En este caso, la sensación que circulaba en el PSOE en los últimos días tenía fundamento. Finalmente, Pedro Sánchez ha decidido introducir otro cambio más en un puesto relevante, la portavocía del partido en el Senado, la Cámara en la que el PP disfruta de una mayoría absolutísima. A la dirigente del PSC Eva Granados, en el puesto desde octubre de 2021, la reemplaza a partir de ahora el secretario general de los socialistas andaluces y último candidato en las elecciones autonómicas, Juan Espadas (Sevilla, 1966). En el Congreso, mientras, no habrá relevos por ahora: se quedará el exlehendakari y diputado por Bizkaia Patxi López, que accedió al cargo en julio de 2022. En el partido, mientras, no se cubrirá la vacante de Pilar Alegría, nueva portavoz del Gobierno. Se va a ensayar, al menos por ahora, una portavocía coral en Ferraz, como informaba este diario.

La ejecutiva federal reunida este lunes en Ferraz, y presidida por el propio Sánchez, formalizó la sustitución de Granados por Espadas y la confirmación de López. Ferraz, en un comunicado posterior, mostró el agradecimiento del partido con el trabajo que ha desempeñado la dirigente catalana en los últimos dos años al frente de la portavocía en el Senado —ella reemplazó a su vez a Ander Gil, que tras la marcha de Pilar Llop a Justicia pasó a dirigir la Cámara alta entre julio de 2021 y agosto de 2023—. Trabajo que ha sido "esencial para que salgan adelante las normas impulsadas por el Gobierno". 

Granados manifiesta su "agradecimiento" a Sánchez por la confianza depositada en ella

Granados trasladó, en la reunión de la cúpula, su agradecimiento a Sánchez por la "confianza" que depositó en ella, así como al PSC y a su primer secretario, Salvador Illa. Y también cumplimentó al "equipo de mujeres y hombres que han trabajado y seguirán trabajando para que España siga avanzando". Granados manifestó que ha sido para ella un "honor" liderar el Grupo Socialista en la Cámara alta y recalcó que a partir de ahora seguirá "sirviendo al proyecto socialista" y poniendo todo su "bagaje y experiencia allí donde estén" sus responsabilidades. 

Pedro Sánchez es aplaudido por su bancada y por el Gobierno tras su discurso en el debate de investidura, el pasado 15 de noviembre de 2023 en la Cámara baja. Detrás de él, los hasta ahora portavoces socialistas de Congreso y Senado, Patxi López y Eva Granados. Ella será relevada ahora por el líder del PSOE-A, Juan Espadas. EUROPA PRESS / ALEJANDRO MARTÍNEZ VÉLEZ

Del tándem que formaban Granados y López, ella parecía el eslabón más débil. En las últimas semanas su nombre estuvo en las quinielas de ministrables, pero no entró en el nuevo Gabinete, y tras la constitución del Ejecutivo, circulaba la posibilidad de que ella fuera relevada en el Senado, como así ha sido.

Menor cuota del PSC

Está por ver que el movimiento de Sánchez con Espadas tenga consecuencias a futuro. El mensaje interno del líder del PSOE-A a su grupo parlamentario en la Cámara autonómica, del que es presidente (no portavoz), es de continuidad: "Esta nueva responsabilidad será un nuevo acicate para mí en la labor de oposición al Gobierno de la Junta en el Parlamento andaluz cuyo presidente [Juanma Moreno] ha sustituido la lealtad institucional por la confrontación y la demagogia contra el Gobierno de España".

Espadas prevé mantenerse como presidente del grupo en la Cámara andaluza y como candidato a la Junta en 2026

Espadas se mostró ante los suyos de que "el balance de gestión de los socialistas en España", ahora que arranca la XV Legislatura, junto a la labor de "oposición útil en Andalucía" serán, cree, "las mejores razones para recuperar la confianza de los andaluces y el Gobierno de la Junta en 2026". "A ello dedicaré todo mi esfuerzo", concluyó. Es decir, que se ve todavía como secretario general del PSOE-A y como candidato en las siguientes autonómicas. Al ser presidente de su grupo, no tiene que estar en el día a día, porque su portavoz en la Cámara sevillana es la vicesecretaria regional del partido, la jiennense Ángeles Férriz. "Es un refuerzo de visibilidad importante en la lucha por recuperar la Junta en 2026 en un momento en que en el Senado debe liderar el debate de la financiación y la igualdad entre territorios. Y lo haremos con la visión andaluza", rubrican a este diario fuentes muy próximas a Espadas.

