Ha sido una experiencia más breve de lo deseada y seguramente más intenso y dolosa de lo que esperaba. Cristina Ibarrola sabía que cuando dio el paso de aceptar ser la candidata a la alcaldía de la capital navarra se metía en un avispero delicado. Ha ocupado la alcaldía apenas seis meses. En ellos la oposición ha intentado bloquearle, le ha impedido sacar unos presupuestos y ha construido un discurso de paralización en el que justifica la moción de censura que formalizarán Bildu, PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin este jueves. Asegura que lo que más le duele no es que Asiron ocupe la alcaldía, sino que lo haga gracias a la "traición" del PSN con la sociedad navarra y pamplonesa.

En lo personal, no olvida que se ha levantado un mensaje de odio, rechazo e insulto hacia su persona en todo este tiempo. Incluso con una campaña de desprestigio "machista" hacia ella y ante la que aún espera una disculpa de quien será su sucesor. Un mal trago que reconoce que mitiga con el apoyo creciente que percibe en las calles entre quienes le votaron y muchos que no lo hicieron.

Lamenta que la moción de censura suponga el final de un proceso que estaba escrito desde hace meses por quienes "no han dudado en vender el alma a q1uien haga falta" con tal de mantener "los sillones".

Afirma que se va de la alcaldía con la cabeza alta y orgullosa de la labor realizada y dispuesta a seguir trabajando por un cambio en la política. No oculta que la salida del Consistorio el día 28 será complicada y tensa, pero con la conciencia tranquila: "A pesar de lo difícil y lo complicado, el acoso y derribo y el linchamiento en lo personal y profesional que han intentado conmigo, me voy supertranquila y orgullosa y con la sensación de un apoyo tremendo, mucho más que el que tenía hace seis meses".

Pregunta.- Lleva apenas seis meses en el cargo y tendrá que abandonarlo de modo abrupto el próximo jueves. ¿Cómo están siendo estos días?

Respuesta.- Tengo sensaciones muy encontradas. A nivel personal estoy tranquila y serena, muy orgullosa del trabajo intensísimo realizado. Pese a que nos acusan de parálisis, no hemos parado de trabajar. Han salido montones de trabajos con un muy bien equipo. Tengo la conciencia muy, muy tranquila de haber dicho siempre a verdad y haber trabajado cada minuto por el bienestar de los ciudadanos de Pamplona y mejorar la ciudad. Pero también estoy revuelta. Conmigo llevaba mucha gente que había creído en el proyecto, gente brillante que había dejado empresas privadas para venir aquí, que ha dado la cara y que ha trabajado mucho. Eso pesa.

P.- Usted sabía que la amenaza de una moción de censura la tuvo desde el primer minuto.

R.- Sí, desde la campaña electoral sabía que esto estaba en el aire. Pero objetivar que son capaces de hacer lo que han hecho, que todo estaba escrito y que han vendido Pamplona y a los pamploneses en un despacho en Madrid sólo por mantener en sillones a Pedro Sánchez, María Chivite o Elma Sainz como ministra, es difícil. Se me revuelve el estómago tanto… Yo sería tan incapaz de hacer algo así. Estoy en política por convicción de mejorar la vida de la gente y por prestigiar la política que me molestaba cuando la gente se desapegaba. Entiendo que la gente se desapegue de la política. El PSOE, tanto a nivel nacional, como en Navarra y Pamplona, representa la deslegitimación de la política. Es gente sin escrúpulos, sin principios, sin ética ni moral y que sólo busca el sillón de ellos y sus amigos. Me parece dramático.

P.- Cuando regresa a casa tras un día de trabajo en el ayuntamiento, sabiendo que serán los últimos, ¿cuál es el sentimiento que le aflora? ¿Rabia, tristeza, impotencia?

R.- La palabra que más me viene a la cabeza es miserable, política miserable. Hay que tener dignidad en política. Si han decidido vender Pamplona para sus intereses personales y venderla a EH Bildu para su construcción nacional, que nada tiene que ver con los intereses de la mayoría de los pamploneses, lo que tendrían que haber hecho es votar a Joseba Asiron el 17 de junio. Debían haber asumido que podía pasarles factura y perder la presidencia del Gobierno de España, del Gobierno de Navarra o que alguna persona siguiera como concejal y no como ministra. Estoy muy serena y tranquila. Hasta el día 27 por la tarde, trabajaré. El día 28 vendré con la cabeza altísima, como lo hice el día 17 de junio.

