El PP iluminaba este martes por la noche, por primera vez, su sede nacional, en la madrileña calle de Génova, con los colores de la bandera LGTBI. Pero a la vez sigue negociando con Vox para lograr su apoyo en varias comunidades, y acepta eliminar la enseña arcoíris en ayuntamientos como el de Náquera (Valencia) o no la luce en otros como en Madrid, donde sí se iluminará la fachada del consistorio. Es, para los socialistas, un comportamiento "hipócrita", que no puede opacar lo que entienden como una "amenaza" a los derechos LGTBI, la suma de PP y Vox en los gobiernos.

Este miércoles, 28 de junio, es el Día Internacional del Orgullo, el arranque oficial de una celebración que culminará, en Madrid, con la que se espera una vez más como masiva manifestación festiva y a la que acudirá una amplia representación del PSOE, previsiblemente superior a la delegación del año pasado, cuando la encabezaron los titulares de Interior y Educación, Fernando Grande-Marlaska y Pilar Alegría. Los socialistas han acompañado desde hace años al movimiento LGTBI y para este 2023 creen clave "defender" lo conquistado, como reflejan en su manifiesto por el Orgullo y como también el Gobierno recalca en su declaración institucional, aprobada por el Consejo de Ministros este 27 de junio.

El Gobierno "invita a toda la ciudadanía" a los actos del Orgullo, de la "celebración de la libertad y la diversidad que no excluye a nadie"

El Ejecutivo, que acordó en 2018 —nada más aterrizado Pedro Sánchez a la Moncloa— declarar el 28 de junio como Día Nacional del Orgullo LGTBI, "se reafirma en la celebración del Orgullo como una herramienta imprescindible de toda la sociedad para alcanzar la igualdad real y efectiva e invita a toda la ciudadanía a los actos que en cada rincón de España se van a organizar con motivo de esta celebración de la libertad y la diversidad que no excluye a nadie", señala el texto. El Gobierno recalca que España se sitúa a la cabeza de los "avances" para el colectivo, ya que "en unas pocas décadas ha recorrido un largo camino de igualdad y derechos".

"Pero ese orgullo de país —advierte el Ejecutivo de coalición— no nos debe hacer olvidar que sigue quedando camino por recorrer, que las personas LGTBI siguen sufriendo intolerables niveles de violencia (física, psíquica, sexual…), de delitos de odio, de acoso en los centros educativos, de discriminación en el acceso al empleo y en los puestos de trabajo, de invisibilidad y de falta de referentes en muchos espacios". "Debemos vivir en una revuelta permanente contra la discriminación y la injusticia, contra la intolerancia y contra los privilegios de quienes quieren construir un mundo que excluye a quienes no encajen en su visión del mismo", sentencia la declaración, que repasa además los avances legislativos de estos últimos cuatro años, entre los que destacan la ley para la igualdad de trato y la no discriminación —la llamada ley Zerolo— y la ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos de las personas LGTBI (la Ley Trans).

El expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la ministra de Igualdad, Irene Montero, durante el acto de entrega de los Reconocimientos Arcoíris, en el Real Jardín Botánico de Madrid, a 27 de junio de 2023, en Madrid (España). Hoy, víspera del 28 de junio, Día Internacional del Orgullo LGTBI, tiene lugar el acto de entrega de los III Reconocimientos Arcoíris a personas y organizaciones destacadas en la visibilización, apoyo y defensa de los derechos de las personas LGTBI. Este evento está organizado por el Ministerio de Igualdad y la Dirección General de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI. 27 JUNIO 2023;LGTBI;PREMIOS;DERECHOS Alejandro Martínez Vélez / Europa Press 27/6/2023

El Gobierno se compromete a "dar todos los pasos necesarios para que esos derechos" del colectivo LGTBI "no figuren solo en las leyes, sino que sean efectivos en cada día, en cada minuto de la vida de todas las personas". En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de este martes, la portavoz, Isabel Rodríguez, reiteró el compromiso total del Ejecutivo con las personas LGTBI y lanzó una advertencia que casaba con el momento político de negociaciones de PP y Vox y la "amenaza" de recortes de derechos que aprecian los socialistas: el Gobierno combatirá los discursos de odio "con la fuerza del Estado y de la legislación".

El Ejecutivo promete combatir los discursos de odio "con la fuerza del Estado y de la legislación"

"Queremos que sus derechos sean reales y efectivos, que se logre una verdadera erradicación de la discriminación por orientación sexual, identidad o expresión de género", dijo, para agregar que el Ejecutivo "va a seguir trabajando por la felicidad y el amor de todas las personas".

En efecto, la aprobación de la declaración institucional este 2023 adquiría especial significado por el contexto. Los pactos del PP con la formación de Santiago Abascal, contra los que cargaban con mucha mayor rotundidad los socialistas en su manifiesto, hecho público este lunes. Ellos estarán, proclaman, "siempre", frente "a los pactos entre el Partido Popular y Vox que ponen los derechos LGTBI en su punto de mira".

El protagonismo de Zapatero

"Lamentablemente, los mismos que recurrieron la ley del matrimonio igualitario al Tribunal Constitucional o negaron el derecho a la adopción homoparental, entre otras cosas, amenazan con tirar a la basura los derechos que tanto ha costado conseguir", avisa. Y añade: "Ya conocíamos una derecha que recurría sistemáticamente cualquier avance en derechos y libertades en nuestro país, pero lo que hoy tenemos enfrente es un paso más en esta involución. Hoy nos enfrentamos a una pinza que amenaza con derogarlo todo".

