El juicio que se celebra en la Audiencia Nacional contra la cúpula de los Mossos d'Esquadra por su responsabilidad en los hechos ocurridos entre el 20 de septiembre de 2017 y el 1 de octubre en Cataluña, cuando se celebró el referéndum ilegal para alcanzar la independencia de dicho territorio promovido por el Gobierno de Puigdemont, alcanzará uno de sus momentos cruciales este lunes.

Llega la declaración como testigo del coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos, el encargado de coordinar el operativo policial de Policía, Guardia Civil y Mossos d'Esquadra contra la consulta ilegal que ya afirmó como testigo en el juicio del procés del Tribunal Supremo que el dispositivo de la Policía catalana fue "insuficiente, inadecuado e ineficaz".

Su declaración fue tenida en cuenta por los magistrados de la Sala Penal del Tribunal Supremo para afirmar en la sentencia condenatoria para los líderes políticos del proceso soberanista que los Mossos facilitaron la celebración del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 con su «actuación aparente» y su intervención «en un mínimo número de centros», a pesar de que no eran objeto de la causa. También que tuvieron «connivencia» con los líderes del procés, probablemente por su «coincidencia ideológica» y las expectativas de «granjearse el aplauso y beneplático» del presidente Puigdemont y los miembros de su Govern.

"Puso palos en las ruedas"

Tanto Pérez de los Cobos como el mayor de los Mossos Josep Lluis Trapero -principal acusado del juicio que se celebra en la Audiencia Nacional solicitando la Fiscalía 11 años de prisión para él por un presunto delito de rebelión- declararon como testigos en el juicio contra el proceso soberanista del Tribunal Supremo.

Ninguno de los dos ocultó los encontronazos que se dieron entre ambos a la hora de abordar la crisis del referéndum ilegal

Mantuvieron posiciones claramente antagónicas y ninguno de los dos ocultó los encontronazos que se dieron entre ambos a la hora de abordar la crisis del referéndum ilegal. Pérez de los Cobos fue especialmente duro contra Trapero, de quien dijo que continuamente "puso palos en las ruedas" y afirmó que el día "1 de octubre tuvo la constatación de que los Mossos no iban a actuar para impedir la celebración del referéndum ilegal del 1 de octubre" a pesar de las órdenes judiciales. También sostuvo que, hasta esa misma mañana, no tuvo conocimiento de que el Cuerpo catalán sólo pondría a dos mossos, el conocido como "binomio" en cada colegio electoral para impedir que la gente votara. Para Pérez de los Cobos, aquéllas fueron las pruebas de la "pasividad" de la Policía catalana que Trapero encabezaba para permitir la consulta.

Por su parte, Trapero reconoció también como testigo en el juicio del procés -y constató como acusado la semana pasada en la Audiencia Nacional- que no recibió con buenos ojos que nombraran a Pérez de los Cobos coordinador del dispositivo policial y le pusieran a sus órdenes.

Sin embargo, tanto en el juicio ante la Sala Segunda del Alto Tribunal como en el de la Audiencia Nacional que tiene lugar estos días en la sede de San Fernando de Henares (Madrid), el máximo responsable de los Mossos mantuvo que en ningún momento actuó (ni él ni los miembros de su Cuerpo) buscando favorecer al Govern independentista.

Sostuvo que no tenía suficientes efectivos para mandar a más de dos agentes a cada colegio electoral y que los Mossos también cerraron colegios electorales el 1 de octubre. Acusó a la Guardia Civil de no avisarles de que harían una operación "sensible" el día 20 de septiembre en la consejería de Economía catalana y que por eso los Mossos no pudieron reaccionar enviando efectivos para paralizar el asedio a la comitiva judicial que registró dicho edificio y que se encontró con 40.000 manifestantes a las puertas cuando concluyó.

Trapero mantiene su "ruptura" con Puigdemont, contra el que afirmó tener incluso un dispositivo policial preparado para detenerle (igual que a los miembros de su Gobierno) del que no quedaron pruebas documentales y del que la Fiscalía duda siquiera que existiera.

Con todos estos elementos, la declaración de Pérez de los Cobos de este lunes, él de nuevo como testigo pero Trapero ya como acusado, se avecina crucial para el juicio contra la Cúpula de los Mossos que ya es visto como el segundo juicio del procés, en el que se verá si la Justicia considera que la Policía catalana merece (o no) una condena por su actuación los días candentes del desafío independentista catalán.