No se conocían. Los juntó inicialmente la magia del Zoom. Y entonces se reconocieron en una receta común para detener la guerra. Ehud Olmert fue el primer ministro de Israel que precedió a Benjamin Netanyahu. Nasser Kidwa fue ministro de Asuntos Exteriores de la Autoridad Palestina y sobrino de Yaser Arafat. Ambos, israelí y palestino, han trazado un plan, una hoja de ruta para cerrar definitivamente la cíclica espiral de violencia y “agonía” que palestinos e israelíes protagonizan desde hace décadas, en plena escalada regional del conflicto, con un Oriente Próximo en llamas.
En ruta por las capitales del mundo, Olmert y Kidwa han presentado su iniciativa de paz este jueves en el Ateneo de Madrid, en un acto organizado por el Real Instituto Elcano. “No nos conocíamos y no nos habíamos encontrado antes. Nos reunimos por Zoom y empezamos a compartir opiniones. Muy rápidamente fue evidente que veíamos las cosas de un modo similar. Tenemos diferencias pero fundamentalmente tenemos el mismo objetivo. Y por eso lo pusimos por escrito y lo firmamos”, ha explicado Olmert a lo largo de la conferencia, compartiendo escenario con Kidwa.
Anexión israelí de 4,4% de Cisjordania a cambio del mismo territorio para palestinos en Israel
El plan que propugnan ambos se basa en el fin de la guerra en Gaza, tras un año que se ha cobrado 42.000 vidas. “La guerra en Gaza debe terminar. Los rehenes israelíes de Hamás deben ser regresar con sus familias. Israel tendrá que liberar al número acordado de prisioneros palestinos y debe retirarse de Gaza. Los palestinos deben crear allí una entidad nueva, responsable y legítima, que no estará compuesta por políticos de ninguna de las facciones palestinas. Debe estar vinculada orgánicamente a la Autoridad Palestina, pero ser lo suficientemente independiente como para ganarse la aceptación del pueblo palestino, los vecinos árabes y la comunidad internacional”, establece la hoja ruta de Olmert y Kidwa.
El documento propugna como base de la resolución de un conflicto con un siglo de vigencia -con el inicio del proyecto sionista y el nacimiento del Estado de Israel en 1948- las fronteras de 1967. “Una paz palestina-israelí sostenible debe basarse en la existencia de los Estados de Israel y Palestina, viviendo uno al lado del otro sobre la base de las fronteras del 4 de junio de 1967”, esbozan. “Estamos de acuerdo en que el 4,4% de Cisjordania, donde existen los principales bloques de asentamientos israelíes, incluida la zona de Jerusalén, debe anexionarse a Israel a cambio de un territorio de idéntico tamaño dentro de Israel que debe anexionarse al Estado de Palestina”, agrega el documento.
Más pronto que tarde, la guerra acabará en el sur y el norte. Y habrá que preguntarse: ¿qué vamos a hacer con 6 millones de palestinos? ¿Vamos a seguir ocupando sus territorios?
A juicio de Kidwa, “honestamente la única posible solución es la de los dos estados, vivir juntos palestinos e israelís”. “Podemos matarnos unos y otros o coexistir juntos. No hay más alternativa”, añade. “Nuestra propuesta cubre importantes temas y la absoluta necesidad de parar la guerra en gaza y el futuro de Jerusalén, que es un importante lugar para todo el mundo. Es una ciudad que no acepta ni el monopolio israelí ni el palestino. Tiene que estar abierta a todos. La Historia de la región se asienta en la Historia de Jerusalén”, recalca.
Según el plan, se necesita “acomodar realidades sobre el terreno que son demasiado difíciles de revertir”. “El corazón del conflicto es Jerusalén. Para ello, proponemos un plan que retire la Ciudad Vieja de Jerusalén, el centro de los lugares religiosos, del control soberano exclusivo de Israel y de Palestina. En su lugar, sería administrada por un fideicomiso de cinco Estados del que formarían parte Israel y Palestina. Aunque nuestro plan aborda todas las cuestiones fundamentales, no trata todos los detalles. En cambio, estamos de acuerdo en los contornos en los que debe basarse una auténtica paz palestino-israelí”.
