El de hoy será un día de enorme intensidad política en el Palacio del Senado, donde se reúne el pleno del Congreso por obras en el hemiciclo de la Cámara Baja. Nada menos que tres decretos gubernamentales corren el riesgo de naufragar provocando la primera gran derrota del Gobierno de Pedro Sánchez; la senda de déficit y las dos enmiendas a la totalidad -del PP y de Vox- a la ley de Amnistía, jalonarán un pleno extraordinario aún de resultado incierto.

Lo único seguro es que las enmiendas de populares y voxistas serán derrotadas por esa "mayoría de progreso" de la que habla Sánchez y que hoy se pone a prueba con Junts, -formación que amenaza con votar en contra de los tres decretos- y con Podemos, que rechaza una disposición sobre las prestaciones decrecientes de desempleo para los mayores de 52 años.

Será la secretaria general del PP, Cuca Gamarra - y no el portavoz parlamentario, Miguel Tellado-, quien tomará la palabra en nombre de los populares para defender la controvertida propuesta de "disolución", contenida en un nuevo delito de "deslealtad constitucional" por el que se penalizarían las consultas ilegales de autodeterminación y las declaraciones unilaterales de independencia. Feijóo ha decidido delegar así en su número dos en el partido y no defender su enmienda a la ley de Amnistía. Si nada cambia de hoy a mañana, esta decisión contrasta vivamente con el debate de toma en consideración, en el que sí intervino el líder del PP por entender que la cuestión a tratar era de suma gravedad.

El líder del PP sí participó en la toma en consideración de ley de Amnistía

Fue en el primer pleno de la legislatura, el pasado 22 de diciembre. Feijóo llegó a calificar esa sesión como la "más triste y decadente desde el 23-F", anunció la creación en el Senado de una comisión de investigación de los pactos con Junts y ERC y acusó a a Sánchez de "dejar en papel mojado el discurso del jefe del estado del 3 de octubre". Dijo de la ley de Amnistía que era un "fraude" y un caso de "corrupción política" e "injustificable". Pero justo el día que los populares tiene que defender su alternativa, Feijóo seguirá el debate, no desde la tribuna de oradores, sino desde el escaño que se le asigne en el Palacio de la Marina Española en calidad de líder de la oposición.

Detrás de esta decisión subyace el poco entusiasmo con que fue recibida la propuesta popular de disolución de partidos. Se amparaba en una reforma del Código Penal con la que ampliar los casos de responsabilidad de las personas jurídicas, conforme a una reforma de tiempos de Mariano Rajoy en 2012. Esa ampliación a partidos políticos y organizaciones sindicales permitió años más tarde a la Audiencia Nacional condenar al PP como partícipe a título lucrativo en la primera sentencia de la Gürtel.

Feijóo admitió ayer en una entrevista en Onda Cero falta de "pedagogía" y la necesidad de haber dado una explicación "más pormenorizada" y aunque mantienen el texto, se abrirían a modificaciones, algo a lo que no habrá lugar porque la enmienda será rechazada. "Esto es una propuesta que va a ser debatida en las Cámaras y que nosotros estamos dispuestos a ver las propuestas que se presenten -justificó ante Carlos Alsina-. Entendemos que hay que fortalecer al Estado dado que en este momento el Estado se queda sin ningún tipo de barrera para proteger la integridad de la nación española", explicó Feijóo para añadir que es discutible si antes se debe "suspender ese partido político y solo en casos muy agravados plantear la disolución".

"Retiro" con el comité de dirección

Por otro lado, el líder del PP se llevará a los miembros del comité de dirección a una especie de "retiro" de dos días y medio a Toledo, desde este jueves al sábado. Se trata de los catorce miembros del núcleo duro popular, que cuenta con cinco nuevos nombres, los de la portavoz en el Senado, Alicia García, y las vicesecretarias Paloma Martín, Esther Muñoz, Ana Alós y Noelia Núñez. La idea es "rearmar" al partido para el nuevo curso político, marcado por tres procesos electorales -gallegas, vascas y europeas-, la ley de Amnistía y la inestabilidad de un gobierno cogido con alfileres que este miércoles, a las primeras de cambio, ya está pasando por un vía crucis para sacar adelante sus decretos.

Además, los populares celebrarán reunión de su Interparlamentaria los días 20 y 21 en Orense, donde corren el riesgo de perder un diputado en las elecciones gallegas. La idea es coordinar los Grupos Parlamentarios de Congreso, Senado y la Eurocámara con "una clausura potente" el domingo por parte de Feijóo, que permanecerá allí dos días como parte de la precampaña popular.

No estará en cambio el líder popular este domingo en La Coruña conde el candidato a la Xunta, Alfonso Rueda, se rodeará de todos los barones y baronesas autonómicas bajo el lema "Construir España desde las Comunidades Autónomas". Tampoco acudió a la proclamación de Rueda como candidato "para poner todo el foco" en el aspirante. Precisamente ayer, los presidentes autonómicos populares defendieron la estrategia de no "salvar" los decretos de Pedro Sánchez. Expresaron su apoyo tanto durante la reunión de la ejecutiva popular como en el almuerzo posterior. En concreto, el andaluz Juan Manuel Moreno defendió que "nos asiste la razón", pero hizo un llamamiento a "ser más pedagógicos y ser capaces de ilusionar con nuestras propuestas a favor de la convivencia y el progreso", según ha podido saber El Independiente.