La comunidad autónoma de Extremadura ha suspendido el denominado Plan de Navidad, que contemplaba una cierta flexibilización en las medidas impuestas para contener la propagación del coronavirus, como la ampliación de las reuniones a 10 personas y retrasar el toque de queda a la 1,30 en las fechas señaladas, debido al incremento de la tasa de incidencia de contagios, que se ha elevado este domingo hasta los 267 por cada 100.000 habitantes a los 14 días.

Así lo ha comunicado el vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, en una comparecencia tras el Consejo de Gobierno reunido este domingo en sesión extraordinaria.

Una reunión en la que se han analizado los datos de nuevos positivos que deja la pandemia, y que según Vergeles continuarán subiendo en los próximos días conforme vayan reflejando los contagios provocados por la movilidad durante el fin de semana del Black Friday y, fundamentalmente, el puente de diciembre.

De esta forma, la comunidad continuará durante las Navidades en el nivel 3 de alerta, por lo que las reuniones familiares y las mesas de los restaurantes serán de un máximo de seis personas, y el toque de queda "sin excepciones" continuará a las 00,00 horas. Cabe recordar que el citado plan de navidad permitía en días señalados ampliar las reuniones a diez personas y retrasar las restricción de movilidad nocturna a las 1,30 horas.

No obstante, se mantienen algunas medidas, como el cierre perimetral de la comunidad entre el 23 de diciembre y el 6 de enero, de tal forma que solo se permitirán reuniones familiares, y se descarta para los allegados, así como las salidas de las personas de centros residenciales "con todas las medidas de seguridad".