Solución política en plena escalada militar
En mitad de una escalada regional, en el compás de espera de la respuesta israelí al ataque con 181 misiles balísticos de Irán la semana pasada, Olmert considera que “deberíamos haber parado la guerra mucho antes, hace 8 o 10 meses”. “La única posible solución es no tener ninguna bandera ondeado en los lugares sagrados de Jerusalén”, opina. “La guerra de ahora es un reflejo de las intensas confrontaciones soterradas y que estaban esperando a emerger durante los 15 años porque no había intentos serios para un proceso de negociaciones. Más pronto que tarde, la guerra acabará en el sur y el norte. Y habrá que preguntarse: ¿qué vamos a hacer con 6 millones de palestinos? ¿Vamos a seguir ocupando sus territorios, negándoles su derecho a la autodeterminación y sus derechos básicos? Si es así, Israel se volverá intolerable e inaceptable por parte de la comunidad internacional”, ha indicado el ex primer ministro.
Ambos signatarios del plan de paz coinciden, además, en la necesidad de renovar liderazgos en ambos lados. “Mientras que Netanyahu esté en el poder, no habrá progresos”, señala Kidwa con desacuerdo de Olmert. “Necesitamos cambiar la situación y el liderazgo y después nos podemos mover juntos hacia el futuro. Si seguimos en este camino, solo habrá más agonía u dolor que no llevan a ningún lugar. Tenemos que cambiar la cultura, el lenguaje con el que tratamos con el otro para aceptar al otro y aprender cómo coexistir juntos. Probablemente el lado oficial israelí y el palestino no se moverán, tenemos que tener el apoyo de la población y de algunos países”, argumenta el palestino. Kidwa sueña con una recomposición de la arena política palestina en la que pueda haber un nuevo Hamás, entendido como “un nuevo movimiento nacionalista islamista que pueda cumplir un rol distinto en la sociedad palestina”.
Mientras que Netanyahu esté en el poder, no habrá progresos
Olmert comparte la estrategia. “Me temo que el Gobierno israelí no esté interesado en educar a la opinión pública. Es justo al revés”, replica. “Necesitamos cambiar a nuestra gente; influirles y tenemos que contar con la comunidad internacional, con vuestros gobiernos, para que pongan la resolución de este conflicto en la prioridad de sus agendas y ninguno de los dos lados pueda escapar”. El israelí lanza una propuesta final: “Me gustaría que el presidente del gobierno español y el ministro de Exteriores convoquen una reunión con todos sus homólogos de la UE para que se reúnen con nosotros. Hay que romper el protocolo de la hipocresía. Hagámoslo aunque incomode al liderazgo israelí y palestino. Y luego que deciden. Tendría un enorme eco a lo largo de Europa y de la comunidad internacional, también en Estados Unidos. Tenemos que hacer algo extraordinario en lugar del modo tradicional y educado de la diplomacia. ¡No seamos educados! ¡Queremos hacer la paz!”.
Te puede interesar
-
Un mes de asedio hunde el norte de Gaza en una “hambruna inminente”
-
El kibutz Nir Oz, uno de los más afectados por el ataque de Hamás, aprueba su reconstrucción
-
Marruecos, destino del buque con armamento enviado por EEUU a Israel que veta España
-
Netanyahu pide aplazar su juicio por corrupción con la escalada de la guerra como argumento
2 Comentarios
Normas ›Comentarios cerrados para este artículo.
Lo más visto
- 1 Quién es quién en el escándalo sexual de Guinea Ecuatorial
- 2 Begoña Gómez informa al juez Peinado de que no asistirá el próximo lunes por estar en la cumbre del G-20
- 3 BBVA mantendrá la OPA sobre Sabadell pese al retraso de CNMC
- 4 Los policías critican el uso de la DANA para retener al DAO
- 5 Trump fichará para su gabinete a la gobernadora famosa por matar a tiros a su perro
- 6 Begoña en Brasil como el Dioni
- 7 El Gobierno intentó retrasar la jubilación del DAO de la Policía con otra artimaña
- 8 Los Reyes volverán a Valencia
- 9 Así llama Rita Maestre a su expareja Íñigo Errejón: "Depredador, manipulador patológico y misógino"
hace 1 mes
Israel ha provocado la guerra. Los palestinos llevan décadas en campos de refugiados
hace 1 mes
Ni los Palestinos pueden contralar a Hamás, ni lo Libanes a Hezbolá. ¿Que va a saber ningún político Palestino de como llegar a la paz?. Hablar es fácil, luego, ¿que va a hacer para contralar a Hamás?. Pura falsedad.