Último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) del año. El organismo que dirige José Félix Tezanos ha elaborado su encuesta de diciembre en plena polémica por la derogación del delito de sedición, la reforma de la malversación y de las leyes orgánicas del CGPJ y el TC o la rebaja de penas de prisión a delincuentes sexuales a raíz de la ampliación de horquillas de la ley del 'solo sí es sí' derivada de la fusión de la tipificación abuso y agresión sexual. Bajo esta nueva medición, el PSOE del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lograría el 30,6% del voto. Por su parte, el Partido Popular (PP) de Alberto Núñez Feijóo, 28,6%. Ello supone un descenso de 2,1 puntos en comparación con el mes anterior para el partido que lidera el Gobierno y un ascenso de 1,4% para los de Génova. Por entonces, ya estaba contemplada la reforma general de la sedición y su sustitución por un delito de desórdenes públicos agravados.

En noviembre, los socialistas encabezaron el barómetro con el 32,7 de porcentaje de voto, mientras que Feijóo quedó como segunda opción nacional para los españoles con el 27,2%. El mes pasado, se apreció un repunte también el la valoración dada a Vox, después de un descenso notable al 8,8% de los sufragios. Pasó al 10,1%. Todo como castigo del electorado conservador a Feijóo favoreciendo la respuesta contundente de Abascal ante el planteamiento de la sedición. Algo que generalmente le benefició en el resto de sondeos y de manera más exponencial, enmarcándose en torno a los 16-17 puntos. En el caso de Unidas Podemos, y aún sin contemplar una alianza bajo el paraguas de Sumar y Yolanda Díaz, la atribución era de 11,4%.

La situación actual de ambas formaciones, potenciales socios de PSOE, por la izquierda, y PP, por la derecha, es algo mejor. El partido de Santiago Abascal se haría con el 10,2% de los apoyos. La fuerza morada, en su caso, subiría hasta el 12,4%. En el caso de Ciudadanos (Cs), que en enero reformará su estructura de partido y situará una nueva dirección nacional, la estimación sigue siendo crítica. El CIS es una de las pocas encuestas que en los últimos meses garantizaba su supervivencia nacional con un escaño. Algo que, en diciembre, se mantiene con el 2,9% de los votos.

Bajo este escenario, la suma de la izquierda y el independentismo -reeditando la actual fórmula de Gobierno- daría a Sánchez capacidad para mantenerse en La Moncloa tras unas generales. Socialistas y morados suman el 43% de los votos a su favor. Una alternativa que pase por PP y Vox alcanzaría el 38,8% de los apoyos ciudadanos. Podría añadir un 0,5% de Navarra Suma de reeditarse el pacto a nivel nacional.

Último cara a cara en el Senado

Con estos resultados llegan a la última sesión de control al Gobierno en el Senado el presidente del Gobierno y secretario general socialista y el líder de la oposición. Esta mañana, Sánchez ya ha marcado cuál será la senda discursiva que empleará frente al PP, que llega de haber 'ganado' la batalla judicial por el intento de reforma de la justicia tras haber aceptado el TC el recurso de amparo popular con medidas cautelarísimas. Esta línea será desplazar la crítica institucional a los jueces conservadores del Constitucional hacia el propio PP. Feijóo, en cambio, buscará reforzar esa victoria en los tribunales con una buena puesta en escena con la que cerrar el año de cara al ciclo electoral que se iniciará en mayo.

El trabajo de campo se ha realizado la primera semana de diciembre, una vez el PSOE y Unidas Podemos aceptaron la reforma de la malversación, introdujeron la tipificación de enriquecimiento ilícito y registraron en sede parlamentaria las polémicas enmiendas 61 y 62, que buscaban desbloquear el Alto Tribunal con un cambio en el sistema de elección tras estar caducado el mandato de dos de sus integrantes desde junio.