P.- ¿Cuándo fue realmente consciente de que se presentaría, de que su tiempo había terminado y la operación para derrocarla se ejecutaría?

R.- Cuando Elma Saiz se fue como ministra. Esa mañana lo visualicé. Yo pensaba que lo iban a hacer después de los presupuestos no aprobados. Estaban perdiendo el relato tanto que lo adelantaron. Ni soy autoritaria como dicen, ofrezco proyectos a los socialistas constantemente y se escapan o les citaba y no venían. Dicen que no dialogo y se sabe que no es así. Lo mismo con la acusación de que no escucho. Nunca había trabajado un ayuntamiento tanto en seis meses. Nunca se había escuchado a los que piensan igual y diferente tanto como en estos seis meses. Lo digo orgullosa. Se asustaron porque la calle estaba ganada. Cada día teníamos más apoyos. La gente estaba contenta con un montón de actos que hemos hecho. La ciudad estaba más viva, más bonita. Y con un montón de proyectos relevantes. Estaban asustados porque perdieron el relato y la calle. Por eso lo han tenido que adelantar. Si la ciudad estaba paralizada, como dice Pedro Sánchez, ¿cómo justifican no haber hecho alcalde a Joseba Asiron el 17 de junio? No tienen justificación.

Han generado odio para que me insulten y me agredan en la calle. No llevaré escolta, le hago responsable a Asiron de lo que pueda suceder"

P.- ¿Qué le duele más, que EH Bildu ocupe la alcaldía o que lo haga gracias al apoyo del PSN? ¿Lo siente como una traición, un engaño?

R.- Me duele la traición del PSN vendiendo Pamplona. No por el hecho de que me quiten la alcaldía sino porque han roto las relaciones de dos partidos que han construido esta tierra, que han hecho progresar Navarra y Pamplona. Ahora han provocado que las relaciones políticas de UPN y el PSN estén rotas. Eso es malo para el futuro de Navarra y muy malo para el futuro de Pamplona. Entregar así a EH Bildu la capital de Navarra para la construcción de su proyecto nacional de Euskal Herria me pone los pelos de punta. Tenemos modelos de convivencia, de ciudad y de sociedad tan diferentes. La moción de censura sólo habla de euskera, de víctimas de ETA y de no insultarnos y agredirnos en la calle Curia. Están reconociendo que era Bildu el que nos insulta y nos agredía en la calle Curia. No hay modelo de ciudad. Sacan a una víctima del terrorismo de ETA, concejal del ayuntamiento, María Caballero para meter a la persona que no condenó nunca el asesinato de Tomás Caballero siendo concejal como él y que está condenado por agresión a dos mujeres. Sacamos a una víctima para meter a un cómplice de los verdugos. Me parece tremendo. Tremendo.

Ayuntamiento de Pamplona.

P.- ¿Ha hablado con Joseba Asiron?

R.- No, no tengo ningún interés. En seis meses no ha venido apenas al ayuntamiento, a los plenos y apenas ha hablado. Se ha dedicado a que otros orquestaran este relato de mentiras para justificar todo esto. Lo han hecho con una bajeza moral tremenda. Si ya sabía que iba a ser alcalde no sé qué necesidad tenía de mentir y hacer de la difamación machistas su única arma política para intentar desacreditarme a nivel personal. Que no se lleve las manos a la cabeza del odio que ha generado en sus acólitos para que luego me insulten y me agredan por la calle. Yo no voy a llevar escolta pero le hago responsable directamente. Esa bajeza moral…

P.- Cuando le acusa de machista a Asiron, ¿se refiere a las acusaciones sobre la presunta compra con dinero público de joyas y bolsos de lujo con fondos públicos que hizo…

R.- Sí, sabían que era mentira pero me acusaron.

