Allí donde los padres de la Constitución firmaron el borrador de la Carta Magna en 1978, Albert Rivera reúne a su Ejecutiva para discutir sobre Cataluña sólo días después de que el Parlament aprobara la ley de referéndum, tumbada en cuestión de horas por el TC. El Parador de Gredos se ha convertido este fin de semana en el lugar de retiro de Ciudadanos. Orgulloso del papel de sus diputados en la Cámara catalana, el líder de la formación mira al 1 de octubre con la confianza de que "no habrá referéndum, ni urnas, ni papeletas". Para que así sea, no descarta ninguna medida del Ejecutivo, al que ha ofrecido su "apoyo sin fisuras". Pero también espera algo del partido de gobierno: que apoye su moción de censura en Cataluña. En este momento, asegura, no hay que pensar "ni en siglas ni en colores", sólo en la unidad.

Pregunta.- ¿Cómo valora la semana que se ha vivido en el Parlament?

Respuesta.- Muy triste, la verdad es que ha sido un atropello a la democracia, pasar por encima de todas las reglas, pisar todas las líneas… Algunos sabíamos de lo que eran capaces los políticos separatistas, pero han pasado todas las líneas rojas. Pero igual que ha habido tristeza ha habido dignidad. Creo que Ciudadanos ha liderado la oposición junto con otros grupos, ha defendido las libertades, la Cámara, las instituciones políticas… Le hemos dado dignidad dentro del atropello. Creo que lo paradógico de todo esto es que los separatistas han acabado liquidando la autonomía de Cataluña que tanto se ha reivindicado históricamente por parte del separatismo.

P.- La actuación de Ciudadanos en el Parlament ha sido muy contundente. ¿Cómo se ha preparado ese pleno? ¿Qué instrucciones se ha dado a los diputados?

R.- Nosotros hablamos previamente con nuestros diputados, pero han tenido toda la autonomía del mundo para organizarlo porque son un grupo muy preparado, con una líder con la cabeza muy bien amueblada y muy fría para abordar ese debate y acompañada de un gran equipo. Yo me siento muy orgulloso de lo que han hecho los diputados de Ciudadanos y de otros grupos, porque no es momento de buscar matices ideológicos, hay que buscar la unión y creo que han hecho un gran trabajo.

P.- ¿Se ha dado una instrucción concreta?

Los separatistas han acabado liquidando la autonomía de Cataluña que tanto han reivindicado históricamente"

R.- Si te digo la verdad, no, no lo hemos hablado porque tenemos plena confianza en ellos. Son parlamentarios muy buenos que en muy poco tiempo han ganado mucha experiencia, porque como se ha visto, el parlamentarismo en Cataluña es duro. Lo que sí es verdad es que en la Mesa nosotros tenemos la vicepresidencia del Parlament y José María Espejo ha sido fundamental, pero no para el Parlament de Cataluña sino para España. Muchas cosas que han pasado en la Mesa las ha tenido que contar él, a Justicia, a los abogados del Estado o a quien pidiera explicaciones para hacer recursos o inhabilitar a los que se saltan la ley. Ha sido más importante tener un vicepresidente en la Cámara que estuviera vigilando, junto a los juristas y a los funcionarios. La sensación ha sido de una república bananera que creo que ha hecho mucho daño a la imagen del separatismo y del independentismo. Lo que se ha demostrado es que la idea de que todo el mundo en Cataluña es independentista no es verdad.

P.- ¿La moción de censura llega tarde? ¿Van a seguir adelante pese a la falta de apoyo?

R.- Bueno, estamos en ello, yo confío que salga adelante. El PP no ha decidido su posición, yo se lo pedí al presidente del Gobierno. Si el PP nos presta dos escaños va a salir adelante. Yo creo que esa moción es el último cartucho que tenemos dentro del Estatuto de Autonomía y dentro del reglamento, lo demás ya es todo Justicia y vía penal, pero políticamente creo que la moción de censura de los cuatro grupos que representan a la mayoría del pueblo de Cataluña, que la presenten juntos, que intenten buscar un resquicio de que algún diputado de JxS quiera respetar la ley, creo que es de dignidad y creo que no tiene que haber siglas ni colores. Es para convocar elecciones, no para hacer un programa electoral y yo creo que al final se va a conseguir. Le dije al señor Rajoy que yo le apoyo sin fisuras y sin condiciones, que estamos todos en el mismo barco, pero también creo que la unidad debe demostrarse en Cataluña, me parece que lo lógico es que nos apoyemos mutuamente sobre todo dos partidos que defienden lo mismo.

P.- ¿Le dijo Rajoy que iban a apoyar la moción de Ciudadanos en Cataluña?

