La coordinación e incluso el acierto han brillado por su ausencia en una de las decisiones más importantes en la gestión del Gobierno de la Comunidad de Madrid para atajar la crisis del coronavirus en los últimos meses. En contra, este miércoles ha primado la desorganización y, en suma, el caos informativo a la hora de anunciar el nuevo paquete de medidas que entrará en vigor, previsiblemente, este fin de semana o el próximo lunes 21 de septiembre, entre las que se encontraría el "confinamiento selectivo" de los barrios y municipios más afectados por el impacto de la pandemia, una iniciativa drástica que, pese a haberse anunciado desde la Consejería de Sanidad, mantiene en vilo a miles de madrileños por los desmentidos y la falta de concreción que han manifestado en diferentes capas del ejecutivo madrileño al respecto.

La tormenta a la Puerta del Sol llegaba a primera hora de la mañana del miércoles, cuando el viceconsejero de Sanidad, Antonio Zapatero, anunciaba que Madrid daría "un paso más" para frenar la expansión del virus y pondría en marcha en un par de días una serie de normas que afectarían fundamentalmente a la "movilidad" en aquellas zonas donde la situación es más complicada. Y concretaba: las restricciones "van en la línea de lo que la gente puede entender como confinamiento selectivo por zonas básicas de salud o por áreas de salud con más incdencia". Claro y preciso.

Ningún cargo de la Comunidad de Madrid lo afirmó públicamente, pero fuentes gubernamentales desmintieron a las pocas horas el anuncio que había hecho el número dos del departamento de Sanidad. Sin quitarle autoridad, porque "como médico sabe lo que dice" pero "no es un comunicador especialista", en el entorno de Ayuso señalan a Zapatero como responsable del caos informativo en el que se ha sumido la Comunidad de Madrid por informar antes de tiempo una noticia que, sin dejar de ser cierta, "aún no estaba cerrada". Ni si quiera se había discutido aún en el Consejo de Gobierno, que se celebraba casi al mismo tiempo en que tenía lugar la rueda de prensa del que fuera ex director del hospital de Ifema.

Fuentes de la Consejería de Sanidad afirman que el responsable máximo de este departamento, Enrique Ruiz Escudero, estaba al tanto de la "opción" de un confinamiento selectivo de barrios y municipios, pero más que una decisión formal como ha dado a entender Zapatero, en el ejecutivo madrileño la medida recibía aún el tratamiento de planteamiento por las múltiples aristas, tanto sociales como jurídicas, que conlleva un dictamen de estas características. El viceconsejero "se ha precipitado con el anuncio", coinciden otras fuentes consultadas, cercanas al ejecutivo regional.

Ayuso quería esperar al viernes

Que se procederá a limitar la movilidad de la población en algunas zonas es una decisión que no se cuestiona. Aún quedan por concretarse los detalles -el cómo, el cuándo y el dónde sigue "en estudio"-, pero no será un "confinamiento" como el de medidados de marzo, tal y como afirmó este miércoles el consejero de Justicia, Enrique López, en declaraciones para la Cadena Ser, en las que lamentó que Antonio Zapatero utilizase un término que "asusta" y que "hace pensar en la situación de marzo o abril".

De hecho, según adelantó El Confidencial, la Comunidad de Madrid ha pedido a sus servicios jurídicos que examinen las herramientas disponibles para lograr limitar la movilidad sin llegar a un confinamiento total, ya que el ejecutivo madrileño, como recordó López en el citado medio, no cuenta con instrumentos legales suficientes como para encerrar a los ciudadanos como se hizo durante el estado de alarma.

El ejecutivo madrileño desconocía que el número dos de Sanidad quisiera hacer público ya este miércoles las intenciones de endurecer las medidas antiCovid porque lo previsto y lo agendado era que el consejero del ramo, Enrique Ruiz Escudero, desgranase el viernes el conjunto de medidas "al detalle", cuando tendrá lugar la reunión para la revisión de la orden denominada como Operación Retorno, que incluye una serie de medidas que se acordó repasar y actualizar en períodos de 15 días, en función de la evolución epidemiológica de la región.

Además, según informó El Mundo y pudo confirmar El Independiente, otra de las medidas troncales del nuevo plan de Ayuso para plantar cara a la segunda oleada de la pandemia sería la reapertura del hospital de campaña de Ifema, una iniciativa que, como el resto, sigue estudiándose. El resto de propuestas pasarían por una mayor reducción de aforos no sólo en eventos o recintos, sino también en la hostelería; controlar aglomeraciones y limitar los encuentros sociales rebajando aún más el número de personas permitido en reuniones tanto en el ámbito público como en el privado.

Madrid sigue siendo la zona más afectad de España por la pandemia. Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, los contagios se elevan hasta los 1.854 en las últimas 24 horas, que suman 21.131 nuevos positivos en tan sólo siete días.

La presión hospitalaria vuelve a estar en una situación preocupante. En la Comunidad de Madrid hay actualmente 3.207 personas con coronavirus ingresadas en los distintos hospitales de la red pública y privada, lo que supone el 16% de la capacidad asistencial de Madrid, casi el doble de la media nacional. El escenario se agrava aún más en las UCI, al 40% de su capacidad, con 377 camas ocupadas por pacientes graves de Covid-19.