Conquistada la investidura, diseñado —y rediseñado un mes después— el Gobierno, adoptadas las primeras decisiones, Pedro Sánchez se dispone a dar el siguiente paso. Primero, poner a punto el PSOE para el siguiente ciclo electoral, que arranca este 18 de febrero con las autonómicas en Galicia, y que seguirá en primavera, probablemente en abril, con las vascas y continuará el 9 de junio con las europeas. Pero no solo. El secretario general y presidente del Gobierno quiere, también, relanzar el proyecto socialista, recuperar la iniciativa, actualizar su estrategia, dar orientaciones a sus cargos autonómicos y locales. Rearmar al partido, a la postre. Y tiene pendiente asimismo reajustar mínimamente su cúpula en Ferraz tras haber completado los cambios en el Ejecutivo. Objetivos todos ellos que sustentarán la convención política que el PSOE celebrará este fin de semana, del 19 al 21 de enero, y no en Madrid sino en A Coruña, para arropar —otro propósito más e ineludible— a su candidato en Galicia, José Ramón Gómez Besteiro. Será la primera conferencia ideológica del PSOE en más de una década, ya que la última programada, en noviembre de 2015, tuvo que ser suspendida por los atentados yihadistas en París.

El cónclave, una especie de estación intermedia entre el último congreso federal, el número 40 —el que tuvo lugar en octubre de 2021 en Valencia—, y el próximo, el 41 —aún sin fecha, pero que podrá convocarse desde este otoño de 2024—, llega en un momento clave para el partido. Justo tras reconquistar la Moncloa, en los primeros compases de una legislatura que se prevé durísima y difícil, en la que Sánchez deberá mantener atado el apoyo de todos y cada uno de sus socios —y todos muy diversos: ERC, Junts, EH Bildu, PNV, BNG, Podemos y Coalición Canaria— todo el tiempo. Justo cuando el PSOE tiene que empezar a reconstruirse internamente tras sufrir el brutal golpe de las elecciones autonómicas y municipales del pasado 28 de mayo, que le dejó desprovisto de casi todo su poder territorial. En la dirección defienden que la formación política que "lea mejor y antes la realidad" estará "mejor preparado" para afrontar el siguiente ciclo. De ahí que entienda que le toca "aterrizar, orientar" las políticas socialistas y mirando a la vez a Europa, porque el partido que se jugará allí el 9 de junio será decisivo para el futuro del país y de los Veintisiete.

Zapatero ejerció de 'coach' del PSOE en la campaña del 23-J, fue protagonista con Sánchez y después volvió a salir al rescate del presidente al defender la ley de amnistía

Todos esos ingredientes confluirán en una convención, pues, que se abrirá el viernes 19 por la tarde. Y quien ejercerá de telonero es José Luis Rodríguez Zapatero. El expresidente se ha convertido en un dirigente imprescindible para Sánchez. Apostó por Susana Díaz en las primarias de 2017, pero cuando las urnas declararon vencedor a su rival, se alineó de inmediato con el secretario general renacido, y desde entonces se ha convertido en un sostén clave. En una persona al que el presidente escucha y al que consulta, en un báculo que le "ayuda" en los momentos más difíciles.

Pero su papel quedó reforzado en la campaña del 28-M y, sobre todo, en la de las generales, cuando ejerció de coach, cuando luchó para levantar el ánimo de un partido derruido emocionalmente tras perder su poder territorial. Defendió al PSOE y al Gobierno, sacó pecho de las políticas del Ejecutivo, se hizo protagonista de un viaje hacia el 23-J en el que solo él y el propio candidato Sánchez quedaban iluminados. Y después, ya tras las urnas, cuando se multiplicaban las voces de la vieja guardia socialista contra la amnistía, él apostó por ella, por ser una medida plenamente constitucional que podía cerrar el conflicto político en Cataluña. Zapatero ejercía de vanguardia, salía al rescate de Sánchez cuando de sus labios, ni de los de su equipo, ni salía esa palabra, la amnistía.

El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero, durante el acto de celebración del nuevo Gobierno socialista, el pasado 26 de noviembre de 2023 en Ifema, Madrid. EUROPA PRESS / JESÚS HELLÍN

El expresidente intervendrá tras una breve apertura, a cargo de la anfitriona de la convención, Inés Rey, alcaldesa de A Coruña; de la presidenta del grupo de los Socialistas & Demócratas (S&D) del Parlamento Europeo, Iratxe García, y del secretario de Organización, Santos Cerdán. Zapatero disertará sobre Democracias más fuertes con la eurodiputada Eider Gardiazábal y nieta del histórico Ramón Rubial, presidente del PSOE desde 1976 hasta su muerte, en 1999.