R.- Eso es lo que nos dijeron, que lo iban hablar y lo iban a estudiar, que les parecía que era una vía a estudiar posible, y me consta que es así. A veces las cuestiones personales y partidistas empañan el interés general, pero yo creo que se va a producir. Ningún votante del PP o del PSOE entendería que el señor Albiol o el señor Iceta estuvieran en contra de echar al señor Puigdemont y convocar elecciones, porque es lo que quiere seguramente la mayoría catalana. Creo que aquí no hay siglas, no se trata de apoyar un programa de gobierno de Ciudadanos, se trata de hacer un pleno, de debatirlo y de intentar sumar y tratar que alguien del otro lado salte del barco. Algunos dicen que es imposible pero ya lo han hecho consellers y directores generales. Hay gente que es nacionalista pero que quiere que se cumpla la ley, y esa moción de censura puede dar sorpresas.

P.- Iceta ya le dijo el viernes a Arrimadas que no se sumaría a la moción. Si sale adelante esa moción con la ayuda del PP, ¿cree que el PSC cambiaría de postura?

R.- Yo estoy convencido de que sí por sentido común. El PSOE tiene que apoyar cualquier vía para defender la democracia y en este caso convocar elecciones. Ciudadanos es la primera fuerza política en Cataluña pero eso da igual, nuestros diputados el otro día aplaudieron a Coscubiela. Por tanto, vamos a dejar de pensar en escaños y de quién habla más o menos. Los catalanes que no son nacionalistas esperan unidad. El otro día yo planteaba la posibilidad de un manifiesto o un documento, de una imagen, en definitiva, de unidad de los partidos constitucionalistas. Me parece que ese tipo de cuestiones son importantes para que la ciudadanía perciba que hay unidad, que no hay fisuras, que hay seguridad y que vamos a cumplir la ley.

La sensación ha sido de una república bananera que creo que ha hecho mucho daño a la imagen del separatismo y del independentismo"

P.- ¿Qué va a suceder el 1 de octubre?

R.- Estoy convencido de que el error del 9-N no se va a repetir y de hecho ya hay un paso que ha cambiado. El 9-N, por lo que fuere, no se dejó actuar a la Fiscalía, se produjo sin que la Fiscalía hiciera nada y, como se vio después, habían cometido delitos, habían usado dinero público... Esta vez, el señor Maza salió a decir que iba a poner a la policía judicial a su servicio, que había que impedir el uso y la logística para el referéndum ilegal y el golpe a la democracia, así que yo confío en la Fiscalía, en los jueces, en la policía para garantizar esos derechos y libertades en Cataluña. Yo creo que ese es el cambio sustancial que se está produciendo. Le dije a Rajoy que nosotros le apoyábamos pero no para ver el bochorno del 9-N y espero que el gobierno haya tomado nota. Si quiere un pronóstico, yo creo que no va a haber un referéndum, no va a haber urnas, ni papeletas, ni censo. Seguro que alguien intenta montar follón y no acepta la democracia, pero los demócratas tenemos que hacerlo. Quien no respeta las reglas del juego no puede llamarse a sí mismo demócrata, eso es así. Quien no acepte las sentencias judiciales ni las leyes, ni la Constitución ni el Estatuto de Autonomía no es un demócrata.

P.- ¿Teme que haya desórdenes callejeros?

R.- Teniendo en cuenta que los de la CUP se han convertido en los jefes de este proceso, puede pasar de todo. La CUP es un partido antisistema, ayer estaban quemando los nombres de los miembros del Constitucional y además han hecho escraches y cosas agresivas muchas veces, así que no se puede descartar. Yo, desde luego, espero que no pase, sería tremendo. Es legítimo manifestarse un día, dos, y 24 días seguidos si quieren, lo que no es legítimo es agredir a otros, romper mobiliario público y en definitiva, no respetar las leyes. Si en Cataluña no hay referéndum y alguien intenta ir por la vía violenta, eso se va a impedir porque España es un país democrático y tiene instrumentos para impedirlo.

P.- Usted siempre ha dicho que el artículo 155 es el botón rojo, pero ya no descarta su aplicación. ¿Qué repercusión cree que tendría en su electorado?

Decirle a Puigdemont: 'No te preocupes que no vamos a utilizar todos los artículos vigentes' sería absurdo

R.- Creo que nuestros votantes en Cataluña y en toda España están al lado de la ley y de la democracia. Por tanto, igual que le hemos dicho al Gobierno que actúe y que impida el golpe a la democracia, no podemos decirle luego que no utilice los instrumentos para impedirlo. Tienen que ser proporcionales, obviamente, y paso a paso como estamos viendo. Se están dando pasos vía judicial y vía Tribunal Constitucional para impedirlo y en eso estoy de acuerdo en la estrategia que estamos trazando entre todos. Los demócratas no tenemos que tener complejos por cumplir la ley. El 155 es un artículo más de la Constitución como lo tiene Alemania y otras constituciones y eso no significa que lo tengas que usar siempre, de hecho es un artículo muy poco utilizado, pero decirle a Puigdemont: "No te preocupes que no vamos a utilizar todos los artículos vigentes" sería absurdo.

