Pere Aragonès ha hecho mención al referéndum que hubo en Guinea Ecuatorial en diciembre de 1963, cuando España se hallaba en el franquismo, para defender su propuesta de realizar una consulta sobre la independencia de Cataluña.

Así se ha pronunciado el presidente de la Generalitat en un desayuno informativo organizado por Europa Press en Madrid, en el que ha recordado también otros ejemplos de referéndums en Europa como el de Escocia o el de Serbia y Montenegro.

Aragonès ha dejado claro que la votación en Cataluña para la autodeterminación sigue siendo su objetivo: “una vez conseguida la ley de Amnistía, hay que abordar el fondo del problema”, que es un problema “de soberanía”, porque una mayoría de catalanes quiere decidir su futuro y hay unas instituciones españolas que, hasta el momento, lo han impedido, según el presidente autonómico.

"En un referéndum sobre la independencia se vota sobre la independencia. Estoy dispuesto a pactar las condiciones bajo las cuales consideraríamos asumible el resultado. Estoy dispuesto a hablar de la fecha, de cómo gestionar los resultados, que si fueran por la independencia generarían grandes cambios", ha señalado.