Éramos doce y parió la abuela. George F. Will le enfiló los cañones a Donald Trump. Esto sucedió en medio de los disturbios por la muerte de George Floyd, de la pandemia por el coronavirus y de la súbita y astronómica cifra de desempleados. Will pidió, incluso, que se castigara electoralmente a los senadores republicanos eliminando su control de la Cámara Alta. 

Para poder acceder a este y otros contenidos debes de ser suscriptor.

Opciones de suscripción

¿Todavía no estás seguro? Consulta aquí todas las ventajas de suscribirte a El Independiente.

¿Ya eres usuario Premium?

Identifícate