P.- ¿Qué hay que hacer a partir del 2 de octubre?

R.- En primer lugar habrá que ver si los políticos independentistas son demócratas, que se está viendo que no lo son, o si respetan los resultados de las sentencias y de la ley, porque me temo que van a intentar alterar todo lo que se pueda el orden constitucional, intentar que la gente pueda defender con sus ideas con normalidad… En definitiva, el 2 de octubre o más adelante, el 3 o el 4 hay que garantizar los derechos de todo el mundo y evitar las coacciones. Yo le voy a pedir al gobierno que el 2 de octubre no abandone, esto no es un capítulo esporádico, el Estado tiene que estar presente en Cataluña siempre.

P.- ¿Qué hay que hacer entonces?

Le dije a Pedro Sánchez que si quería modificar la Constitución y mejorarla, nosotros creemos en ello, pero desde la seriedad y con rigor y consenso"

R.- Primero ser conscientes de que hasta el último palmo de Cataluña es una parte de España y que los derechos y las libertades hay que garantizarlos. Después del 1 de octubre es previsible, ya lo ha dicho ERC y Puigdemont, que se echen a las calles. Si es sólo manifestarse a mí no me preocupa, el problema es que vaya a más, y eso es lo que tiene que proteger el Gobierno. A partir de ahora lo que quiero es que PP y PSOE entiendan que con los nacionalistas y con los separatistas no hay que pactar y darles siempre lo que quieren, lo que hay que hacer es hacer respetar la ley y tener un proyecto de país. Y a partir de ahí, futuro. España tendrá que hablar no por lo que ha pasado en Cataluña, sino en general, qué proyecto de futuro queremos, si queremos reformar la Constitución y qué artículos, qué proyecto territorial queremos… Eso hay tiempo de debatirlo. Me parece impropio que en medio de todo esto venga el PSOE con una subcomisión sobre Cataluña… ¿De verdad cree que Puigdemont o Junqueras van a dejar de hacer lo que están haciendo por una subcomisión de estudios en el Congreso? Hay que hacerlo después del 1-O y no sobre Cataluña sino sobre toda España, porque si hacemos una comisión sobre Cataluña, mañana será la comisión País Vasco, y pasado la comisión Galicia, al otro Andalucía y según el candidato del PSOE la comisión 'Madrid nación' también. A este paso va a haber más comisiones que diputados. No se trata de hacer ideas felices sino de tener un proyecto de país. Le dije a Pedro Sánchez que si quería modificar la Constitución, mejorarla y reforzarla, nosotros creemos en ello, pero desde la seriedad y con rigor y consenso. Necesitamos también al Partido Popular, es el primer partido de la Cámara y hay que escucharle. 

P.- ¿Se va a recuperar Cataluña de la fractura social?

R.- Para ser sinceros, lo peor que ha pasado en Cataluña es la fractura social que ha creado para años. Y esa es la principal labor que tenemos si hay elecciones, gobernamos en Cataluña y echamos a Puigdemont. Esto lo he hablado con Inés [Arrimadas] personalmente y se lo he dicho: "Tu principal labor va a ser coser y reconstruir puentes", no con el resto de España sino entre los catalanes primero, porque se han roto entre catalanes. Y eso va a tardar tiempo porque las heridas tardan en cerrarse, pero estoy convencido de que esa es la única línea.

P.- ¿Y es posible?

R.- Yo creo que se puede. Hacen falta ganas de ganar y de jugar el partido. El PP y el PSC parece que han tirado la toalla y dan por hecho que siempre tienen que ganar los nacionalistas, y yo no lo creo. Creo que se les puede ganar. Pero hay que creérselo, salir a ganar y sobre todo ser generoso, no se puede ir poniendo trabas. Yo estoy dispuesto a sentarme con el PP, con el PSOE e incluso con Podemos para formar un gobierno alternativo en Cataluña, y me consta que Inés lo está haciendo ya para intentar coser una mayoría alternativa, pero hay que creer en ella y hay que aceptar que alguien la tiene que liderar, y lo lógico es que lo haga quien más votos tiene, pero eso es lo de menos, lo importante ahora es construir ese futuro y que los catalanes vean que esto no es una plaga bíblica.