El efecto Feijóo no se percibe en Andalucía. El único partido que crece en la nueva estimación del Barómetro del Centro de Estudios Andaluces (CENTRA) es Vox. Los de Santiago Abascal, aún sin candidato concretado, obtendrían el 19% de los votos y 22 escaños, y serían claves para que el PP y el actual presidente de la comunidad, Juanma Moreno, repitan en el Gobierno regional. Los populares, por su parte, pierden un 1,1 puntos en intención de voto y retroceden de 46 a 44 en los máximos de la horquilla de escaños asignada.

Moreno ganaría las elecciones con el 34 por ciento de los sufragios y lograria entre 43 y 44 representantes en el parlamento autonómico. Pero, para gobernar, requeriría del apoyo de Vox, su única opción dado el descalabro que sufriría Ciudadanos, que perdería representación hasta los dos parlamentarios y el 4,3%. La mayoria absoluta es de 55 escaños, por lo que a los conservadores sólo les vale mirar a la derecha.

Según este sondeo, que cuya oleada es trimestral, el PSOE de Juan Espadas, sería el segundo grupo más votado en la región, con el 25,3% y entre 30 y 31 diputados. Los socialistas, a pesar de ganar dos décimas de masa electoral, perderian entre uno y dos escaños en comparación con el anterior estudio.

Unidas Podemos, el socio prefierente del primer partido de la oposición, conseguiría el 9,1% del apoyo en las urnas, lo equivalente a 10 representantes. Pero, no valdría para sumar con el PSOE. Ni siquiera llegarian a la atribución dada a Moreno.

Adelante Andalucía, con el 2,8 por ciento de los votos, podría obtener entre 0 y 1 escaño, lo mismo que el partido antitaurino PACMA, con el 2,3 por ciento.

La correlación de fuerzas en el Parlamento andaluz, cuya mayoría absoluta está fijada en 55 escaños, es en la actualidad es PSOE, con 33 escaños, PP, con 26, Ciudadanos, con 21, Vox 11 y Unidas Podemos seis; con 11 representantes de Adelante Andalucía escindidos de los morados como "no adscritos".

La senda de Mañueco

El dirigente del PP andaluz no podrá reeditar el actual pacto de gobierno con Juan Marín y estaría abocado a seguir la senda iniciada por Alfonso Fernández Mañueco en Castilla y León, que el próximo lunes será investido presidente, de nuevo, con los votos de Vox.

Moreno, que por la crisis interna del PP decidió desplazar en el calendario la convocatoria electoral hasta finales de año, estaría planteándose celebrarlas entre junio y octubre. El devenir de los próximos acontecimientos a nivel nacional, marcará su actuación.