El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, deberá comparecer en el Congreso de los Diputados en un monográfico sobre la presunta corrupción que rodea al PSOE. Así lo ha decidido la Junta de Portavoces de la Cámara Baja en su última reunión de este martes. El asunto ya trajo cola la semana pasada, con diversos choques con la presidenta del Congreso, Francina Armengol, y el PP. En la Junta, pero también en el pleno posterior de la tarde. Los populares, que venían reclamando esa comparecencia desde semanas atrás por cuestiones como la de Leire Díez y su papel dentro del PSOE, encontraron el martes pasado el respaldo del resto de partidos del Congreso.

Los socios de Sánchez quieren explicaciones lo antes posible. No les basta con las dos comparecencias desde Ferraz realizadas hasta la fecha. Y aseguran que "ya se va tarde". El asunto principal de esa comparecencia será el caso de Santos Cerdán, el ya exsecretario de Organización del PSOE, que tras el último informe de la Unidad Central Operativa (UCO) que salpicó a Cerdán, dejan preguntas en el aire como por ejemplo si Sánchez sabía de esas prácticas irregulares junto a José Luis Ábalos y Koldo García, como la obtención de mordidas por adjudicaciones de obras públicas. También si cabe esperar que trascienda una posible financiación ilegal del partido o si puede haber más afectados dentro del PSOE.

La semana pasada se acordó fijar el 9 de julio como fecha extraordinaria, ya fuera del periodo de sesiones [se cierra esta semana]. Los socialistas apuntaron que la agenda internacional de Sánchez impedía cualquier comparecencia previa. Por la cumbre de la OTAN en La Haya esta semana, el Consejo Europeo en Bruselas, o por la Conferencia Internacional sobre Financiación del Desarrollo de Sevilla entre el 30 de junio y el 3 de julio. Se acordó que Sánchez incluyera el tema de la corrupción dentro de la comparecencia correspondiente a abordar las conclusiones de estos actos, algo que rechazaron todos los socios.

Ante la presión del PP o de esos socios, como Sumar, ERC o Podemos, Sánchez ha cedido y abordará exclusivamente esas presuntas corruptelas en el entorno de su partido con Cerdán y Ábalos en el objetivo. La forma de proceder estimada será, centrar una comparecencia inicial en ese asunto desde las nueve de la mañana, con tiempo ilimitado para el presidente y varios turnos de réplica y contrarréplica de los grupos parlamentarios. Era una demanda de todos. Posteriormente, se realizará una segunda comparecencia independiente, que tratará ya sí esa agenda internacional.

Habrá pleno extraordinario el 22 de julio

Además de este acuerdo, se ha fijado el 22 de julio como fecha hábil para otro pleno extraordinario en el que se quieren llevar cuestiones como el decreto con medidas para fortalecer el sistema eléctrico tras el apagón. Este texto será aprobado en el Consejo de Ministros de este martes. También se llevará el aprobado la semana pasada sobre la entrega a cuenta a las comunidades autónomas y ayuntamientos.

Sumar ya venía trasladando a El Independiente que el proyecto de ley para la reducción de la jornada laboral sería llevado en próximas fechas al Congreso. Se prevé que pueda ir esa medida estrella de Yolanda Díaz, aunque no hay capacidad de sacarlo adelante ante la enmienda a la totalidad de Junts, con quien no se ha alcanzado ningún acuerdo. Otra de las cuestiones que podrían incluirse esa jornada son las enmiendas a la totalidad presentadas por PP y Vox a la reforma del Reglamento del Congreso para poner coto, entre otras cuestiones, a los pseudomedios.