Los populares madrileños desoyeron la orden de Génova de aceptar la comisión de investigación que proponía Ciudadanos en la Asamblea autonómica para ganar tiempo. El objetivo era impedir lo que se produjo poco después, esto es, el ultimátum de la formación de Albert Rivera reclamando la cabeza de Cristina Cifuentes. Eso explica que la dirección nacional tomara las riendas de la negociación en un intento por evitar perder el Gobierno de Madrid. Pero la interlocución del coordinador general del PP, Fernando Martínez Maillo, con el secretario general de Cs, José Manuel Villegas, no sirvió de nada.

Desde Génova se dijo a la organización madrileña que primero aceptara la constitución de la comisión "y luego ya hicieran sus propias propuestas de comparecencias", según fuentes de la dirección del PP. Porque, precisamente, lo que hizo Ciudadanos fue vetar los nombres que pusieron los populares sobre la mesa -entre ellos el del líder del PSOE, Pedro Sánchez, el portavoz de los socialistas en la Asamblea, Ángel Gabilondo, y el del profesor filtrador- por considerar que su objetivo no era otro que desvirtuar el objetivo de la comisión. No obstante, el PP de Madrid niega la mayor y afirma que Cs nunca tuvo voluntad de que esa comisión saliera adelante.

A Casado se le aconsejó que hiciera "todo lo contrario que Cifuentes"

Luego, cuando salió el caso del vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado, que había cursado el mismo máster de la Universidad Rey Juan Carlos, "le dijimos que hiciera justo lo contrario de lo que hizo Cifuentes", esto es, mostrar todos y cada uno de sus trabajos, comprobantes, actas... De hecho, creen en Génova que se ha dado cumplida respuesta a las sombras de sospecha que se pretendían extender sobre éste.

No es previsible que esta crisis se solvente antes del 2 de Mayo, fiesta de la Comunidad de Madrid, cuando la presidenta convoca un multitudinario acto en la Puerta del Sol, sede del Gobierno autonómico, aunque admiten dos cosas, esto es, que "llegará el momento en que haya que tomar una decisión" y que "lo que queremos es que pase algo por lo que Cifuentes se pueda quedar". Pero no parece que vaya a ser  intención de Mariano Rajoy, llegado el caso, pedirle que dimita. Es, por otro lado, la estrategia habitual del líder del PP, que las renuncias sean voluntarias "por el bien del partido".

Génova no cree que la crisis se solvente antes del 2 de mayo, Día de la Comunidad

No oculta la existencia de dos almas, una, que la representa María Dolores de Cospedal, -tal y como informó El Independiente- de "resistir" para que Ciudadanos no se cobre otra cabeza y otros, que piensan que perder el gobierno regional puede ser muy dañino para los intereses electorales del PP. Por un lado, señalan que el socialista Ángel Gabilondo "no es un rojo peligroso", por lo que el discurso de la izquierda radical no les sirve aunque se aferran a que "no se ha perdido el miedo a Podemos", cuyos votos son indispensables para que la moción de censura prospere.

En definitiva, que si se deja que prospere la moción de censura "tendremos el discurso, pero no el Gobierno", al tiempo que apelan al ejemplo de Murcia donde, tras dejar caer a Pedro Antonio Sánchez "las cosas van bien y sus sustituto, López Miras, se está consolidando".

El PP pone como ejemplo Murcia donde "las cosas van bien" tras dejar caer a Sánchez

Entonces se consultó con los letrados de la cámara de Murcia para saber hasta qué momento se podía aguantar con la moción de censura en marcha antes de la retira de Sánchez. Se les dijo que incluso una vez pasada la primera votación en caso de que ésta no alcanzara la mayoría absoluta y hubiera que ir a una segunda. No es el caso de Madrid. Socialistas, Podemos y Ciudadanos suman 81 diputados de la cámara autonómica, 16 por encima de la mayoría absoluta. Es decir, no se necesitaría ir a una segunda votación salvo que en la primera Cs se abstuviera en la primera.

"Siempre sale el sol"

No pasan las relaciones entre el PP y ciudadanos por la mejor de las momentos. El coordinador general del  PP, Fernando Martínez Maillo, se ha despachado este sábado contra el partido de Albert Rivera durante un acto celebrado en Zamora en presencia de Mariano Rajoy. "Hay algunos que no tienen reputación porque nunca han hecho nada", ha sido algunas de las "perlas" que les ha dedicado tras reprocharles su apoyo al partido que tiene a dos ex presidentes, José Antonio Griñán y Manuel Chaves, sentados en el banquillo. Pero, a pesar de los nubarrones "se van a despejar más pronto que tarde porque siempre sale el  sol y va a brillar a nuestro favor".

Rajoy elude pronunciarse sobre el asunto Cifuentes

Rajoy, en cambio, ha optado por eludir en todo momento no sólo el tema Cifuentes sino, también, el asunto catalán. Lo más parecido a un "recado" al resto de los partidos ha sido cuando ha comentado que "aquí seguimos con nuestras cosas. Los demás no tienen ningún defecto pero a nosotros no nos ha tocado esa fortuna. Hablan mucho pero hacen poco", para agregar que los españoless siempre confían en el PP "en los momentos de dificultad" y continuarán "defendiendo posiciones".

En un acto sobre reto demográfico y despoblación ha anunciado que se incorporará, vía enmienda a los Presupuestos Generales del Estado, la duplicación de la tarifa plana para emprendedores de municipios de menos de 5.000 habitantes, además de una nueva línea de ayudas para jóvenes de localidades de escasa población por 100 millones de euros. Todo ello si se aprueban los Presupuestos frente a la "politiquería sectaria" de los partidos que no quieren apoyar las cuentas.