P.- Ese odio que asegura que se ha sembrado desde el primer momento, ¿persiste aún hoy?

R.- Sí, nos tenían odio antes de empezar. En redes sociales hay mucho. También en la calle. A mí no me habían gritado apenas, pero estos días ya llevo varios episodios de sus amigos. Tendré más. Estoy segura de que la salida del día 28 no será fácil. La plaza estaba reservada ya con antelación por una persona condenada por pertenencia a ETA. Estos son los amigos de Asiron, a los que el PSN ha entregado Pamplona para mantenerse en el sillón. La plaza del Ayuntamiento la seguirán utilizando políticamente, lo han hecho toda la vida.

P.- ¿Qué es lo que más le ha dolido?

R.- Lo más miserable que he visto es tener que escuchar al portavoz del PSN en el Parlamento de Navarra decir que se sienten amenazados y amedrentados por UPN igual que cuando ETA mataba. Me parece tal bajeza moral a la que está llegando el PSN… No puede ser que el PSN se marque líneas rojas como no pactar con Bildu, no aprobar una ley de amnistía , no entregar el ayuntamiento de Pamplona y que se las salten todas y además nos quieran convencer de que es lo mejor. Menos aún que nos nieguen el derecho a decir que eso está mal. UPN, como otros partidos de centro derecha moderado y muchos socialistas y dirigentes de otros tiempos, no puede compartir esto.

P.- ¿Hay votantes y antiguos cargos del PSN que le han trasladado su incomodidad o desacuerdo con lo que se está haciendo?

Que el PSN entregue así Pamplona a Bildu para su proyecto nacional de Euskal Herria me pone los pelos de punta"

R.- Votantes, sí. Cargos actuales, no. No pueden. Están callados. Me voy tranquila. Siempre he dicho la verdad y eso da mucha paz. Cargos del PSN, como la presidenta del Gobierno, está callada, la ministra Elma Saiz está callada. Y para una rueda de prensa que da Chivite, es sin preguntas. Yo no tengo miedo a ninguna pregunta. Voy a contestar siempre lo mismo. Da mucha paz decir la verdad. No lo pueden hacer ellos, por eso no hablan.

P.- ¿Cómo van a hacer el traspaso? Dice que no se han puesto en contacto…

R.- Bueno, sí me llamó, pero no le cogí el teléfono y me ha mandado un par de whatssap. Ahora quiere una transición ordenada pensando en la ciudad. Yo le digo que no ha pensado en la ciudad en ningún momento. Dejo todos los expedientes impolutos. Que venga y los busque. Está toda la documentación, pero no tengo ningún interés en sentarme con él. Antes de sentarse conmigo y mirarme a la cara debería reconocer que todas las difamaciones que ha hecho sobre mí son mentira. Y a partir de ahí, empezamos a hablar.

P.- ¿De esas difamaciones ha recibido alguna disculpa?

R.- No. Siguen retroalimentándolas, pese a que son mentira. No pueden mantener una mentira todos los días. Pamplona no estaba paralizada. Se queda mucho mejor que la que recibimos y mucho mejor de lo que lo dejó él en 2019. Es curioso que el PSN y el PNV no quieran para el País Vasco lo que nos hacen comernos en Pamplona. Entregan a EH Bildu Pamplona mientras dicen que en el País Vasco con EH Bildu es retroceso, sectarismo e imposición. Claro que lo es, pero tanto en el País Vasco como en Pamplona.

P.- ¿Cómo interpreta que el PSN facilite la moción de censura pero se descarte para integrase en el Gobierno municipal?

R.- No se puede sorber y soplar a la vez. La traición que van a hacer los cinco concejales votando lo que les han ordenado desde Madrid, por intereses de sillones, quedará en su conciencia de por vida. Estoy deseando verles la cara cuando votan y que en su conciencia quede que han sido los ejecutores de esta traición a Pamplona. No lo voy a olvidar yo ni los pamploneses y pamplonesas.

P.- EH Bildu ya ha organizado un acto de apoyo a Asiron para el día 28 frente al ayuntamiento. ¿Su partido tiene previsto alguno para respaldarle a usted y a su equipo?

