El amor de Ana Soria y Enrique Ponce ha sido, sin duda, una de las noticias estrella del mundo rosa en lo que llevamos de año.
Aunque al principio fue discreta en redes sociales y no quiso demostrar demasiado, Ana fue poco a poco dejando ver chispazos del amor que compartía con Ponce.
Ambos han sido la comidilla del verano, rumor va, rumor viene, y tiro porque me toca. Hasta la fecha, Ana había llevado con elegancia todo lo que de ella se había dicho, quitando alguna frase críptica en sus redes en la que parecía responder los alegatos más ridículos.
Sin embargo, la joven acudía ayer a su Instagram para poner fin a las acusaciones en torno a la última corrida de su amor. La joven, que acudió como acostumbra a las actuaciones de Ponce en el ruedo, se levantó de manera repentina de la Plaza de Toros de Granada, dejando al público desconcertado.
Muchas voces discordantes dijeron que salió escopetada por los abucheos, y la mentira era tal, que la propia Ana ha tenido que recurrir a las redes a aclarar lo sucedido.

«Ayer me fui de la plaza de toros de Granada porque me sentí mareada y decidí salirme. Todo lo demás es completamente inventado», decía en el mensaje.
«La gente se mostró más que cariñosa conmigo. Nada de lo que han dicho es verdad», aclara la joven, que dio las «gracias a todos los que os habéis preocupado, pero ayer fue una tarde muy bonita y no hubo ningún tipo de altercado».
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