Por tanto, el gesto de Sánchez se puede leer como un claro refuerzo interno. Así lo ven distintos dirigentes de primer nivel de la federación. Se "fortalece" a Espadas desde Madrid al acentuar su "visibilidad". Al menos, por ahora, porque no han comenzado en el PSOE los procesos congresuales, y por tanto no se ha emprendido todavía el camino de relevo o confirmación de los actuales barones territoriales. Espadas, que ganó las primarias internas en junio de 2021 a Susana Díaz —hoy senadora por designación autonómica como él—, cosechó una contundente derrota en las elecciones de 2022, en las que Moreno firmó una histórica mayoría absoluta para el PP.

El PSOE-A, la federación más relevante, tocó fondo en las regionales y las municipales, pero cogió oxígeno en las generales del 23-J

Las municipales del 28-M se convirtieron en un auténtico desastre para el partido —se perdió hasta la joya de la corona, la alcaldía de Sevilla—, pero en las generales del 23-J el líder autonómico pudo coger oxígeno, ya que el PSOE creció en votos respecto a 2019 y perdió cuatro diputados en el Congreso. Una caída tolerable internamente. Ahora Espadas, de mayor peso orgánico que Granadas, lógicamente, tomará la jefatura del PSOE en la Cámara alta, en la que el PP quiere aprovechar su mayoría absoluta para fiscalizar al Gobierno al máximo y para entorpecer cuanto pueda su labor legislativa. El presidente, pues, eleva el perfil político de su voz en el Senado, en coherencia con los movimientos ejecutados en su Gabinete.

En el futuro, advierten cuadros del PSOE-A, ya se verá si Espadas es finalmente el candidato: queda mucho tiempo y "todo puede cambiar". Por lo pronto, hay varias competiciones electorales por delante: las vascas, las gallegas, las europeas y las catalanas. "Si Pedro no lo quisiera de candidato, le habría hecho ministro, pero al premiarlo en el Senado no le aleja de Andalucía. El riesgo es que le robe mucho tiempo a su labor de oposición aquí —aduce un secretario provincial—. Pero es que además no hay un candidato preparado y potente que le pueda relevar".

Con la salida de Granados de la dirección del grupo en la Cámara alta, el PSC pierde otro puesto de visibilidad en Madrid. En agosto, Meritxell Batet renunció a repetir como presidenta del Congreso y fue elegida en su lugar Francina Armengol, expresidenta de Baleares y líder del partido en las islas.

Y la semana pasada Sánchez sacó de su Ejecutivo a los dos integrantes del partido hermano, Miquel Iceta y Raquel Sánchez, ministros de Cultura y Deporte y de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. La cuota del PSC fue cubierta por el nuevo responsable de Industria y Turismo, Jordi Hereu, exalcalde de Barcelona.

Otro notable del PSE, José Antonio Santano, alcalde de Irún desde 2002, ocupará la Secretaría de Estado de Transportes

La confirmación de López, mientras, era esperada. El exlehendakari tiene el peso político y de azote al PP que el presidente busca, y una facilidad comunicativa que también persigue en una legislatura, además, en la que se ha hartado de decir que se trata de legislar menos, pero de gestionar más y explicar mejor. López tiene buen cartel interno y ayuda a elevar el ánimo de los suyos. Las cuestiones más técnicas de negociación con los grupos, no obstante, descansan en el equipo del Ministerio de Presidencia y Justicia, que lidera Félix Bolaños. La continuidad del dirigente vasco es un premio para el PSE justo a las puertas de las autonómicas y en un momento en el que no cuenta con un ministro en el Ejecutivo. Pero el PSE sí tendrá otro puesto importante: el de secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible. Lo ocupará José Antonio Santano, alcalde de Irún (Gipuzkoa) desde 2002. Él será el número dos de Óscar Puente en el departamento inversor por excelencia de todo Gobierno.