Al cónclave acudirán más de 1.500 personas, 1.200 de ellas, delegados, bajo el doble lema 'Impulso de país' y 'España avanza' y marcará las líneas de la actual legislatura

Arrancará así una convención que acogerá a más de 1.500 personas —1.200 de ellas, delegados elegidos por las federaciones, y el resto, invitados— en el Palacio de Exposiciones y Congresos (Palexco) de A Coruña, bajo el lema Impulso de país, que se combinará con el que el partido usa desde la investidura, España avanza. El cónclave servirá para discutir y aprobar un documento que servirá de "línea de trabajo de la legislatura". Texto que, indicaban este lunes fuentes de Ferraz, no solo bebe del programa electoral del 23-J, del programa de la coalición con Sumar y del discurso de investidura de Sánchez, sino que se ha enriquecido con las aportaciones de la sociedad civil, de "asociaciones, sindicatos, Tercer Sector...". Un proceso de "interacción con la realidad" que es de ida y vuelta, sostienen en la dirección, porque tras la cita de este fin de semana volverá a exponerse a esos agentes sociales para presentarles las conclusiones.

A la altura de la 'Declaración de Granada' de 2013

En Ferraz equiparan la importancia de la resolución final que se apruebe con la Declaración de Granada de 2013, que fijó la posición del PSOE en un conflicto territorial entonces incipiente. Sin embargo, aquel texto, auspiciado por el entonces secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba —fallecido en mayo de 2019—, fue producto de muchos meses de debate interno y de intercambio de papeles. Tampoco esta convención tiene la entidad de una conferencia política —la última, de hecho, fue la de noviembre de 2013, con Rubalcaba en el trono del PSOE—, con un texto que es enmendado de abajo arriba. No por ello confiere menos importancia Ferraz a esta cita del fin de semana. Es la primera convención política en más de una década, con la que pretende demostrar que tiene "proyecto, liderazgo y equipo", frente a una derecha que, a juicio de los socialistas, carece de ellos.

Los socialistas quieren contrastar que tienen "proyecto, liderazgo y equipo" frente a la "oposición destructiva" del PP, que "no tiene proyecto de país"

El PP, recalcan en la cúpula de Sánchez, "nunca reconoce la legitimidad del PSOE en el Gobierno porque tiene una visión patrimonialista del poder", pero además "no tiene una sola propuesta para los retos del país: ni para el crecimiento económico y el combate a la desigualdad, ni respecto a Cataluña y la convivencia, ni para afrontar la transición ecológica y el futuro de Europa, ni para luchar por la igualdad, ni para perseguir la equidad intergeneracional". "[Alberto Núñez] Feijóo y [Santiago] Abascal no tienen proyecto de país. Lo que aportan es un 155 permanente o la ilegalización de partidos", insisten.

La convención intentará, pues, "articular todas las propuestas socialistas" para que se apliquen en todos los niveles donde el partido está presente. Es decir, no solo guiará la acción del Ejecutivo central, sino que servirán de brújula para los dirigentes en comunidades y ayuntamientos, estén en el gobierno o en la oposición. Porque Ferraz reivindica que su "estilo de hacer oposición es muy distinto al del PP". Si los conservadores, subrayan fuentes de la dirección, representan "el no a todo" —la "oposición destructiva", según Sánchez—, los socialistas buscan "influir en los gobiernos" que no lideran para que no haya "retrocesos" ni se den "pasos atrás" y se incorporen parte de sus ideas. "Frente al insulto y al ataque antidemocrático, el PSOE no va a caer en las provocaciones del cuanto peor, mejor. Vamos a articular el diálogo, el método de escucha y el entendimiento para dar respuesta a las demandas de la sociedad. Con templanza, sin ruido, con pedagogía pero con esperanza. Somos más los que queremos llegar a acuerdos frente a los que quieren seguir en las trincheras", explican.

El cónclave "percutirá en la misma dirección que la investidura del presidente". Es decir, que buscará trabajar "para el interés general, el bien común". Y mirará mucho a Europa. Sánchez es a la vez presidente de la Internacional Socialista y es uno de los principales líderes de la socialdemocracia europea. "España se ha convertido en punta de lanza de nuestra familia política —relata una responsable del comité organizador de la convención—. Nos miran todos. Aquí se logró parar a la ultraderecha", justo en un año, 2023, en el que han vencido los ultraderechistas Javier Milei en Argentina y Geert Wilders en Países Bajos. "Aquí hay políticas vanguardistas", continúa esta dirigente, "Pedro siente que tiene la responsabilidad de poner a punto al PSOE para responder a los retos de la socialdemocracia y mirar al futuro. Se trata de poner en tensión al partido, de ponerlo en pensamiento y acción".

La reunión del fin de semana mirará mucho también a Europa, por la proximidad de las elecciones y porque Sánchez está convencido de que España es "la punta de lanza de la socialdemocracia"

Sánchez estará el sábado y domingo en A Coruña en la convención, a la que acudirán todos los ministros socialistas del Gobierno. También se prevé la presencia de prácticamente todos los barones regionales. Es segura una ausencia, la del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de viaje con empresarios esta semana en China —un desplazamiento en el que ya se empezó a trabajar desde el pasado octubre, cuentan en su equipo—, país del que regresa el sábado por la noche, ya de madrugada. Javier Lambán y Guillermo Fernández Vara, expresidentes de Aragón y Extremadura, podrían descolgarse por su estado de salud, ya que los dos están siendo tratados por cáncer. Page y Lambán son los dos líderes autonómicos socialistas más críticos con Sánchez, y los que han cargado sin reparos contra la ley de amnistía y, antes, con la reforma del Código Penal que acabó con la sedición y rebajó la malversación.

