Juan Carlos I ha llegado alrededor de las siete de la tarde de este sábado a Pontevedra para ver el partido que disputa su nieto, Pablo Urdangarín, entre el Club Cisne Balommano y el Barça B.

El rey emérito dejó poco antes de las 19 horas el chalet de Nanín (Sanxenxo, Pontevedra), propiedad de su amigo el empresario Pedro Campos, en el que está alojado este fin de semana en su primer regreso a España desde que hace dos años se fuera a Abu Dabi en medio de la polémica desatada por sus negocios en el extranjero y la posible ilegalidad de los mismos.

El encuentro forma parte de la penúltima jornada de la fase de ascenso a la Liga Asobal de balonmano, máxima competición a nivel nacional.

Juan Carlos I acude al partido tras navegar varias horas a bordo de su barco "Bribón 500", aunque finalmente se ha quedado sin competir en la segunda jornada de regatas del Trofeo Viajes InterRías por las condiciones meteorológicas.