El gobierno catalán quiere llevar ante la Unión Europea el proyecto de fusión entre CaixaBank y Bankia anunciado esta semana. Así lo ha anunciado hoy la consellera portavoz, Meritxell Budó, quien ha reconocido además que el Govern de Quim Torra no fue informado previamente de la operación para crear la mayor entidad financiera de España. Budó ha hecho este anuncio tras el primer Consell Executiu en el que han participado los nuevos consejeros de JxCat, una vez expulsados los afines al PDeCat.

El Govern ha acordado encargar a los servicios jurídicos del departamento de Economía que estudien la posibilidad de pedir a la Comisión Europea que se pronuncie con un informe sobre la concentración bancaria en España si se hace efectiva la fusión anunciada.

Budó ha reconocido que la operación no gusta al Govern, porque "nos preocupan los intereses de los clientes de las entidades bancarias, ya que la oferta cada vez es menor". Y ha apuntado además a la futura localización de los servicios centrales de la entidad resultante, dado que CaixaBank trasladó su sede social a Valencia, pero mantiene sus servicios centrales en Barcelona.

La consellera ha señalado además a los 8.000 puestos de trabajo "en riesgo" en el conjunto de España, aunque ha insistido en que "nos preocupa la concentración bancaria en territorio español" y sus consecuencias para los clientes.

Mesa de diálogo

La portavoz del Govern ha confirmado además que los gabinetes de Pedro Sánchez y Quim Torra trabajan sobre "la fecha y el orden del día" de la reunión de la mesa de diálogo entre Gobierno y Generalitat, después de que Sánchez telefoneara ayer a Torra para emplazarle a un nuevo encuentro en Barcelona.

Un encuentro al que, en principio, "no asistirían los dos presidentes" sino que participarán solo los "equipos negociadores" ha explicado Budó. La portavoz ha insistido en la voluntad del Govern de imponer en el orden del día el debate sobre el referéndum y la ley de amnistía.

"No tiene ningún sentido una mesa sobre un conflicto si puedes hablar de todo menos de lo que genera el conflicto" ha apuntado la portavoz, quien ha evitado, sin embargo, asegurar que el Govern vetará la mesa si no se tratan estas cuestiones, como aseguró Quim Torra en el Parlament.

"No vetaremos ningún tema que proponga el Gobierno y pedimos que no se nos vete a nosotros tampoco" ha apuntado Budó. "Pediremos que se pueda abordar en el orden del día la autodeterminación y la amnistía y esperamos que los equipos hagan su trabajo y acuerden este orden del día. Somos conscientes de que será negociación larga y no se resolverá en una reunión pero tenemos q empezar sin vetos".

Sigue la purga

Al margen de la negociación con el Gobierno, el Ejecutivo de Quim Torra ha completado hoy la "purga" de altos cargos ligados al PDeCat, con el cese del secretario general de Interior, Brauli Duart. El hasta ahora número dos de Buch forma parte de la antigua red de altos cargos ascendida de la mano de Artur Mas, dirigió la Corporación de Medios catalana a petición del propio Mas, y ahora ha seguido la suerte de su conseller, Miquel Buch.

Pese a no haberse alineado oficialmente en la guerra entre PDeCat y JxCat, nadie duda que esa guerra explica la sustitución de Duart, que ha sido sustituido por Elisabeth Abad.

El Govern ha aprobado además la sustitución de la polémica numero dos de Salud, Laura Pelay, por el hasta ahora director de Profesionales de la Salud, Marc Ramentol.