Un cambio que afectará a "cuatro o cinco compañeros"

Habrá un fleco orgánico en la reunión de este fin de semana en Galicia, porque el domingo por la mañana Sánchez reunirá al comité federal del PSOE para ratificar los cambios en su ejecutiva. Se tratará de una "pequeña remodelación" cuyo alcance se conocerá antes de que arranque la convención. Ferraz no adelanta todavía los nombres: sí precisa que no habrá una ampliación de la dirección, sino entradas y salidas en la cúpula. Será un reajuste "muy quirúrgico", que afectará "a cuatro o cinco compañeros, no más". El cargo más importante que debe cubrirse es el de portavoz de la ejecutiva, puesto que dejó vacante en noviembre Pilar Alegría, al ascender a portavoz del Gobierno. Lo previsible es que sea sucedida por otra mujer, una dirigente que podría no sentarse ahora mismo en la dirección.

El comité federal sancionará los cambios en la dirección: se cubrirá la vacante de Alegría y se acoplará la cúpula a los cambios en el Ejecutivo. Isabel Rodríguez, por ejemplo, saldrá reforzada

El resto de retoques, siguen en Ferraz, obedecen a la lógica. Por ejemplo, para ocupar áreas cuyos titulares ya no están en España —Miquel Iceta, secretario de Memoria Democrática y Laicidad, fue nombrado el mes pasado embajador ante la Unesco, con sede en París—, o para reajustar carteras. Un caso claro es el de Arcadi España, exconseller valenciano y ahora secretario de Estado de Política Territorial, que cederá sus competencias en Vivienda y Agenda Urbana de la cúpula del PSOE a la ministra del ramo, Isabel Rodríguez, que hasta ahora era vocal sin cartera de la ejecutiva. Otro reemplazo claro es el de Eva Granados: ella fue relevada como portavoz en el Senado por el líder del partido en Andalucía, Juan Espadas.

El candidato del PSdeG a la Presidencia de la Xunta, José Ramón Gómez Besteiro (d), junto al alcalde de Carnota, Juan Manuel Saborido, y representantes del sector de la pesca, en su visita a la playa de Portocubelo, este 14 de enero de 2024 en Carnota, A Coruña. EFE / LAVANDEIRA JR

La convención se vertebra en torno a tres foros y nueve paneles. El de Zapatero, el viernes por la tarde, es el primer foro. El segundo, en la mañana del sábado 20 de enero, abordará la modernización y la reindustrialización, y en él, moderados por el eurodiputado gallego Nicolás González Casares, intervendrán la vicepresidenta primera del Gobierno y número dos del PSOE, María Jesús Montero, y el candidato del PSdeG a la Xunta, José Ramón Gómez Besteiro. El tercero será ya por la tarde, sobre convivencia. Lo moderará la eurodiputada catalana Laura Ballarín y tomarán la palabra el líder del PSE y candidato socialista en las autonómicas vascas, Eneko Andueza, y el presidente asturiano, Adrián Barbón.

Nueve paneles con ministros y dirigentes socialistas

En los nueve paneles, que se celebrarán entre la mañana y la tarde del sábado, intervendrán ministros y dirigentes del PSOE, y tocarán distintos palos: Economía para las personas —aquí debutará el nuevo titular de Economía, Carlos Cuerpo—, Reforzando el Estado del bienestar, Cogobernanza —estarán los presidentes de Asturias y Navarra, Adrián Barbón y María Chivite, moderados en principio por Guillermo Fernández Vara—, Cohesión territorial, Paz y nuevo orden mundial, Igualdad, Transición Ecológica, Calidad y memoria democrática —en el que participa el otro hombre fuerte del Ejecutivo, Félix Bolaños, además del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska—, y Europa —el último panel, en el que debatirán el alto representante de la UE para Política Exterior y de Seguridad, Josep Borrell; el primer secretario del PSC, Salvador Illa, y la presidenta de S&D en la Eurocámara, Iratxe García—.

Montero también tendrá un papel protagonista en las dos jornadas centrales del cónclave, que será cerrado por Besteiro y Sánchez

El domingo, la jornada arrancará con la doble reunión de la ejecutiva y del comité federal, donde se sancionarán los cambios en la cúpula —será una cita de trámite, sin intervenciones de los miembros del máximo órgano entre congresos—. Luego, ya en el plenario, la secretaria de Internacional, Hana Jalloul, una dirigente al alza, conducirá la entrega de los Premios Manuel Marín, con los que el PSOE galardona a dirigentes con una trayectoria reseñable en el ámbito europeo, autonómico y municipal. Seguirá el mitin de clausura, con las intervenciones de Montero, Besteiro y Sánchez.

Tras el cierre de la convención, no acaba el trabajo. Como recuerdan en Ferraz, la siguiente labor será la de "salir a la calle a explicar las resoluciones que se aprueben". Pero esa será la libreta que se abra nueva tras la cita en A Coruña.