Génova mantiene la posición fijada por el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, el pasado miércoles en el Congreso de los Diputados. Allí defendió el modelo de los dos Estados, el israelí y el palestino, pero condicionado. Siempre y cuando ello sea producto de un proceso de negociación y esté respaldado por una masa importante y crítica de más países "de peso". Y no solo por el Gobierno español. A ese posicionamiento se ha vuelto a referir este viernes la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, desde la sede nacional del partido, preguntada por el posicionamiento que, horas antes, la líder del PP de Madrid y presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, ha adquirido.

"Quedó muy clara en el Congreso de los Diputados. Dos Estados, pero dentro del reconocimiento internacional. Debe producirse en un contexto y de forma determinada", ha mencionado la número dos popular. Previamente, Ayuso había mencionado en un acto que con este reconocimiento que quiere impulsar el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien ahora está en plena gira europea con este objetivo al frente, se está "premiando a los terroristas de Hamás". Sin desautorizarla directamente, Gamarra ha reivindicado la posición del PP. De hecho, ha quitado hierro a las palabras de la madrileña: "A lo que se estaba refiriendo Ayuso es a que no puede salir fortalecido [de ese proceso] una banda terrorista como Hamás". Tras ello, Gamarra ha zanjado el tema y ha arremetido contra Sánchez, cuestionando su interés en ello y que tenga "abandonadas" a las Fuerzas de Seguridad del Estado por petición, ha dicho, "de sus socios".

Las palabras de Ayuso han acontecido durante la presentación del portal digital que el periódico The Objective ha hecho esta mañana en Caixa Fórum, en Madrid. Tan solo dos días después de que Feijóo defendiese que su partido sigue defendiendo el acuerdo alcanzado en el Congreso hace diez años, cuando se apostó por esa solución bilateral bajo esas condiciones. Allí, preguntada por las discrepancias, Ayuso ha matizado que ella no contradice a Feijóo, sino que lo hace a Sánchez.

Con todo, el tono de la presidenta marca de nuevo una deriva propia frente a la tutela de Génova. Ha defendido que lo que ahora pide Sánchez "de momento" es algo que "nadie había pedido". Es algo incorrecto, en todo caso. Al menos nueve países ya lo han hecho previamente. Incluido Estados Unidos. Esta misma mañana Noruega.

Reclamada por el PSOE en el Congreso

Ante un conflicto que ya lleva más de 30.000 muertos, entre Israel y Hamás, Ayuso defendía su rechazo a "premiar" a unos "terroristas" que "usan civiles como escudo humano" y priorizan la compra de misiles a la de alimento para la población. Para la presidenta madrileña, Sánchez intensifica esta reclamación para no estar en España, "con tal de estar huido y no comparecer ni dar explicaciones" de otras cuestiones nacionales. Ayuso ha cargado contra Sánchez duramente, llamándolo desde "desleal" hasta "sectario", y acusándole de imitar "el camino venezolano". Ello, tan solo un día después de que el PSOE haya materializado sus amagos y la haya incorporado en su lista de demanda de comparecientes para la comisión de investigación del Congreso sobre la compra de material sanitario. Algo de lo que el PP no está seguro de que cumpla la legalidad.

Para Ayuso, el presidente del Gobierno se excede en sus funciones, "no conoce sus límites" y aboga por "el frentismo" social. Asimismo, cree que dejará "una mala herencia" por su mala "gestión" que perdurará "durante décadas".