El vicepresidente de Castilla y León, Francisco Igea, ha descartado este jueves que Ciudadanos vaya a apoyar la moción de censura con la que amenaza el PSOE para desalojar a Alfonso Fernández Mañueco (PP) de la presidencia de la región. En rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el también portavoz del ejecutivo castellanoleonés ha acusado al PSOE de "ir con la chequera" y ha asegurado que "en Ciudadanos no hay ningún Tamayo", en relación al transfuguismo de dos parlamentarios socialistas que impidió que en 2003 Rafael Simancas gobernase la Comunidad de Madrid.

En los últimos días, desde el PSOE regional y nacional se ha defendido públicamente la idea de una moción de censura contra el Ejecutivo en Castilla y León, donde gobiernan en coalición PP y Ciudadanos. Los socialistas defienden la necesidad de desalojar a Mañueco por "el grado de deterioro político" que "es insostenible" en la región, según aseguró el portavoz del PSOE en el Senado, Ander Gil. A su juicio, el barón popular está "enfrentado con todo el mundo", y en particular a "empresarios, sindicatos, sanitarios, funcionarios e, incluso, con los obispos", aseveró. "Presentaremos la moción de censura si es para ganarla. Y la ganaremos" defendió.

Por su parte, el secretario regional del PSOE, Luis Tudanca, ha aseverado que ya se han producido "contactos" con la formación naranja para tal cometido, aunque ha evitado dar más detalles. Para que una moción de censura saliese adelante en Castilla y León, los socialistas necesitarían que al menos cuatro de los 12 diputados de Ciudadanos en la región apoyasen la iniciativa.

Tanto Inés Arrimadas como Francisco Igea, en el pasado enfrentados a nivel interno por el rumbo de la formación liberal, han descartado públicamente esa posibilidad. De hecho, la presidenta de Ciudadanos ha confirmado este jueves que se verá próximamente con Alfonso Fernández Mañueco en el marco de las reuniones que está manteniendo la dirigente liberal con otros presidentes autonómicos con los que su formación ha llegado a acuerdos, ya sea dentro del gobierno o en la oposición. La segunda lectura de este encuentro es el de tratar de acallar los "rumores sin fundamento" de ruptura de PP y Cs en Castilla y León, un fantasma que en su día también planeo sobre el ejecutivo de la Comunidad de Madrid.