Miguelón o Cráneo número 5 es la pieza estrella de los yacimientos de Atapuerca. Fue descubierto en los años 90 e hizo historia. Nunca se había encontrado un cráneo tan completo y bien conservado. Gracias a él la humanidad pudo ver por primera vez con claridad la cara de un Homo heidelbergensis. Miguelón era alto, ancho y corpulento. Utilizaba herramientas sofisticadas y conocía el fuego. Cazaba grandes herbívoros y era temido por los carnívoros. Fue el predecesor de los neandertales. Podéis ver los fósiles originales de un puñado de estos seres del pasado en el Museo de la Evolución Humana, en Burgos.