Pablo Iglesias ha aprendido de su negociación con Pedro Sánchez y, a diferencia de 2019, esta vez exigirá, si a la izquierda madrileña le dan los números para formar un Gobierno de coalición en la Comunidad, una vicepresidencia y consejerías con contenido y capacidad real de gestión, no “cachos de ministerios”, según ha podido saber El Independiente. Y eso a pesar de que el candidato socialista, Ángel Gabilondo, ha convertido en uno de los ejes de su campaña electoral para el 4-M la promesa de que no pactará con el líder morado.

Pero tanto desde Unidas Podemos como desde Más Madrid defienden que “es imposible no llegar a un acuerdo sin dan los números para ello, sin vetos” previos, aunque eso lo digan los mismos que se negaron a ir en la misma candidtura que el líder morado.

No ven más fórmula que un amplio acuerdo si hay posibilidades de sacar a la popular Isabel Díaz Ayuso de la Presidencia autonómica, lo que le supondría al PP perder el gobierno regional donde lleva instalado desde 1995 y propinar una estocada a su jefe de filas, Pablo Casado. Estas elecciones le han dado a la izquierda una segunda oportunidad, después de que PP y Ciudadanos firmaran hace dos años un gobierno de coalición con el apoyo parlamentario de Vox a pesar de que Gabilondo ganó las elecciones.

No está contento con el reparto de la tarta ministerial

No está contento el hasta este martes vicepresidente segundo con el peso real de los morados en el Gobierno central, con el reparto de la tarta ministerial que se hizo entonces, donde la única responsabilidad con competencias importantes es la de la titular de Trabajo, Yolanda Gómez, y próxima vicepresidenta tercera. Iglesias intentó, aseguran, dotar de contenido a Derechos Sociales y Agenda 2030, mientras que Igualdad, Universidades y Consumo tampoco dan mucho de sí, lamentan a la luz de la experiencia de este año de gestión. Pero la coalición se presentó tan “complicada”, aducen fuentes conocedoras de aquella negociación, que se hubo de aceptar dicho reparto.

En realidad, consideran que Sánchez mantuvo el grueso de sus competencias cediendo Trabajo y quitando a Carmen Calvo las políticas de Igualdad, lo que es fuente de choques continuos entre socialistas y morados, pero todo lo demás “son cachos de ministerios ya creados”. De hecho, Consumo no era más que una dirección general y Universidades se desgajó de Ciencia, hasta el punto de que su titular, el casi desaparecido Manuel Castells, admitió que no tenía sentido dividir en dos esa cartera.

Iglesias quiere revertir las políticas del PP en materia de Sanidad o Educación

Ahora, en el caso de que sume la izquierda y la fuerza electoral de Unidas Podemos sea superior a la de Más Madrid, Iglesias quiere negociar consejerías con las que gestionar cuestiones de peso y, sobre todo, revertir las políticas del PP en capítulos como Sanidad, Educación o Dependencia. De hecho, cualquier consejero de esas materias, “tiene ahora mismo más competencias que Iglesias”, dicen las mismas fuentes consultadas.

Cabe recordar que uno de los epicentros de la pandemia fueron las residencias de ancianos, donde el Covid se cebó con especial crueldad hasta el punto de que la mitad de los fallecidos eran residentes en estos centros. Desde vicepresidencia segunda, responsable de políticas sociales, se insistió una y otra vez que la competencia era autonómica y lo único que se podía hacer desde la administración central consistía en liberar fondos para mejorar la atención sanitaria de los más mayores.

Asumen los morados que la lista de peticiones y la capacidad negociadora depende la fuerza que tengan en el reparto de escaños. Consideran exorcizado el riego de quedar por debajo del 5 por ciento una vez que Iglesias ha dado el sato a la política regional. Salvado el partido de su desaparición en la Asamblea de Madrid, queda la pelea con sus antiguos socios, desgajados de las filas moradas.

En 2019 la lista municipal de Más Madrid la encabezaba Manuela Carmena y la autonómica Íñigo Errejón. Esta vez la lista local no va a tirar de la autonómica y Mónica García no es Errejón. Están convencidos los morados de que pueden ser la segunda fuerza política de la izquierda tras el PSOE.

Empate Más Madrid-Podemos

Ya hay sondeos que les sitúan a muy poca distancia de Más Madrid. En el último, de NC Report para La razón, los de Errejón pierden siete con respecto al resultado de mayo de 2019 (de sus actuales 20 bajaría a 13) mientras que Unidas Podemos sube de 7 a 12. Un casi empate del que depende el grado de exigencia de Iglesias a la hora de ofrecer sus votos para una hipotética investidura de Ángel Gabilondo.