Por eso el PSOE anima a sus militantes y simpatizantes, y a todos aquellos que se enorgullecen de vivir en uno de los países del mundo "que más respetan los derechos de las personas LGTBI", a "unirse a los actos del Orgullo" de esta semana. "A defender y reivindicar que no estamos dispuestos a retroceder ni un milímetro a un pasado gris y reaccionario", sino a "seguir avanzando con paso firme hacia el futuro", señala el manifiesto.

En las Cortes de Castilla y León, su presidente, Carlos Pollán, de Vox, volvió a impedir la exhibición de la bandera LGTBI y ordenó su retirada de los despachos del Grupo Socialista

El PSOE lanzó además el lunes un vídeo de reivindicación del Orgullo, cuyo hilo conductor son las voces del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y de los ministros Pilar Alegría, Miquel Iceta, María Jesús Montero y Nadia Calviño, y finalmente el propio Pedro Sánchez. No es baladí el protagonismo del expresidente del Gobierno, de quien Ferraz está tirando para movilizar al electorado progresista en esta campaña a través de una hiperpresencia en los medios de comunicación. En este caso, está más que justificado ya que fue su Ejecutivo el que en 2005 aprobó la ley de matrimonio igualitario que situó a España a la cabeza de los países que reconocieron ese derecho. Zapatero mantendrá el viernes un coloquio, con motivo del Orgullo, con el secretario de LGTBI de la ejecutiva federal, el waterpolista Víctor Gutiérrez.

Zapatero no acudirá, no obstante, a la manifestación del sábado en Madrid —nunca lo ha hecho—, como tampoco se espera que lo haga Sánchez, pero el PSOE sí contará, según indicaban fuentes de la Moncloa este martes, con una amplia representación de ministros en la marcha, además de Alegría y Marlaska. Puede que acudan Calviño o Iceta. También el partido participará en el desfile con su propia carroza, como todos los años anteriores. "Nosotros ni sobreactuamos ni hacemos de menos: hacemos lo de siempre. Para quien será una semana complicada es para el PP, porque tendrá que responder muchas más preguntas de con quién está pactando y qué hace en los ayuntamientos y en las comunidades autónomas donde acuerda con Vox".

Hemos estado siempre en el Orgullo, dentro del colectivo, no tenemos que hacer nada diferente a lo hecho otros años. Es el PP el que tiene problemas y el que tendrá que dar muchas explicaciones si fuera a la manifestación", aseguran en la cúpula del PSOE

El PSOE no considera una cuestión menor que, merced a los pactos con la ultraderecha, desaparezcan las banderas LGTBI. Este martes, los diputados del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León colgaban de sus despachos la enseña arcoíris, dado que desde el año pasado el presidente de la Cámara, Carlos Pollán (Vox) prohíbe que el Parlamento autonómico acoja toda iniciativa vinculada al Orgullo. Ya el año pasado los procuradores socialistas se las ingeniaron de la misma manera. Y Pollán ordenó la retirada de la bandera. No lo hicieron, y tampoco lo harán este 2023, pese a que el presidente de las Cortes instó al PSOE a la "retirada inmediata" de las enseñas.

"La bandera sigue en su sitio y de ahí no se mueve. Como de ahí no se movió el año pasado. En este caso no buscamos campaña, sino defender los ideales sin alterar el orden. Porque siempre se exhibió o proyectó en la fachada la bandera LGTBI, con presidentes de las Cortes de PP o de Ciudadanos, hasta que Alfonso Fernández Mañueco [el presidente regional] cedió el puesto a Vox".

En redes sociales, ha florecido el mensaje de "Ellos la quitan [la bandera], nosotros la ponemos". El arcoíris ha poblado los tuits de los cargos socialistas. El propio Sánchez quiso lanzar ese mismo mensaje al acudir a El hormiguero (Antena 3) con la pulsera arcoíris en su muñeca derecha. "Al quitar las banderas LGTBI [de los ayuntamientos], se está diciendo a ese colectivo que este lugar no es seguro. Porque si lo quitan es por algo. Ponerlo significa un compromiso", explicaba el presidente al conductor del programa, Pablo Motos.

"Más allá de que el PP encienda unas lucecitas en [su sede de la calle de] Génova, permite a Vox con sus pactos que se retiren las banderas LGTBI de los ayuntamientos y de las instituciones. Eso se llama hipocresía. Si se piensan que con unas luces en Génova lo tienen hecho, es que no se toman muy en serio a la gente", apuntan desde Ferraz, donde niegan "instrumentalización del Orgullo". "Hemos estado siempre en el Orgullo, dentro del colectivo, no tenemos que hacer nada diferente a lo hecho otros años. Es el PP el que tiene problemas y el que tendrá que dar muchas explicaciones si fuera a la manifestación". Los socialistas no temen reproches por parte del colectivo trans una vez aprobada la ley a principios de este año, norma que provocó un desgarro en el colectivo feminista pero en la que prevaleció el criterio del Ministerio de Igualdad, de Irene Montero.