Hace unos meses, cuando empezó la guerra en Ucrania y la inflación se disparó, el discurso o, mejor dicho, la advertencia que se lanzaba desde muchos ámbitos era que la morosidad iba a despuntar. Sin embargo, parece que todavía no ha llegado. Los bancos han registrado en 2023 tasas de mora con ligeros repuntes que no anticipan ningún problema de crédito en el corto plazo. Las seis entidades más importantes han alejado un deterioro significativo en este aspecto, pero los créditos en riesgo de impago han aumentado en casi 7.000 millones en el último trimestre

La consultora internacional Accuracy ha realizado un análisis sobre el sector bancario español con los datos de 2023 que han presentado estos últimos días. En el informe se detalla que Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Bankinter, Sabadell y Unicaja han aumentado en 6.866 millones de euros en créditos en Stage 2 (en vigilancia especial) y Stage 3 (créditos dudosos). La evolución ha sido dispar entre los seis bancos, pero la suma global es que tienen más créditos en riesgo de impago al acabar diciembre que en septiembre de 2023.

A cierre de 2023, las entidades con más peso en España tenían 237.768 millones de euros en créditos en riesgo de impago. Si se desgrana por fase en la que está el crédito, los que están en Stage 2, aquellos que el cliente sigue pagando, pero se han tenido que refinanciar, son los mayoritarios. Una situación que es menos alarmante. Concretamente, tienen 167.638 millones de euros clasificados en fase 2. Esta cifra supone un aumento de 6.288 millones en tres meses. Por otro lado, los créditos de Stage 3, que son aquellos que ya han registrado un impago, aumentaron en el último trimestre del año en 577 millones de euros, hasta los 70.129 millones.

A pesar del aumento global de los créditos en riesgo, hay diferencia entre las entidades. Hay que resaltar que las entidades más grandes como Banco Santander y BBVA tienen más volumen de crédito y operan en más geografías, por lo que el crédito en riesgo también es más elevado. 

Santander ha aumentado un 3,1% sus créditos en vigilancia especial (2.406 millones de euros) y un 0,2% en sus préstamos en mora (62 millones). Este aumento hace que sus créditos en riesgo se sitúen en 115.224 millones, la entidad con mayor volumen. La mora de la entidad presidida por Ana Botín se ha mantenido estable en Europa y Sudamérica, mientras que ha repuntado en Norteamérica. En Brasil los créditos dudosos siguen bajando.

Por lo que respecta a BBVA, la entidad incrementó 5.215 millones de euros sus créditos de vigilancia especial, siendo un incremento de 14,6% respecto al trimestre anterior, debido principalmente a la revisión de modelos, realizado al cierre del ejercicio 2023, incluyendo el efecto del terremoto en sur de Turquía durante el mes de febrero de 2023 que supuso la reclasificación de 273 millones a la fase 2. En total, el banco con origen en Bilbao tiene 56.311 millones de euros de crédito en riesgo.

En CaixaBank, el saldo de créditos en vigilancia especial ha disminuido un 2% respecto al trimestre anterior, es decir, 602 millones menos. Sin embargo, los préstamos en mora han aumentado un 3,9% afectados principalmente por el reconocimiento de nuevos dudosos y por la asignación de fondos colectivos a riesgos específicos. El segmento con más morosidad al cierre del año ha sido en los créditos de consumo (ratio de morosidad 3,4%), seguido de créditos a empresas (ratio de morosidad 2,9%). Con esta evolución, los créditos en riesgo se sitúan en 38.883 millones de euros, es decir, 225 millones menos.

Bankinter ha tenido una subida de 1,8% en fase 2 y una bajada de 1,1% en fase 3, manteniendo niveles estables durante el último trimestre reflejado en la tasa de mora, bajando solamente 8 puntos básicos. Así, la entidad tiene 4.545 millones de euros de crédito en riesgo de impago. Si se desgrana por fases, 2.732 millones son en Stage 2, es decir, 49 millones más; y 1.813 millones de euros en Stage 3, 20 millones menos que al finalizar el tercer trimestre.

Sabadell disminuyó tanto en créditos en vigilancia especial, un 4,8%, que en términos absolutos son 617 millones de euros menos; como en dudosos, un 1,9%, es decir, 114 millones de caída. Pese a la mejora, la ratio de morosidad incrementó (+11 puntos básicos) anualmente debido a la reducción del libro de crédito. Su cifra de créditos en riesgo a diciembre de 2023 es de 17.999 millones, 731 millones menos que en septiembre de 2023.

Unicaja también disminuyó su exposición a créditos fase 2 en 162 millones (-4,8%) y fase 3 en 169 millones (-9,7%), destacando la evolución intertrimestral de los créditos dudosos para empresas, con promoción y construcción inmobiliaria disminuyendo 72 millones de euros (-56,6%) y pymes y autónomos 58 millones de euros (-20,6%). Con todo esto, su total de créditos en riesgo es de 4.806 millones.

En el informe también se hace una evaluación sobre los resultados de las entidades en 2023. Tal y como señalan los expertos de Accuracy, los bancos españoles han aprovechado este entorno normalizado de tipos de interés, después de muchos años en el desierto de los tipos negativos. “Exhiben ingresos récord, especialmente en el margen de intereses, y beneficios antes de impuestos que las posicionan como unas de las más atractivas a nivel europeo. Incluso el ROE de varias de las principales entidades españolas comienzan a superar el coste de capital propio, tras años con un ROE de un solo dígito”, señalan 

Asimismo, apuntan que el esfuerzo realizado por estas entidades se refleja también en ratios de eficiencia que se sitúan por debajo del 50% en todos los casos, posicionándolas como la banca más eficiente de Europa (solo Unicredit puede compararse con la banca española). Por último, no se observan repuntes significativos en la morosidad, aunque sí un aumento del coste de riesgo.