprobará en la junta del 12 de junio, lo que cerrará el círculo para alcanzar el control del porcentaje anteriormente citada de la masa accionarial de Colonial.

Cellnex: posición que va a menos

Criteria no se queda solo en Telefónica en el sector de las telecomunicaciones. El brazo inversor cuenta con una posición cercana a los 1.000 millones de euros. La participación en Cellnex, no obstante, no es estratégica y, según apuntan fuentes financieras, no es descartable que desinvierta para fortalecerse en Naturgy.

Las ampliaciones de capital ejecutadas entre 2020 y 2022 llevó a la compañía a una dilución para colocarse en el 4,32% a cierre de 2023 (llegó a ser del 6% en 2018). Según explican fuentes del mercado, esta posición se ha reducido.

Caixabank y Naturgy: las joyas de la corona

Además de estas inversiones, en el porfolio del holding hay dos joyas de la corona. Una de ellas es Caixabank y la otra, Naturgy. En la entidad financiera ocupa un puesto de relevancia puesto que es el máximo accionista del banco y su cartera sobrepasa los 12.000 millones de euros, con un porcentaje del 32%. El dividendo, como en el resto de inversiones, es fundamental para la fundación.

En Naturgy también ocupa un lugar preferencial. El holding tiene un 26,7% de la energética presidida por Francisco Reynés, valorada en más de 6.000 millones. La gasista pagó el año pasado unos 260 millones de dividendo a La Caixa, algo menos que el año anterior porque en 2022 emitió uno complementario, pero está previsto que mejore este 2024.

La posición en Naturgy ha cambiado completamente y hace unas semanas la empresa sufrió un terremoto accionarial, una vez que se conoció que Taqa, eléctrica de Emiratos, quiere hacer una OPA en la gasista. Criteria Caixa es también protagonista de esta historia puesto que ha sido el fondo de inversión el que ha negociado con la propia Taqa para acometer la operación.

Fuentes financieras explican que Taqa y Criteria Caixa están negociando para poder lanzar una OPA para alcanzar el 100% del control de la empresa a partes iguales.

Fuera del Ibex también hay vida

Los tentáculos inversores en España no solo se quedan en el Ibex 35. Isidro Fainé también tiene predilección por otras compañías cotizadas. Sin ir más lejos, Criteria anunció una importante maniobra en la recién salida Puig. El brazo inversor de La Caixa ya ostenta el 3% de la empresa de belleza por un valor de 425 millones de euros.

La Caixa ostenta el 99,5% del grupo multinacional de aparcamientos Saba, que preside Salvador Alemany, y el 15% de Aigües de Barcelona, donde es socio de Agbar. Además también participa, a través de Caixa Capital Risc, en otras 76 empresas.