R.- Yo me siento superarropada. El 17 de diciembre 12.000 personas nos estuvieron apoyando a nosotros y a una forma de hacer política. Estamos ante dos modelos diferentes de hacer política. La que piensa en las personas, en los proyectos y la de quien la deslegitima con mentiras sin ponerse colorado y vendiendo el alma a quien haga falta, ese es el PSOE de Pedro Sánchez. Ya se han preocupado de que la plaza estuviera con una concentración de los acólitos de lo que antes era ETA y amigos de EH Bildu. La plaza ya está ocupada, pero yo ya sé que cuento con el apoyo de mi partido y mucha gente. Ese apoyo lo noto cuando voy por la calle.

P.- ¿Le preocupa que esta moción de censura polarice aún más el clima social en Navarra en general y en Pamplona en particular?

R.- Se está polarizando ya tanto que no sé… El PSN ha mentido tanto. Navarra era una comunidad envidiada en Educación, Sanidad, en política fiscal, en empleo y los socialistas se la han cargado. Los navarros y pamploneses no van a olvidar lo que el PSN ha hecho. Además, está haciendo las políticas de Bildu, con lo cual las opciones que van a quedar serán UPN o Bildu. Es lo que ha pasado en el norte de Navarra en los últimos años. Ahora pasará en Pamplona y Navarra, habrá dos modelos absolutamente antagónicos porque el PSN se ha quedado sin modelo político en Navarra y Pamplona, hace lo que le obliga Bildu. Pone el sillón y todo lo demás lo marcan los afines a Bildu.

Estoy deseando verles la cara cuando voten, serán los ejecutores una traición que no voy a olvidar ni yo ni Pamplona"

P.- El ministro de Transportes, Óscar Puente, se felicitó por acordar con Bildu, un partido “democrático y progresista”, dijo.

R.- Es ofensivo para los que estamos aquí. Tenemos aguantar cómo te insultan, cómo jalean, cómo muchos compañeros en muchas localidades navarras siguen teniendo miedo y no se pueden presentar a ninguna candidatura. El otro día se me acercó una chica de Lekunberri llorando, dándome su apoyo y diciéndome que a su hijo de 15 años le amedrentaban, que a su padre le habían rayado el coche. Hablamos de ahora, no de hace 15 años. ETA ya no mata pero sigue amedrentando y amenazando. Lo sigue haciendo el entorno de Bildu.

P.- Una vez que tenga que abandonar la alcaldía. ¿Qué va a hacer? ¿Seguirá liderando la oposición en Pamplona?

R.- Sí, seguiré trabajando. Son días complicados. No estoy pensando en mi futuro personal. Hice una apuesta por Pamplona y seguiré trabajando para que tengan menos influencia partidos como EH Bildu, que representan el modelo de sociedad antagónico al mío. Este momento me motiva, aunque ha sido un año agotador y sí necesito un poco de distancia.

P.- Si regresáramos al día en el que su partido le planteó ser la candidata a la alcaldía, ¿hasta qué punto diría que ha merecido la pena?

R.- Rotundamente sí. En mi trayectoria he tenido muchas responsabilidades que me han apasionado pero el orgullo de ser alcaldesa de Pamplona no se puede describir, a pesar de lo difícil y lo complicado, el acoso y derribo y el linchamiento en lo personal y profesional que han intentado conmigo. Me voy supertranquila y orgullosa y con la sensación de un apoyo tremendo, mucho más que hace seis meses, de mucha gente que me ha votado y los que no pero que han visto otra forma de hacer política. Nunca este despacho había estado tan abierto a asociaciones y ciudadanos. Me voy muy tranquila y con un orgullo y honor tremendo de haber sido alcaldesa de mi ciudad. Ha habido momentos inolvidables.     

P.- ¿Qué aprendizaje e va a llevar?

R.- Ha sido un máster en política, en recursos humanos y en todo. Me quedo con lo positivo. Me parece muy importante seguir trabajando por lo que creo. Ante lo que estamos viendo, es más necesario que nunca que personas válidas trabajen por prestigiar la política y que los ciudadanos sientan que tienen políticos en los que pueden confiar.